Un juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos desestimó el viernes la demanda del expresidente Donald Trump contra Twitter, rechazando su argumento de que la plataforma violó sus derechos de libertad de expresión de la Primera Enmienda cuando censuró sus tuits y suspendió permanentemente su cuenta.
Sin embargo, el juez James Donato, del tribunal federal de distrito de San Francisco, permitirá a los abogados de Trump presentar una demanda enmendada antes del 27 de mayo, en consonancia con su fallo escrito del viernes, pero deberá solicitar el permiso del tribunal para añadir nuevas reclamaciones o demandados, reportó Fox.
Trump, que fue expulsado de la plataforma el 8 de enero de 2021, dos días después de la irrupción en el Capitolio de EE. UU., presentó por primera vez la demanda para impugnar las suspensiones el 7 de julio de 2021.
En ese momento, Trump y su equipo dijeron que las demandas, que también se presentaron contra Google y Facebook, tenían que ver con la protección del derecho a la libertad de expresión de la Primera Enmienda. Argumentaron que sus derechos fueron denegados cuando las tres grandes compañías tecnológicas lo suspendieron.
El 45º presidente de Estados Unidos dijo que el presunto control de las redes sociales sobre el discurso político estaba «destruyendo el país».
Los abogados de Trump también trataron de impugnar la Sección 230 de la Ley de Decencia de las Comunicaciones como inconstitucional. También argumentaron que Twitter utilizó «prácticas engañosas y equívocas» que violan la Ley de Prácticas Comerciales Engañosas y Desleales de Florida.
Pero según Reuters, Donato dijo en su fallo escrito que la Primera Enmienda no se aplica a las empresas privadas, y añadió que Trump «no parte de una posición de poder».
En el momento en que Trump fue expulsado de la plataforma era un importante usuario de Twitter, posteando para sus 88 millones de seguidores varias veces al día.
Citando los sucesos del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos, Twitter cerró permanentemente la cuenta de Trump diciendo que algunos de sus tuits violaban la política de «glorificación de la violencia» de la plataforma.
La compañía alegó que un discurso que Trump pronunció cerca del Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero, en el que alegó que las elecciones habían sido robadas y pidió a sus partidarios que protestaran pacíficamente, contribuyó a la violencia y a la irrupción en el edificio del Capitolio que se produjo a continuación.
Ese día, varios miles de personas se reunieron para protestar contra la formalización del entonces presidente electo Joe Biden, durante una sesión conjunta del Congreso para certificar los votos electorales. La certificación se retrasó varias horas cuando cientos de personas de entre la multitud de manifestantes entraron en el edificio, forzando un cierre mientras los legisladores eran evacuados.
Hasta abril, los fiscales han acusado a casi 800 personas en casi todos los 50 estados de delitos relacionados con la irrupción.
Twitter, considerado por muchos como la plaza del mundo digital, denunció que algunos de los tuits de Trump podrían animar a la gente a replicar los acontecimientos del 6 de enero, según Reuters.
Trump presentó primero su demanda en Florida antes de que fuera trasladada a California.
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