La Junta Escolar de Alabama decidió prohibir que las escuelas públicas del estado enseñen la teoría crítica de la raza inventada por los marxistas, que según los críticos sostiene que los blancos y la nación misma son inherentemente racistas.
Esta iniciativa fue tomada mientras la resistencia pública a la teoría crítica de la raza (TCR) crece y se intensifica entre los padres de las comunidades de todo el país que están contraatacando protestando y asumiendo las juntas escolares locales. En 26 legislaturas estatales, se han presentado proyectos de ley o se han tomado otras medidas para evitar que se enseñe la TCR, informó Education Week.
La teoría crítica de la raza difunde una narrativa falsa y odiosa sobre la historia de EE. UU. que exacerba las tensiones raciales, dicen los opositores.
Los partidarios de TCR denuncian la cultura y la historia de Estados Unidos como «eurocentrismo» y «blancura». Según el artículo de la Comisión de 1776, creado por el expresidente Donald Trump, la TCR es «una variación de la teoría crítica aplicada al contexto estadounidense que enfatiza las divisiones raciales y ve a la sociedad en términos de grupos raciales minoritarios oprimidos por la mayoría blanca».
La Junta de Escolar de Alabama de nueve miembros, una agencia ejecutiva electa, determina la política educativa para las escuelas K-12 del estado. La gobernadora republicana de Alabama, Kay Ivey, también se desempeña como presidenta de la junta. Los otros miembros son elegidos para períodos de cuatro años por los votantes en ocho distritos educativos en todo el estado.
El 12 de agosto, la junta aprobó una resolución con 7 frente a 2 votos que prohíbe la enseñanza de material que «adoctrinaría a los estudiantes en ideologías sociales o políticas que promueven una raza o sexo por encima de otro».
La resolución fue aprobada siguiendo la líneas partidistas. Los siete republicanos votaron a favor, mientras que los dos demócratas de la junta votaron en contra.
La resolución se titula «La preservación de la libertad intelectual y la no discriminación en las escuelas públicas de Alabama».
“La Junta de Escolar del Estado de Alabama considera que todas las personas tienen los mismos derechos inalienables, sin distinción de raza o sexo”, dice la resolución.
“Los conceptos que imputan culpa, responsabilidad, tendencia a oprimir a otros, o la necesidad de sentir culpa o angustia frente las personas únicamente por su raza o sexo violan las premisas de los derechos individuales, la igualdad de oportunidades y el mérito individual”.
Tales conceptos «no tienen cabida» en el «sistema de educación pública» de Alabama, dice la iniciativa. Agrega que la junta «no apoyará ningún recurso o estándar de educación pública K-12 que pretenda adoctrinar a los estudiantes en ideologías sociales o políticas que promuevan una raza o sexo por encima de otro».
Junto con la resolución, la mesa directiva aprobó una norma administrativa que permitiría que se tomen acciones contra los maestros que contravengan la política. Los castigos se dejan a discreción de las juntas escolares locales, informó AL.com.
“Los maestros están a salvo por supuesto siempre que impartan el curso de estudio y hagan lo que sus juntas directivas les piden”, dijo el superintendente estatal Eric Mackey después de la votación.
Wayne Reynolds, miembro de la junta, apoyó la resolución.
“Es mi función como miembro de la junta estatal aceptar los problemas y resolverlos de forma gradual e inmediata. Sé que tenemos varios problemas con los que lidiar—el uso de mascarillas, incumplimientos—y los he abordado a todos de manera responsable como miembro de la junta”, dijo a AL.com.
“He visto los efectos del sesgo y sé que debemos enseñar equidad. Necesitamos tomar una posición. La junta estatal es responsable de poner una apuesta en el suelo y decir que esto es lo que creemos. Lo creo firmemente».
El presidente de la sección de Alabama de la NAACP, Benard Simelton, habló en la audiencia pública. Dijo que la resolución «no tiene mérito» porque nadie está enseñando TCR en las escuelas K-12 de Alabama.
«Creo que el gobernador y los miembros de la junta que apoyan esta resolución están hablando en nombre de otros grupos fuera del estado», dijo Simelton a AL.com después de la reunión.
“Tenemos que luchar por el problema real al que se enfrentan nuestros niños, que es la disparidad y la discriminación. Esos son problemas reales que la junta escolar debería abordar y no están abordando esos problemas».
«El virus COVID es uno de los factores más importantes que enfrentan nuestros niños, y debemos hacer todo lo posible para proteger a esos niños».
Tonya Chestnut, un miembro de la junta que votó en contra de la resolución, le dijo a AL.com que aborda una crisis que no existe. Según ella, la verdadera crisis es la pandemia de COVID-19 que representa una amenaza para la salud de niños y maestros.
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