Un juez dictaminó el jueves que el caso electoral del expresidente Donald Trump en Georgia no comenzará en octubre.
El fallo (pdf) del juez Scott McAfee de la Corte Superior del condado de Fulton afirmó que el expresidente será juzgado por separado y después de los juicios de dos de sus exabogados, Kenneth Chesebro y Sidney Powell, incluidos en el caso.
No se ha fijado una fecha específica para el juicio del presidente Trump en esta causa, donde en agosto 19 acusados recibieron cargos penales por violar la Ley de Organizaciones Corruptas e Influidas por Crimen Organizado (ley RICO) de Georgia, junto con una larga lista de otros cargos, en sus esfuerzos por disputar los resultados de las elecciones de 2020 en Georgia.
Los registros en línea de la Oficina del Sheriff del condado de Fulton mostraron que el presidente Trump fue fichado con 13 cargos relacionados con una estrategia de varios abogados que asesoraron al presidente Trump para establecer grupos alternativos de electores en diversos estados, posponiendo así el recuento de votos electorales, acusándolos de que equivalía a una empresa criminal. Todos se declararon no culpables.
La fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, había estado presionando para que se juzgara a los 19 acusados juntos, argumentando que sería más justo y más eficiente.
El juez McAfee citó preocupaciones logísticas y cuestiones legales pendientes al separar el juicio de los abogados Chesebro y Powell del presidente Trump y de los otros 16 coacusados.
“La precaria capacidad de la Corte para salvaguardar los derechos al debido proceso de cada acusado y garantizar una preparación previa al juicio adecuada en la actual vía acelerada pesa mucho, si no decisivamente, a favor de la separación”, escribió el juez. También insinuó la posibilidad de dividir aún más los casos entre los 17 acusados restantes.
El juez expresó dudas sobre la afirmación de los fiscales de que un juicio conjunto para los 19 acusados agilizaría el proceso.
Además, indicó que la corte del condado de Fulton no tiene espacio para acomodar a todos los involucrados y que encontrar un lugar más grande podría plantear problemas de seguridad.
Los fiscales argumentaron que ellos presentarían los mismos testigos y pruebas bajo la ley RICO de Georgia para cada juicio en este caso, y la semana pasada dijeron al juez que esperarían que cualquier juicio durara cuatro meses, excluyendo la fase de selección del jurado.
Por su parte, el juez McAfee indicó que cada acusado todavía necesita tiempo para los comentarios introductorios, argumentos finales, contrainterrogatorios e impugnaciones de pruebas.
«Por lo tanto, incluso si el caso del estado sigue siendo idéntico en duración y el tiempo total invertido por la corte aumenta, la carga de los jurados para cada juicio individual se reduce a través de juicios separados más cortos», escribió el juez.
En una conferencia de prensa no relacionada el jueves, la Sra. Willis dijo que su oficina es capaz de juzgar casos importantes. «No nos asustan las grandes imputaciones RICO y estamos aquí para la tarea y listos para comenzar».
La Sra. Powell y el Sr. Chesebro habían solicitado un juicio rápido. El 6 de septiembre, el juez McAfee fijó que el juicio comenzaría el 23 de octubre. También indicó que intentará tener un jurado formado antes del 3 de noviembre para satisfacer sus solicitudes de un juicio rápido.
«Con cada acusado adicional involucrado en el proceso voir dire, una tarea ya hercúlea se vuelve más improbable», escribió el juez.
La Sra. Powell y el Sr. Chesebro también habían solicitado ser juzgados por separado, pero el juez denegó esa solicitud.
El juez McAfee también señaló que cinco acusados actualmente buscan trasladar sus casos a una corte federal y el litigio sobre esa cuestión continúa.
«La forma en que una concesión de traslado a mitad del juicio afectaría este caso, particularmente en la cuestión de la doble incriminación, sigue sin estar clara y sin respuesta en el informe complementario del estado», escribió el juez, agregando que «pasar por alto o adjudicar erróneamente estas incertidumbres jurídicas corre el riesgo de una absolución automática».
El coacusado Mark Meadows, exjefe de gabinete del presidente Trump, había presentado una notificación para trasladar su caso a una corte federal un día después de la imputación. La solicitud fue denegada por el juez de distrito estadounidense Steve Jones el 8 de septiembre. El Sr. Meadows está apelando el fallo en el Circuito 11.
El jueves, el Sr. Meadows retiró una solicitud para suspender la orden de devolver su caso a la corte estatal mientras su apelación sigue pendiente. El acusado citó la aprobación de la corte de apelaciones de una revisión acelerada y la orden de programación que el juez McAfee dictó para los acusados que no serán juzgados en octubre.
Otros cuatro acusados han presentado notificaciones similares a la del Sr. Meadows para llevar su caso a una corte federal. Ellos tienen audiencias ante el juez Jones programadas para la próxima semana.
También el jueves, el juez McAfee celebró una audiencia de mociones para los abogados Chesebro y Powell, quienes pidieron los nombres de los co-conspiradores no imputados mencionados en la imputación en su contra, y están tratando de hablar con los grandes jurados que entregaron la imputación. El Sr. Chesebro quiere transcripciones, grabaciones e informes de un gran jurado especial que ayudó en la investigación.
Los fiscales acordaron revelar los nombres de los cómplices no imputados, pero objetaron las otras dos solicitudes. El juez McAfee dijo que se pronunciaría sobre esos dos asuntos más adelante.
Con información de The Associated Press
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