La piloto de skeleton belga Kim Meylemans informó el 3 de febrero de que, tras la intervención del COI, por fin le habían dado una habitación en la Villa Olímpica de Beijing.
La deportista de 25 años lloró en las redes sociales el 2 de febrero al explicar que se encontraba en un pabellón de aislamiento después de haber estado en cuarentena durante tres días a pesar de haber dado negativo en las pruebas de COVID-19, y que le preocupaba no poder participar en la competición.
«Ahora estoy en un ala igual de aislada, pero al menos he vuelto a la villa. Me siento segura y podré entrenar un poco mejor aquí, así que gracias a todos», dijo Meylemans en un video de Instagram el 3 de febrero.
Actualmente, Meylemans vive en una habitación individual en la Villa Olímpica en calidad de contacto cercano de un paciente de COVID-19, donde puede entrenar pero tiene que tomar el transporte sola, y comer sola.
Un emotivo video
Meylemans posteó en Instagram un emotivo video desde una habitación de hotel de aislamiento el 2 de febrero, en el que lloraba pidiendo ayuda porque el régimen de Beijing la puso en aislamiento y le dijo que tenía que quedarse allí al menos siete días sin poder entrenar adecuadamente.
«Se supone que debo permanecer aquí otros siete días con dos PCR [pruebas de COVID-19] al día y sin contacto con nadie más», dijo Meylemans con lágrimas en los ojos en el video. «Les pido a todos que me den algo de tiempo para considerar mis próximos pasos. Porque no estoy segura de poder soportar 14 días más y la competición olímpica estando ahora en este aislamiento».
Meylemans voló a Beijing el 29 de enero con sus compañeros olímpicos belgas. Fue puesta en cuarentena tras entrar en China porque su prueba de PCR de COVID-19 a su llegada fue positiva. Se le dijo que se le permitiría entrar en la Villa Olímpica después de tres días de resultados negativos en las pruebas, y que sería tratada como un contacto cercano de alguien que dio positivo.
La atleta belga dio negativo en los días siguientes en el centro de cuarentena, pero el régimen se negó a liberarla y, en su lugar, la trasladó a otro hotel de aislamiento para que continuara con el llamado aislamiento.
Meylemans mencionó en su cuenta de las redes sociales que había dado positivo a principios de enero. Pero luego se sometió a 12 pruebas en su país de origen, y todos los resultados fueron negativos, por lo que se le permitió volar a China para los juegos.
Intervención del COI
El COI respondió al video de Meylemans el 2 de febrero.
«Cuando el COI se enteró de su situación personal tras su llegada al hotel, se puso inmediatamente en contacto con el CON de Bélgica para garantizar que se le ofreciera rápidamente el apoyo adecuado», declaró el COI. «Los contactos cercanos [de los pacientes de COVID-19] pueden entrenar y competir, vivir en la Villa Olímpica».
El COI dijo que el aislamiento de Meylemans en el segundo hotel era una solución «temporal» porque «no había ninguna habitación de este tipo inmediatamente disponible» en la Villa Olímpica.
La prueba de skeleton femenino tendrá lugar el 11 de febrero en el Centro Nacional de Deslizamiento en Yanqing. Y las pruebas oficiales de entrenamiento en el centro comenzarán el 7 de febrero.
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