WASHINGTON — La economía de Estados Unidos está en camino de una sustancial recuperación proyectada para el tercer trimestre, después de sufrir entre abril y junio la mayor contracción registrada hasta la fecha, A poco más de 70 días de las elecciones, una serie de datos económicos positivos muestran que la economía se desarrollará mejor de lo previsto.
Los empleadores incorporaron más de 9 millones de puestos de trabajo en los últimos tres meses, recuperando el 42 por ciento de los puestos de trabajo perdidos entre febrero y abril debido a la pandemia.
Las ventas al por menor de Estados Unidos también aumentaron durante tres meses consecutivos, de mayo a julio, alcanzando niveles superiores a los observados antes de la pandemia. En comparación con 2019, en julio las ventas minoristas aumentaron un 2.7 por ciento.
«El gasto y el empleo de los consumidores se recuperaron más rápido de lo que muchos, incluidos nosotros mismos, habíamos previsto hace solo un par de meses», declaró en un informe Brett Ryan, economista senior estadounidense del Deutsche Bank.
Sumado a ello, la actividad de producción entre los fabricantes comenzó a recuperarse tras los cierres relacionados con COVID-19. El Índice de Gerentes de Compras de Manufactura de EE.UU. (PMI) superó 50 por primera vez desde febrero.
«El informe de producción industrial de julio, de la semana pasada, indicó que la producción y el rendimiento de los vehículos de motor habían en esencia completamente recuperado toda la producción perdida al reabrir las fábricas», escribió Ryan. «Por lo tanto, es probable que las ganancias en el PMI manufacturero provengan de otras industrias a este nivel de la recuperación».
La vivienda también fue uno de los sectores brillantes durante la pandemia.
Debido a las bajas tasas de hipotecas y a la fuerte demanda de viviendas, la confianza de los constructores de viviendas alcanzó un récord en agosto. El Índice del Mercado de la Vivienda (HMI), que sigue el sentimiento de las futuras ventas de casas unifamiliares, subió a 78, igualando el récord establecido en diciembre de 1998.
Los nuevos proyectos de vivienda también aumentaron un 22.6 por ciento, registrando la mayor alza desde octubre de 2016. Además, los permisos de construcción, un indicador de la futura construcción de viviendas, subió un 18.8 por ciento.
Los economistas creen que la rápida respuesta de los responsables de las políticas fiscales y monetarias fue un importante motor del repunte inicial de la actividad económica. Ellos consideran que las prolongadas demoras en el próximo paquete de estímulo podrían pesar sobre los ingresos de los hogares y frenar el impulso de este otoño.
Otros riesgos para la recuperación son el posible empeoramiento de la crisis causada por el virus del PCCh, también conocido como el nuevo coronavirus, lo que provocaría una pausa temporal en la tasa de crecimiento.
Las negociaciones sobre el próximo paquete de estímulos se estancaron la semana pasada. La Casa Blanca emitió a continuación varias órdenes ejecutivas, lo que suscitó la preocupación de los economistas de que estas órdenes podrían reducir la urgencia de las conversaciones en el Capitolio.
Las convenciones para la nominación de los candidatos demócratas y republicanos de las próximas elecciones también podrían complicar el acuerdo, empujándolo al menos hasta el final del mes, según algunos analistas.
A pesar de los desafíos, Wall Street sigue confiando en la aprobación del próximo proyecto de ley de estímulo.
«Los demócratas que presionan más por el apoyo estatal y local pueden añadir fondos adicionales al paquete, de modo que los costos totales estimados de CARES 2.0 es probable que se establezcan alrededor de 1.5 a 2 billones de dólares», según Michael Zezas, analista en Morgan Stanley sobre políticas públicas de Estados Unidos.
Crecimiento del tercer trimestre
El producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos se contrajo en el segundo trimestre, entre abril y junio, en un 9.5 por ciento, o 32.9 por ciento anualizado, debido a las medidas de bloqueo causadas por la pandemia.
A medida que la actividad económica se acelera, se prevé que el crecimiento del PIB en el tercer trimestre sea del 27.2 por ciento anualizado, según Doug Duncan, economista jefe de Fannie Mae.
Mientras la mayoría de los economistas proyectan un aumento del 20 al 22 por ciento anualizado para el tercer trimestre, Duncan actualizó sus estimaciones hacia el alza, en base a los nuevos datos económicos.
«La recuperación de la economía del repentino y grave revés del segundo trimestre está en pleno desarrollo, pero creemos que el ritmo futuro será impulsado en gran medida por el camino del nuevo coronavirus y la forma en que el público responde a la información relacionada con el coronavirus», dijo Duncan en una declaración.
Goldman Sachs también se ha vuelto más optimista en las últimas semanas, estimando que las ganancias anualizadas del PIB son del 26.5 por ciento en el tercer trimestre y del 8 por ciento en el cuarto trimestre. La firma de Wall Street también elevó sus perspectivas de crecimiento económico para el 2021, pronosticando ahora un alza del 6.2 por ciento para el año.
Los economistas de Goldman esperan ahora que al menos una vacuna sea aprobada a fines de 2020, la que pueda ser distribuida ampliamente en Estados Unidos a mediados de 2021.
El presidente Donald Trump pone sus esperanzas en los datos de crecimiento económico para el tercer trimestre, que se publicarán pocos días antes de las elecciones.
«Lo que nosotros hemos estado haciendo juntos es nada menos que un milagro económico y ahora nosotros lo estamos haciendo de nuevo», dijo Trump a sus seguidores en Minneapolis el 17 de agosto. «Nosotros construimos la mayor economía de la historia del mundo y ahora yo tengo que hacerlo de nuevo. Ustedes ya saben lo que es eso. Así es. Eso es Dios probándome».
Mientras tanto, las acciones siguieron subiendo a principios de semana. El S&P 500 se recuperó completamente de su depresión de marzo y subió a un máximo histórico el 18 de agosto.
Goldman Sachs recientemente elevó su nivel objetivo de fin de año para el S&P 500 a 3600, lo que implica un crecimiento del 6 por ciento sobre el nivel actual. El pronóstico anterior de la compañía era de 3000.
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