Italia ha registrado 172 muertos por el virus del PCCh (comúnmente conocido como nuevo coronavirus) en el último día, hasta un total de 30,911, y un leve repunte en los contagios, mientras vive una gradual desescalada de las medidas tras más de dos meses de restricciones y confinamiento.
El número de contagios totales desde el inicio de la emergencia el 21 de febrero es de 221,216, con un aumento respecto a ayer de 1402, de acuerdo a los datos difundidos este martes por Protección Civil.
Sin embargo en este dato se incluyen 419 infecciones que la región septentrional de Lombardía, la más azotada del país, no había comunicado en las «semanas precedentes» a las autoridades.
Por eso, los nuevos contagios en las últimas veinticuatro horas son realmente 983, un leve repunte frente a los 714 de ayer lunes.
El número de personas enfermas experimenta una importante caída de 1222 y en estos momentos en Italia hay 81,266 contagiados, de los que la enorme mayoría, 67,339, están aislados en sus casas y 12,865 hospitalizados con síntomas.
Siguen a la baja los pacientes ingresados en Cuidados Intensivos, actualmente son 952, con un descenso de 47 respecto a ayer, lo que sigue dando oxígeno a los hospitales italianos, tantas veces al borde del colapso.
Crece el número de personas curadas, que ya suman 109,039, un 2.3 % más que ayer.
Italia se encuentra en pleno proceso de desescalada, tras más de dos meses de confinamiento por la pandemia: el 4 de mayo unos 4.5 millones de personas volvieron al trabajo, al reanudarse en los sectores de la construcción y la manufactura.
También se han abierto numerosos bares y restaurantes que sirven comida para llevar, mientras que los negocios de primera necesidad como alimentarios y farmacias nunca cerraron.
La población, además de para hacer la compra, por trabajo y por urgencias, puede salir de sus casas a practicar deporte, a pasear o a visitar a sus familiares, siempre con mascarilla y respetando las distancias de seguridad.
El 18 de mayo es el turno de bibliotecas, museos y comercios minoristas, mientras que el 1 de junio se prevé el regreso de las terrazas, los bares, los restaurantes y del sector de la estética, como las peluquerías, pero el Gobierno ha permitido que sean las regiones las que decidan qué reabrir en base a la evolución de los contagios que registren.
Por ello, se espera la reapertura del sector de la restauración en gran parte del país.
El lunes también volverán a oficiarse las misas con fieles en Italia.
Este martes el Gobierno del primer ministro Giuseppe Conte se reúne para tratar de aprobar un decreto con ayudas a empresas y familias afectadas por la pandemia por valor de 55,000 millones de euros, que se suma a un primer decreto con 25,000 millones.
En el texto que se deberá aprobar en las próximas horas se incluye una regularización temporal de 600,000 inmigrantes jornaleros para suplir la falta de mano de obra comunitaria en los campos italianos, debido al cierre de las fronteras por la pandemia.
Esta regularización está provocando el retraso del decreto, pues divide a la coalición gobernante: a favor están como el Partido Demócrata, Libres e Iguales o Italia Viva, mientras que el Movimiento Cinco Estrellas tiene dudas.
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