Después que Estados Unidos mató al líder militar iraní Soleimani, la respuesta de China, otro jugador clave en el Medio Oriente, ha sido bastante silenciosa. El régimen chino pidió «diálogo, no escalamiento». Pero un experto dice que la huella de China en el Medio Oriente no es tan inocente como su sentimiento.
El experto en China y exmiembro del personal del Departamento de Defensa, Joseph Bosco, dijo que China quiere usar a Irán para distraer al presidente Trump, evitar que se focalice en sus estrategias de la región Indo-Pacífico y abordar la amenaza del régimen chino.
Dijo que el apoyo de China podría ser un factor importante en las recientes provocaciones de Irán.
«Mientras más crisis tenga que enfrentar Estados Unidos en otras partes del mundo, mejor será para el interés estratégico de China, tal como ellos lo ven», dijo a NTD el exdirector de asuntos de China de la Oficina del Secretario de Defensa.
El régimen chino tiene estrechos lazos comerciales y diplomáticos con Irán. También se descubrió que socava las sanciones de Estados Unidos contra Irán.
Días antes de la ejecución de Soleimani, China, Rusia e Irán organizaron un ejercicio militar conjunto. Es la primera vez que Irán se une a un ejercicio militar de esta escala desde su Revolución Islámica de 1979.
El 31 de diciembre de 2019, el ministro de relaciones exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, visitó Beijing para reunirse con su homólogo chino, Wang Yi, por cuarta vez en un año.
En septiembre, Estados Unidos impuso sanciones a varias entidades e individuos chinos por transferir petróleo de Irán.
En 2018, Estados Unidos acusó al director financiero (CFO) del gigante tecnológico de China Huawei, Meng Wanzhou, por supuestamente comerciar con Irán.
Las importaciones de defensa de Irán provienen principalmente de Rusia y China.
«Ellos (el régimen chino) quieren presentar la imagen de ser un actor responsable, [un] jugador internacional que atenúa los conflictos en lugar de agitarlos», dijo Bosco, «pero detrás de escena, realmente están agitando los problemas en muchos lugares».
«Quieren tener influencia política allí», dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo, sobre la huella de China en Oriente Medio.
“No los molestamos si intentan tener un compromiso económico. Queremos que la economía china tenga éxito», dijo Pompeo durante su discurso el lunes en la Universidad de Stanford, «pero he sido bastante claro sobre los riesgos que surgen cuando no hay un acuerdo directo y transparente con los chinos».
El Medio Oriente puede aprender de sus predecesores en términos de aceptar dinero chino.
Pompeo dijo que los países del sudeste asiático y África ahora reconocen que algunas de sus transacciones con el régimen chino han demostrado ser «trampas de deuda», lo que «coloca a estos países en la esclavitud política del partido comunista chino».
«No lo anticiparon. No lo quieren. Y ahora vienen a Estados Unidos para que les ayude a encontrar el camino de regreso”, apuntó.
Pompeo dijo que los países del Medio Oriente están en una dinámica diferente, ya que estos son países ricos que no necesitan dinero chino. Pero Estados Unidos se asegura de que sean conscientes de los riesgos.
Después del 11 de septiembre, Estados Unidos cambió su enfoque; de mantener a Beijing bajo control, a tomar medidas enérgicas contra el terrorismo en el Medio Oriente. Algunos expertos han argumentado que China se ha convertido en el beneficiario de facto de la tragedia. Desde 2001, el régimen comunista chino ha experimentado un amplio crecimiento y expansión.
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