La decisión de Facebook de prohibir el acceso al expresidente Donald Trump fue confirmada por la junta de supervisión de Facebook el miércoles.
«Los posteos de Trump durante los disturbios del Capitolio violaron gravemente las normas de Facebook y alentaron y legitimaron la violencia», dijo la junta en un comunicado.
Los dos posteos en cuestión incluían a Trump, que era presidente en ese momento, diciendo el 6 de enero que sus seguidores eran «muy especiales».
Los posteos «violaban las normas de Facebook que prohíben elogiar o apoyar a personas involucradas en la violencia», dijo la junta en su decisión.
Un portavoz de Trump no respondió inmediatamente a un mensaje de voz.
El portavoz de Trump, Jason Miller, dijo en un tuit que Trump emitiría una declaración en breve.
La junta también consideró que Facebook calificó inapropiadamente la suspensión como «indefinida».
«No es admisible que Facebook mantenga a un usuario fuera de la plataforma durante un período indefinido, sin ningún criterio sobre cuándo o si la cuenta se restablecerá», dijo la junta, añadiendo que Facebook no siguió procedimientos claros y publicados que definen la suspensión de una cuenta durante un determinado período de tiempo o de forma permanente.
«Al aplicar una sanción imprecisa e indiferente, y luego remitir este caso a la Junta para que lo resuelva, Facebook pretende eludir sus responsabilidades. La Junta rechaza la petición de Facebook e insiste en que aplique y justifique una sanción definida», dijo la Junta.
Facebook no respondió inmediatamente a una consulta sobre cuándo anunciará el período de tiempo en que la cuenta de Trump será suspendida.
Facebook suspendió a Trump a principios de enero, cuando aún era presidente. El CEO, Mark Zuckerberg, alegó que había riesgos en dejar que Trump siguiera publicando en la plataforma tras el asalto al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero.
Se suponía que la decisión de la junta debía llegar en un plazo de 90 días a partir del 21 de enero, cuando Facebook remitió la prohibición a su junta, pero los miembros de la junta querían más tiempo para meditar su decisión, dadas las más de 9000 declaraciones públicas que recibieron.
Algunos legisladores republicanos habían instado a la junta a anular la suspensión de Facebook, y varios demócratas se negaron en gran medida a opinar sobre la cuestión o a respaldar la prohibición.
Varios republicanos del Comité de Justicia de la Cámara de Representantes calificaron el miércoles de «patética» la decisión de la junta.
«Apoyo la decisión matizada de la Junta de Supervisión de FB de mantener la suspensión, que es coherente con los principios que he articulado para equilibrar las normas éticas de la comunidad con la expresión de los usuarios», dijo el representante Ro Khanna (D-Calif.) en un comunicado.
«La decisión de la Junta de Supervisión de Facebook es un pequeño acto de responsabilidad, pero esto no puede ser el final. El ataque del 6 de enero debe ser investigado a fondo. Debe haber una rendición de cuentas para los insurrectos y los que siguen impulsando la Gran Mentira», añadió la representante Mary Gay Scanlon (D-Pa.).
Cinco miembros de la junta revisaron el caso. Su decisión debía ser refrendada por la mayoría de la junta.
La Junta de Supervisión de Facebook se creó el año pasado. La junta tiene amplios poderes y puede anular a Facebook, sirviendo esencialmente como un tribunal.
«Facebook implementará las decisiones de la junta a menos que hacerlo pueda violar la ley, y responderá de forma constructiva y de buena fe a las orientaciones políticas planteadas por la junta», dijo Nick Clegg, vicepresidente de asuntos globales y comunicaciones del gigante tecnológico con sede en California, en un comunicado el año pasado.
Clegg dijo en enero que Facebook esperaba que la junta directiva mantuviera su suspensión de las cuentas de Trump en Facebook e Instagram, que el gigante tecnológico posee.
Twitter prohibió a Trump en enero. Al mes siguiente, un directivo dijo que la prohibición era permanente.
YouTube, de Google, lo suspendió ese mismo mes, pero ha mantenido abierta la posibilidad de permitirle recuperar el acceso.
Trump se ha burlado de las acciones de las grandes tecnológicas como censura, señalando que las plataformas han prohibido el acceso a varios conservadores.
El martes, el expresidente lanzó una nueva plataforma de comunicación. La página, parecida a Twitter, contiene misivas y videos del republicano. Pero actualmente no permite que la gente publique declaraciones u otros comentarios, lo que la hace más parecida a un blog.
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