ATLANTA — El miércoles, un juez federal volvió a condenar a Julie Chrisley a siete años de prisión por fraude bancario y evasión fiscal, rechazando la petición de la estrella de reality show de pasar menos tiempo en la cárcel del que se le impuso originalmente.
Chrisley y su marido, Todd Chrisley, ganaron fama en su programa, «Chrisley Knows Best», que seguía a su unida familia y su extravagante estilo de vida. En 2022, un jurado los declaró culpables de conspirar por defraudar bancos comunitarios con más de 30 millones de dólares en préstamos fraudulentos. Los Chrisley también fueron declarados culpables de evasión fiscal por ocultar sus ingresos.
En junio, un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones del 11º Circuito de EE.UU. confirmó las condenas de los Chrisley, pero encontró un error legal en la forma en que el juez de primera instancia calculó la sentencia de Julie Chrisley al considerarla responsable de todo el esquema de fraude bancario. La corte de apelación devolvió el caso a la corte de primera instancia para que volviera a dictar sentencia.
El abogado de Julie Chrisley, Alex Little, pidió al juez que redujera la condena de su cliente a no más de cinco años. Argumentó que ella fue un actor menor en los delitos, que sus «delitos dispersos» fueron «errores dramáticos». También señaló que se comportó bien y aprovechó las oportunidades de enriquecimiento durante sus 20 meses en prisión hasta ahora, recibiendo más de 70 certificados.
En un escrito presentado ante la corte, Little argumentó que los dos hijos menores de Chrisley tienen dificultades para «funcionar en el día a día» debido a la ausencia de su madre.
La fiscal federal Annalise Peters instó al juez a reimponer la pena de siete años. Alegó que los fiscales fueron conservadores a la hora de acusar a los Chrisley, que Julie Chrisley era una «parte esencial» de un plan fraudulento y que no se disculpó, mostró remordimiento o admitió actuar mal.
El buen comportamiento de Chrisley en prisión no anula un «historial de 11 años de fraude, tras fraude, tras fraude», dijo Peters.
Peters dijo que sentía simpatía por la familia de Chrisley pero que su sufrimiento era «una consecuencia natural de las elecciones criminales de esta acusada».
Chrisley, vestida con un uniforme de prisión azul marino y con su pelo, antes rubio, ahora castaño oscuro, se dirigió al juez.
«Pido perdón por mis actos y por lo que me llevó a donde estoy hoy», dijo, para añadir después que su paso por la cárcel es “el momento más difícil de mi vida” y es duro para su familia.
«Nunca podré compensar a mis hijos por lo que tienen que pasar, y por eso lo siento», dijo.
Antes que los Chrisley se convirtieran en estrellas de la reality show, ellos y un antiguo socio comercial presentaron documentos falsos a bancos de la zona de Atlanta para obtener préstamos fraudulentos, dijeron los fiscales durante su juicio. Acusaron a la pareja de gastar espléndidamente en autos de lujo, ropa de diseñador, propiedades inmobiliarias y viajes, y de utilizar nuevos préstamos fraudulentos para pagar los antiguos. Según los fiscales, Todd Chrisley se declaró en quiebra y se desentendió de más de 20 millones de dólares en préstamos sin pagar.
La juez de distrito Eleanor Ross dijo que cuando condenó originalmente a Chrisley tuvo en cuenta su edad, su salud y el hecho que cuidaba de niños pequeños y padres ancianos. Ross dijo que impuso una pena inferior a las directrices para los delitos y la situación de Chrisley y por debajo de lo que habían solicitado los fiscales. Esa desviación de las directrices no se basó en el importe de las pérdidas ni en el número de años que Chrisley estuvo implicada, por lo que su condena no cambiará, dijo Ross.
La juez señaló que muchas de las personas que envía a prisión tienen hijos y la mayoría no tienen los recursos o el sistema de apoyo que tienen los Chrisleys.
«Me entristece cada vez que veo a los niños pasar por eso», dijo Ross, añadiendo después que se recuerda a sí misma: “Yo no soy la que tomó las decisiones para poner a los niños en esa situación”.
Dos de los hijos adultos de Chrisley, Savannah y Chase, asistieron a la audiencia. Savannah Chrisley, que habló en apoyo de la candidatura presidencial de Donald Trump en la Convención Nacional Republicana en julio, dijo a los periodistas fuera de la corte que el enjuiciamiento y la condena de sus padres tenían motivaciones políticas.
«Eso es lo que pasa con un juez nombrado por Obama», dijo mientras su madre era conducida fuera de la sala por alguaciles estadounidenses. Ross fue nombrada juez por el entonces presidente Barack Obama y asumió el cargo en noviembre de 2014.
Dijo que su madre apelará la nueva sentencia.
Todd Chrisley cumple una condena de 12 años entre rejas. A la pareja se le ordenó originalmente pagar 17.8 millones de dólares en restitución, pero Ross dijo el miércoles que la cantidad ahora es de 4.7 millones de dólares.
Todd Chrisley, de 56 años, se encuentra en una prisión federal de mínima seguridad en Pensacola, Florida, con fecha de salida en septiembre de 2032, según el sitio web de la Oficina Federal de Prisiones. Julie Chrisley, de 51 años, esta recluida en un centro de Lexington, Kentucky, y se espera que regrese allí.
Por Kate Brumback
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