New Hampshire dio un paso de gigante al convertirse en el primer estado de EE. UU. en ofrecer ivermectina sin receta el 16 de marzo.
Con una votación de 183 votos a favor y 159 en contra, la Cámara de Representantes de New Hampshire, dominada por los republicanos, aprobó el proyecto de ley HB1022, que permitiría a los farmacéuticos dispensar la ivermectina bajo una orden permanente, lo que significa que cualquiera puede ir a un farmacéutico y obtener el medicamento de grado humano.
La legisladora republicana de NH, Leah Cushman, enfermera y patrocinadora del proyecto de ley, dijo a The Epoch Times en enero que “no tenía absolutamente ninguna duda de que se salvarían vidas si la ivermectina de grado humano estuviera disponible para los pacientes con COVID”.
“Los republicanos de la Cámara enviaron un mensaje claro hoy de que apoyamos la ampliación de las opciones para el tratamiento del COVID», dijo Cushman a The Epoch Times.
Ella dijo que su aprobación por la Cámara también significa que las personas no tendrán que recurrir a la compra de ivermectina de grado humano de un país extranjero para ejercer su derecho a usar el medicamento para tratar sus síntomas.
Cushman agregó que la disposición en el proyecto de ley que protege a los médicos de cualquier posible sanción—o de una investigación por parte de la junta de licencias del estado—por recetar ivermectina contra el COVID-19 les quita «parte de la presión política».
El proyecto de ley todavía tiene que obtener la aprobación final del Senado, que también está controlado por los republicanos y hasta ahora sus legisladores republicanos han demostrado que creen en el lema del estado «Vive libre o muere» cuando se trata de opciones de tratamiento contra el COVID-19.
Proyectos de ley similares están pendientes de la aprobación legislativa en Oklahoma, Missouri, Indiana, Arizona y Alaska.
En New Hampshire, el proyecto de ley de ivermectina es una de varias propuestas relacionadas con el COVID lideradas por republicanos.
El Comité de Salud, Servicios Humanos y Asuntos de la Tercera Edad de la Cámara de Representantes, que votó por un estrecho margen «debe aprobarse» el proyecto de ley sobre ivermectina, también aprobó una propuesta de prohibición de la aplicación de cualquier mandato federal sobre vacunas y rechazó un proyecto de ley que habría añadido la vacuna contra COVID-19 a los requisitos de inmunización para los estudiantes de las escuelas públicas.
Ha habido una división entre los republicanos de NH y el gobernador del estado Chris Sununu, también republicano, sobre el virus COVID-19, con un saldo de 13 manifestantes arrestados el año pasado luego de oponerse a su impulso para que el estado acepte un total de USD 27 millones en dinero federal para promover la vacuna COVID.
Sin embargo, Sununu, quien tiene la última palabra sobre el proyecto de ley, se ha mantenido firme en su oposición a la obligatoriedad de la vacuna y fue el único gobernador en el noreste que se unió a una demanda gubernamental contra la administración Biden por su directiva federal de vacunación.
Esa directiva exigía que todo aquel que trabajara en una empresa con 100 o más empleados debía vacunarse contra el virus.
La Corte Suprema de EE. UU. bloqueó la directiva, pero mantuvo el requisito de vacunación obligatoria de Biden para los trabajadores de la salud. También se ha negado a decidir el argumento de que las exenciones religiosas deberían ser una garantía constitucional para la vacuna.
Los tratamientos alternativos como la ivermectina han causado controversia en Nueva Inglaterra.
En Maine, un vecino cercano a New Hampshire, el estado suspendió la licencia médica de una de las doctoras más destacadas de la región—si no es que del país—por recetar ivermectina, hidroxicloroquina y otros tratamientos alternativos a la vacuna.
La Dra. Meryl Nass, experta nacional en enfermedades inducidas por las vacunas, también recibió inicialmente la orden de someterse a un tratamiento psiquiátrico, pero la junta de licencias médicas del estado retiró esa petición.
Al igual que el proyecto de ley de NH, otros proyectos de ley estatales que buscan hacer que la ivermectina esté disponible sin receta piden que se prohíba este tipo de represalias por parte de las juntas estatales de concesión de licencias contra los médicos o enfermeras que prescriben a los pacientes ivermectina y otros tratamientos alternativos.
Además de la ivermectina, el proyecto de ley 1525 del Senado de Oklahoma también propone que la hidroxicloroquina esté disponible sin receta.
“Me parece increíble que el único enfoque de la administración actual y la ‘Ciencia’ del Capitolio esté en una vacuna que no es tan ‘segura y efectiva’ como la hacen parecer”, dijo Nathan Dahm (R-Broken Arrow), principal patrocinador del proyecto de ley.
La Administración de Alimentos y Medicamentos, junto con muchos médicos, siguen oponiéndose al uso de ivermectina contra el COVID-19, argumentando que aún no se ha demostrado que sea un tratamiento eficaz contra el virus.
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