El jueves, una juez federal impidió temporalmente que Arizona hiciera cumplir una ley que prohíbe que las personas transgénero jueguen en equipos deportivos escolares de niñas.
La juez de Tucson concedió una medida cautelar para permitir la tramitación de una demanda (pdf) presentada en nombre de dos transexuales preadolescentes contra la ley estatal «Save Women’s Sports Act» (Ley para salvar los deportes de las mujeres), aprobada por la Asamblea Legislativa el año pasado
El Superintendente de Instrucción Pública Tom Horne, acusado en el caso, dijo que la decisión será apelada.
“La Corte Suprema de Estados Unidos finalmente decidirá esto y fallará a nuestro favor”, dijo Horne en un comunicado.
Arizona es uno de varios estados que han aprobado leyes para preservar la regla que dice que el acceso de los estudiantes a los equipos deportivos escolares u otras instalaciones se basa en su sexo al nacer en lugar de su identidad de género elegida.
En la demanda están representados dos transexuales preadolescentes, uno de 15 años que quiere jugar en el equipo femenino de voleibol del colegio y otro de 11 años que quiere competir en las competiciones femeninas de fútbol, baloncesto y campo traviesa.
Según la demanda, jugar en los equipos de niños de la escuela no es una opción aceptable para ninguno de los jóvenes que se identifican como transgénero.
“Sería doloroso y humillante para (el demandante) verse obligado a jugar en equipos de niños”, dice la demanda, y agrega que contradiría el tratamiento médico que los menores han estado recibiendo.
Los padres de los transexuales dicen que están satisfechos con la decisión de la corte.
“Nos alivia que la juez vio más allá de los conceptos erróneos y la retórica dañina utilizada para demonizar a las niñas transgénero. Nuestra hija espera hacer nuevos amigos y practicar los deportes que ama”, dijeron los padres de Jane Doe en un comunicado del Centro Nacional por los Derechos de las Lesbianas, que está ayudando a representar a la familia.
Los funcionarios de Arizona que patrocinaron la ley dijeron que la ley es justa y aprueba regulaciones federales al proteger a niños y niñas.
“El Título IX tenía como objetivo brindar a las niñas las mismas oportunidades para practicar deportes. Cuando un niño biológico juega en un deporte de niñas, las pone en desventaja”, le dijo Horne a The Associated Press cuando se presentó la demanda en abril. “Ha habido muchas noticias sobre niñas que trabajaron duro para sobresalir en sus deportes, descubrieron que no podían cuando tenían que competir contra niños biológicos y quedaron devastadas por eso”.
Las familias afirman que la prohibición viola la Cláusula de Igualdad de Protección en la Constitución de EE.UU., el Título IX y las Leyes de Estadounidenses sobre Discapacidades y Rehabilitación.
“Esta ley prohíbe que las niñas transgénero compitan con otras niñas en todos los deportes, en todos los grados e independientemente de las circunstancias individuales de cada niña”, dijo Rachel Berg, abogada del Centro Nacional para los Derechos de las Lesbianas, en un comunicado de prensa en abril. “No puede sobrevivir al escrutinio constitucional y pone en peligro a los niños transgénero”.
Ambos transexuales reciben tratamiento médico para su disforia de género, y sus profesionales médicos les han recomendado que adopten la identidad de una niña en todos los aspectos de su vida.
“Para muchos niños, practicar deportes es una parte importante de su experiencia escolar”, dice la denuncia. “Los demandantes no quieren nada más que una oportunidad equitativa para disfrutar de la misma experiencia: Probar y participar en los equipos de voleibol, fútbol, baloncesto y campo traviesa de niñas en sus escuelas. Sin embargo, la ley de Arizona niega a las Demandantes esa oportunidad porque las Demandantes son niñas transgénero”.
Nunca “experimentarán la pubertad masculina”
Al emitir la orden judicial preliminar, la jueza Jennifer G. Zipps dijo que la evidencia presentada por el experto de los demandados “no es relevante porque los demandantes no han experimentado ni nunca experimentarán la pubertad masculina”.
Ella dijo que no hay evidencia que sugiera que los niños biológicos a los que se les recetaron bloqueadores de la pubertad para la disforia de género y «no han pasado por la pubertad masculina» tendrían una ventaja atlética o resultarían un riesgo para la seguridad de otros jugadores si juegan en equipos de niñas.
“[Resumir] la evidencia hace que sea muy probable que la diferencia de sexo en la testosterona circulante de los adultos explique la mayoría, si no todas, las diferencias de sexo en el rendimiento deportivo”, escribió la juez en la orden judicial.
La juez también dijo que la evidencia presentada “de que las niñas tienen más grasa corporal que los niños al nacer” “no era relevante para la pregunta ante el Tribunal”, que era específica para los hombres preadolescentes.
La juez Zipps agregó que los niños “sufrirán daños mentales, físicos y emocionales severos e irreparables si se les aplica la Ley porque no pueden jugar en equipos deportivos de niños”, lo que sería “doloroso y humillante”.
“Existe un consenso entre las organizaciones médicas que dice que la identidad de género es innata y no se puede cambiar a través de tratamientos psicológicos o médicos”, dijo el fallo, citando a la Dra. Stephanie Budge, fundadora del Laboratorio de Investigación Trans de la Universidad de Wisconsin-Madison.
Con información de Associated Press.
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