Opinión
Mi primer recuerdo de las Bahamas fue un maravilloso viaje familiar allí en 1980. Recuerdo hermosas playas, caracolas y restos del recientemente desaparecido Imperio Británico. Mis padres también nos dejaban andar en ciclomotores, sin casco, cuando ni siquiera teníamos la edad suficiente para tener licencias de conducir en Estados Unidos. El British Colonial Hilton donde nos alojamos (suena impresionante, pero éramos una familia de recursos modestos, y creo que era una filial de Best Western en ese momento y todos nos apretujamos en una habitación) era el mejor hotel en el que nos habíamos alojado.
Curiosamente, el propietario del hotel es ahora China Construction America y ha decidido abandonar el sistema Hilton.
Más curioso aún es que el complejo hotelero está al otro lado de la calle de la embajada americana. Coincidencia, seguro.
Las Bahamas no es solo un destino de cruceros de Disney, sino que también alberga una instalación naval estadounidense muy importante.
En tiempos más recientes, noviembre de 2019, tomamos un crucero de Disney a las Bahamas. Fue un hermoso crucero. Nos encantó especialmente el mini estado-nación de Castaway Cay operado por Disney con la bendición del Gobierno de las Bahamas. Independientemente de lo que pienses del comportamiento woke actual de Disney, fue un momento memorable en una América anterior al virus: Las cosas iban bien y Trump era presidente. Lo más impresionante fue la capacidad del Skipper para detener y luego volver a estacionar un crucero de 100,000 toneladas sin la ayuda de un remolcador. El sistema de posicionamiento global vinculado a un sistema de navegación puede hacer maravillas.
No es muy conocido que también hay una instalación muy importante de la Marina estadounidense en las Bahamas. Lleva el poco propicio nombre de Centro de Pruebas y Evaluación Submarina del Atlántico (AUTEC) y sirve para varios propósitos. Es un lugar al que Estados Unidos, Gran Bretaña y otros socios estratégicos envían sus submarinos para investigaciones y para hacer evaluaciones y preparar las patrullas de combate reales. No voy a entrar en más detalles, pero es una instalación importante.
También existe este curioso interés en las Bahamas por parte de esta pequeña empresa china llamada Huawei. Básicamente, están proporcionando toda la infraestructura de telecomunicaciones para las Bahamas.
Eso es muy conveniente, especialmente cuando la gran cantidad de datos generados por AUTEC debe viajar por la misma red durante ciertas partes de su viaje. Estoy seguro de que nuestros unos y ceros no reciben más atención especial que los unos y ceros de cualquier otra persona durante el tránsito de los datos.
Nuevamente, como el hotel de propiedad china frente a la Embajada de Estados Unidos, estoy seguro de que todo es una coincidencia.
Los bahameños preguntan: «¿Dónde están los estadounidenses?»
Ya sea en las calles de Bagdad, Bosnia, Taiwán o cualquier otro lugar en el que haya trabajado y servido, me gusta preguntar a la población local qué piensa. En las calles de Nassau, Bahamas, la simple pregunta en la mente de los lugareños es: «¿Dónde están los estadounidenses?» La segunda cosa en la mente de los bahameños es su aversión a la presencia de mano dura china.
Dos veces, los bahameños señalaron el hotel en el que me había alojado cuando era niño 40 años antes y dijeron: “Ellos son el problema”, refiriéndose a la propiedad china del hotel y la expansión de la huella china.
El consenso de todos con los que hablé es que las iniciativas de la Franja y la Ruta, imbuidas ampliamente de la fusión civil-militar bajo la dirección del Partido Comunista Chino (PCCh), establecieron rápidamente una fuerte percepción de los chinos como los nuevos amos coloniales. Maestros coloniales con un enfoque muy diferente.
Muchos parecían recordar con cariño o mirar hacia atrás a los días del dominio británico. Con la partida de los británicos, la corrupción se hizo cargo y pronto se combinó con las operaciones de influencia china.
El fracaso del Departamento de Estado de EE.UU. para desplegar un embajador real, una tendencia preocupante.
Una cosa que hice cuando regresé del viaje de 2019 fue revisar el estado y los antecedentes del embajador de Estados Unidos en las Bahamas. Los embajadores y su personal son el “rostro de los Estados Unidos” para estos países y son el instrumento definitorio y decisivo del poder nacional para hacer valer los intereses estadounidenses.
Desafortunadamente, no ha habido un embajador estadounidense en las Bahamas desde 2011, y ha sido irregular desde la independencia de las Bahamas en 1973. Lo que tenemos en las Bahamas es un «encargado de negocios«.
Un Encargado de Negocios es agradable, pero es una gran declaración de que Estados Unidos está desinteresado en el país y no está dispuesto a enviar un embajador.
Embajador o Encargado de Negocios, me he encontrado con varios (que parecían estar en la tendencia woke) en mi trabajo gubernamental mientras visitaba o trabajaba en estos países que eran muy poco impresionantes. Varias veces tuve que contenerme cuando un embajador hacía comentarios degradantes sobre Estados Unidos frente a nuestros socios extranjeros. Hay una diferencia entre la transparencia y la capacidad del humor autocrítico para construir relaciones y despertar la complacencia. Los ciudadanos extranjeros no están impresionados por esta actitud.
He notado un déficit de embajadores estadounidenses en muchos lugares: Panamá y las diversas repúblicas de las islas del Pacífico Sur, por ejemplo. E incluso cuando tenemos un embajador, no parece estar afirmando los intereses estadounidenses.
Las Bahamas es esencialmente el país soberano más cercano a Estados Unidos; los chinos están ocupando agresivamente las Bahamas, y Estados Unidos necesita un embajador allí rápidamente. Y un embajador estadounidense que con orgullo ponga los intereses estadounidenses en primer lugar y que esté dispuesto a ayudar al país a responder activamente a las fuerzas de ocupación chinas.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
