Si no sabe adónde ir de vacaciones, no hay nada mejor que entrar en contacto con la naturaleza. No sólo alivia el estrés, sino que también puede ayudar a reducir la necesidad de tomar medicamentos recetados para tratar afecciones como la hipertensión y el asma. Lo mejor es quitarse los zapatos y pisar la hierba con los pies descalzos: puede obtener algunos beneficios inesperados.
¿Le gustan los espacios verdes? El British Medical Journal publicó un estudio de dos años realizado en Finlandia que reveló que las visitas frecuentes a espacios verdes como bosques, jardines, parques y prados pueden ayudar a las personas a reducir el uso de medicamentos recetados para la depresión, el insomnio, la hipertensión y el asma. Estos medicamentos se utilizan principalmente para tratar problemas de salud comunes y potencialmente graves.
El estudio analizó a unas 7300 personas y los resultados encontraron que, en comparación con los que visitaban espacios verdes menos de una vez por semana, los que visitaban espacios verdes tres o cuatro veces por semana tenían un 33 por ciento menos de probabilidades de usar medicamentos psicotrópicos, un 36 por ciento menos de probabilidades usar medicamentos antihipertensivos y un 26 por ciento menos propensos a usar medicamentos para el asma.
En general, se cree que la exposición a entornos naturales es beneficiosa para la salud humana, y este estudio aporta una prueba más. El Dr. Gyaltsen Lobsang, experto en medicina preventiva y director de la Clínica de Medicina Preventiva Dr. Lobsang, afirmó que a menudo anima a la gente a ir al bosque; este consejo incluso está incluido en su «receta» porque la naturaleza tiene muchos beneficios que ofrecer para la salud.
1. Reduce la inflamación crónica
Las plantas liberan mucho oxígeno y producen muchas sustancias bioactivas durante la fotosíntesis, lo que le ayuda a resistir la oxidación y a reducir la inflamación crónica.
Muchas personas sufren inflamaciones crónicas. Cuando las células del cuerpo no reciben suficiente oxígeno, las células hipóxicas emiten «especies reactivas del oxígeno» que pueden dañar las células y los órganos, lo que provoca oxidación corporal e inflamación crónica. La inflamación crónica provocará entonces un debilitamiento de la inmunidad, lo que dificultará la lucha del organismo contra virus y bacterias extraños.
La hipoxemia (insuficiencia de oxígeno en el cuerpo) puede deberse a factores ambientales, fisiológicos y patológicos. Lobsang señaló que síntomas como la rigidez muscular, la falta de sueño y los mareos pueden indicar una falta de oxígeno en el cuerpo.
2. Aumenta la inmunidad y previene el cáncer
Las personas también pueden respirar fitoncidas cuando están en espacios verdes, especialmente bosques. Los fitoncidas, también conocidos como «exterminadores de la planta», son sustancias químicas que las plantas liberan al aire con propiedades antimicrobianas para protegerse de los insectos.
Un estudio encontró que la actividad de las células asesinas naturales (NK) en el cuerpo aumentó en aproximadamente un 50 por ciento después de que las personas inhalaron fitoncidios mientras caminaban en la naturaleza. Estas células pueden matar células tumorales y células infectadas por virus en el cuerpo.
Lobsang cree que el aire del bosque puede ayudar a limpiar los pulmones. Por eso, pide a los pacientes, especialmente a los de cáncer de pulmón, que entren en contacto con la naturaleza, preferiblemente en zonas con bosques, al menos dos o tres veces al mes.
3. Alivia el estrés, mejora el estado de ánimo y regula el sistema nervioso autónomo
Un entorno natural repleto de plantas favorece la relajación del cuerpo y la mente. El director de la Clínica Lohasiinfra en Taiwán, Shih-Heng Chang, señaló que hay más sonidos en el bosque que en la playa, como el canto de insectos y pájaros, y el sonido del viento. Estos sonidos se denominan ruido blanco y pueden bloquear el ruido real, lo que ayuda a aliviar el estrés y son más relajantes que el silencio total.
Los estudios también han encontrado que los paisajes forestales pueden reducir el estrés psicológico y la fatiga mental, e inducir emociones positivas, mejorando así la ansiedad, la depresión y la ira. Esto tiene efectos preventivos y terapéuticos sobre la depresión. Al mismo tiempo, los baños de bosque también ayudan a reducir las hormonas del estrés como la adrenalina y el cortisol, aliviando así el estrés de las personas.
El estrés también está estrechamente relacionado con los trastornos del sistema nervioso autónomo; los baños de bosque pueden aumentar la actividad de los nervios parasimpáticos y reducir la actividad de los nervios simpáticos, lo que permite que el sistema nervioso autónomo vuelva a un estado estable y equilibrado. En consecuencia, también se puede mejorar la calidad del sueño.
4. Reduce la presión arterial y controla la diabetes
Los estudios han descubierto que el entorno forestal puede reducir eficazmente la presión arterial, disminuir el pulso y mejorar las funciones cardiopulmonares y metabólicas, lo que puede contribuir a mejorar la calidad de vida de los pacientes prehipertensos o hipertensos.
Entre las razones por las que se especula que los bosques pueden reducir la presión arterial figuran los efectos positivos de los fitoncidas sobre el organismo y el efecto modulador del entorno forestal sobre el sistema nervioso autónomo.
Caminar en un entorno forestal aumenta la adiponectina, que ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre en pacientes diabéticos. Los niveles elevados de adiponectina se han relacionado con la resistencia a la diabetes, la pérdida de peso y la prevención de la aterosclerosis.
5. Controla el TDAH y mejora la concentración
Además de mejorar la concentración en la población general, los entornos naturales también pueden mejorar la atención en niños con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Un paseo por el parque es suficiente para elevar la concentración en niños con TDAH.
Lobsang también descubrió en su tratamiento clínico que los síntomas del 80 al 90 por ciento de los niños con TDAH o autismo pueden mejorar gradualmente cuando los niños están expuestos a la naturaleza.
6. Controla el asma y mejora la función pulmonar
El asma se ha relacionado con la exposición a la contaminación atmosférica. Para los niños con enfermedades alérgicas como el asma, la exposición a un entorno forestal puede ayudar a mejorar los síntomas. Un estudio publicado en el European Respiratory Journal demostró que los niños que crecieron con una mayor exposición a espacios verdes tenían una mejor salud respiratoria y, a menudo, una mejor función pulmonar.
Lobsang cree que las plantas son muy eficaces para purificar el aire, y afirma que «las plantas son los mejores purificadores de aire». Señaló que muchos estudios han descubierto que el simple hecho de tener muchas plantas en el interior (como la sansevieria) puede ayudar a limpiar el aire.
7. Mejora la salud ocular
Mirar un entorno verde después de un uso intenso de la vista puede relajar los ojos. Chang explicó que la longitud de onda de la luz verde puede relajar los músculos oculares. Los ojos afectarán directamente al cerebro, y el malestar de los ojos causará dolor en la cabeza. El síndrome de visión de ordenador se refiere al malestar en los ojos causado por la visión prolongada del ordenador, que se extenderá al cerebro, provocando síntomas como dolor de cabeza y náuseas.
Quítese los zapatos y camine descalzo para aumentar el poder curativo natural
Al caminar por espacios verdes, lo mejor es quitarse los zapatos si es posible y pisar descalzo el césped, la tierra y la arena para hacer “contacto con la tierra”, de hacerlo así le permite recibir la medicina de la naturaleza: los electrones de la superficie de la Tierra.
El científico Clint Ober descubrió los beneficios para la salud de caminar descalzo. En su libro «Earthing», escrito junto con el Dr. Stephen Sinatra y otros, afirma que las personas vivimos en un planeta electrificado y llevamos una vida electrificada: el corazón, el cerebro, los músculos, el sistema nervioso y el sistema inmunitario son circuitos eléctricos dinámicos.
El propósito de andar descalzo es conectar la corriente débil en la superficie de la tierra con la corriente fisiológica de las botas humanas para restaurar el equilibrio eléctrico del cuerpo.
Caminar descalzo a la tierra puede tratar muchas enfermedades al conectar la débil corriente de la superficie de la tierra con la corriente fisiológica del cuerpo humano. (Leeloo The First/Pexels)
Numerosos estudios ahora han documentado los muchos beneficios de andar descalzo en el suelo, incluida la reducción de la inflamación crónica, el dolor y el estrés, la mejora del flujo sanguíneo, la vitalidad y el sueño, la mejora de la cicatrización de heridas y la prevención y el tratamiento de enfermedades autoinmunes.
Un estudio de caso (pdf) de la Academia Internacional de Termografía Clínica mencionó que un hombre de 85 años con inflamación severa y dolor crónico se despertaba rígido y dolorido todos los días, y su dolor desapareció por completo después de cuatro semanas de terapia de caminar descalzo.
Caminar descalzo también puede acelerar la curación de heridas difíciles de curar en pacientes diabéticos y aliviar el dolor de las heridas.
Para maximizar los beneficios de realizar contacto con la tierra, andando descalzo por tan solo 30 o 40 minutos al día puede reducir significativamente el dolor y el estrés.
Lobsang dijo que el cuerpo es la estructura de la energía, y el contacto con la tierra no solo puede liberar la mala energía del cuerpo, sino también masajear las plantas de los pies al mismo tiempo. Hay muchos puntos de acupuntura en las plantas de los pies, como el punto de acupuntura yong quan, que es un punto de acupuntura excelente para aliviar el estrés, estabilizar las emociones y mejorar el sueño. Además, la estimulación de los músculos de la planta del pie puede promover la microcirculación.
Lobstang lleva a sus pacientes a lugares con césped limpio para que caminen descalzos. En particular, la hierba que ha estado expuesta al sol es la mejor. Sin embargo, las personas con heridas en las plantas de los pies, especialmente los diabéticos, deben tener cuidado; deben evitar el contacto con el suelo cuando hay heridas en las plantas de los pies.
Además, la medicina tradicional china cree en el concepto de la unidad del hombre y la naturaleza, y el contacto con la tierra está en consonancia con el concepto. Wu Kuo-pin, superintendente de la Clínica del Corazón Xinyitang de Taiwán, dijo que el suelo es una parte de la Tierra (en los cinco elementos); el elemento tierra está asociado con el bazo y el estómago, y el bazo y el estómago son parte del sistema digestivo en la medicina tradicional china. Las personas pueden fortalecer el bazo y el estómago mediante el contacto con la tierra y la absorción del qi del elemento tierra. El sistema inmunológico mejorará a medida que mejore la función del bazo y el estómago.
Kuo-pin escuchó una vez sobre un caso en el que un paciente con cáncer se recuperó de la enfermedad solo caminando descalzo por las montañas. Hizo hincapié en que las energías del cuerpo humano, la tierra y el universo están inherentemente interconectadas. Pisar el suelo con los pies descalzos puede ajustar la energía del cuerpo, lo que es beneficioso para el bienestar en general.
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