Un juez de Georgia declaró el 15 de noviembre que la prohibición del aborto en el estado era inconstitucional y ordenó a las autoridades que dejen de aplicarla.
El proyecto de ley 481 de la Cámara de Representantes de Georgia, conocido como Ley LIFE, declara que los niños no nacidos son personas vivas con derechos y prohíbe los abortos una vez que se detecta un latido.
Sin embargo, en el momento en que se promulgó, algunas partes clave violaban la Constitución de Estados Unidos y los precedentes de la Corte Suprema, principalmente la decisión del caso Roe vs. Wade de 1973 que concluyó que el acceso al aborto era un derecho constitucional, dijo el juez de la Corte Suprema del condado de Fulton, Robert McBurney, en un fallo de 15 páginas.
«En ese momento —la primavera de 2019— en todo Estados Unidos, incluido Georgia, era inequívocamente inconstitucional que los gobiernos —federal, estatal o local— prohibieran los abortos antes de la viabilidad», dijo McBurney. «Sin embargo, la Ley LIFE, a través de la Sección 4, hizo precisamente eso: un médico que se enfrente a una solicitud de interrupción de un embarazo antes de la viabilidad, es decir, en un momento en el que el feto no pudiera sobrevivir en absoluto fuera del vientre de la madre, estaría cometiendo un delito si cumpliera los deseos de su paciente».
Un juez federal tomó la misma decisión en un caso anterior, pero la orden fue anulada por un corte de apelaciones después de que la Corte Suprema revocara a Roe en su sentencia de junio en el caso Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organization. Sin embargo, según la legislación de Georgia, las evidencias de la constitucionalidad se determinan en el momento en que se promulga una nueva ley.
El poder legislativo puede aprobar una nueva prohibición desde que Dobbs cambió el precedente de la Corte Suprema, pero «solo después de que nuestro poder legislativo determine, a la luz de la atención pública, que indudablemente y de forma adecuada asistirá a un debate importante y consecuente, si los derechos de los niños no nacidos justifican tal restricción del derecho de las mujeres a la autonomía corporal y a la privacidad», dijo McBurney.
El juez afirmó que las autoridades tienen prohibido aplicar la prohibición del aborto después del latido del corazón. Las autoridades tienen que remitirse a una ley anterior, que prohíbe los abortos después de las 19 semanas, a menos que un médico considere que el aborto es necesario para evitar la muerte o «un grave riesgo de deterioro físico sustancial e irreversible de una función corporal importante de la mujer embarazada», o para preservar la vida de un niño no nacido.
El caso contra la prohibición del aborto fue presentado por la Unión Americana de Libertades Civiles, Planned Parenthood y otros grupos.
«Nosotros celebramos esta victoria en Georgia que restablece el derecho al aborto y la libertad reproductiva», dijo a través de una declaración Alexis McGill Johnson, presidenta y directora general de Planned Parenthood.
El fiscal general de Georgia, el republicano Chris Carr, ya notificó que apelará el fallo, informó un portavoz a los medios de comunicación en una declaración.
La oficina de Carr «seguirá cumpliendo con su deber de defender las leyes de nuestro estado en las cortes», añadió el portavoz.
«El fallo de hoy pone las creencias personales de un juez por encima de la voluntad de la legislatura y del pueblo de Georgia», dijo la oficina del gobernador de Georgia, Brian Kemp, también republicano. «El estado ya presentó un aviso de apelación por lo que seguiremos luchando por la vida de los niños no nacidos de Georgia».
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