Johnson & Johnson espera tener hasta 800 millones de vacunas disponibles a principios del próximo año para la enfermedad COVID-19, una de las proyecciones más fuertes de una compañía involucrada en la investigación de vacunas.
Actualmente no existen vacunas para COVID-19, que es causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), un nuevo coronavirus que surgió en China continental el año pasado. Tampoco hay tratamientos probados, aunque algunos se han mostrado prometedores.
Johnson & Johnson está desarrollando tres vacunas, una la candidata principal y dos de reserva, dijeron los funcionarios durante la primer llamada de ganancias del trimestre esta semana. Con la autorización de uso de emergencia, la vacuna podría estar disponible para el primer trimestre del 2021.
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«Planeamos ser los primeros en realizar pruebas en humanos a principios de septiembre. Si las cosas avanzan, tendríamos una revisión de datos en diciembre y eso esperamos que conduzca a una aprobación a inicios del 2021», dijo Joe Wolf, el director financiero de Johnson & Johnson, a Yahoo Finance en una entrevista.
La compañía está fabricando en riesgo «para asegurar que si el desarrollo clínico y los ensayos tienen éxito, estamos en posición de pulsar el interruptor y [estar] listos para empezar, para crear un gran acceso en todo el mundo», añadió.
La disponibilidad a principios del año próximo dependerá de la autorización de uso de emergencia, dijeron los ejecutivos durante la llamada de ganancias del primer trimestre de la compañía esta semana.
Johnson & Johnson está usando una plataforma de vacunas Janssen, que tiene un fuerte perfil de seguridad. Más de 50,000 personas han sido vacunadas con la plataforma, según Paul Stoffels, director científico de la compañía.
Johnson & Johnson comenzó a trabajar en las candidatas a la vacuna en enero, después de que el genoma del virus del PCCh fuera presentado, y construyó múltiples candidatas después de insertar proteínas de espiga (proteína S) en un adenovirus, un virus del resfriado común. La candidata principal y las dos de reserva fueron elegidas después de las pruebas preclínicas. El siguiente paso es producir bancos de muestras maestras para las tres candidatas antes de que las pruebas en humanos comiencen en septiembre. Se espera que los datos de las pruebas estén disponibles en diciembre, estableciendo la potencial autorización de uso de emergencia.
Alex Gorsky, el CEO de la compañía, dijo que la empresa quiere que la vacuna sea asequible y la distribuirá «sin fines de lucro para el uso de emergencia en caso de pandemia».
La compañía planea fabricar algunas dosis en una instalación en los Países Bajos y otras dosis en un edificio que está reacondicionando en Maryland. Los ejecutivos están celebrando conversaciones con posibles asociados en Europa y Asia y tienen previsto anunciar asociaciones en las próximas semanas.
Johnson & Johnson está colaborando con el Departamento de Salud y Servicios Humanos en la vacuna y en los esfuerzos de la empresa por probar los medicamentos existentes contra el virus. La Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado del organismo ha trabajado con la compañía en el pasado en vacunas contra el Ébola y los nuevos virus de la gripe.
Otras compañías están desarrollando o ya han desarrollado vacunas, incluyendo Moderna e Inovio.
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