La guerra en Ucrania ha entrado en su noveno día, con las fuerzas ucranianas montando una firme resistencia a la ofensiva rusa que, en ciudades clave, ha intensificado sus ataques contra la infraestructura civil. Por su parte, las hostilidades nocturnas en una planta de energía nuclear provocaron un incendio que luego fue extinguido sin fuga de radiación.
La inteligencia británica dijo que la ciudad portuaria de Mariupol, en el sureste del país, sigue bajo control ucraniano, pero está rodeada por fuerzas rusas y su infraestructura civil está siendo objeto de intensos ataques.
Las fuerzas rusas bombardearon la planta de energía nuclear más grande de Europa, en el sur de Ucrania, durante la madrugada del viernes. Las explosiones provocaron un incendio que se extinguió durante la noche, dijo la inteligencia del Reino Unido y las autoridades ucranianas.
El Ministerio de Defensa de Rusia calificó el ataque a la planta de energía nuclear de Zaporizhzhia como una «provocación monstruosa» por parte de las fuerzas ucranianas, afirmando que una patrulla rusa fue atacada por un intenso fuego de armas pequeñas que provenía del edificio y que el «grupo de sabotaje» abandonó el complejo de entrenamiento, prendiéndole fuego cuando se iban.
The Epoch Times no ha podido verificar de forma independiente el relato del incidente de ninguna de las partes.
La Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) citó a los reguladores ucranianos y sus propias fuentes sobre el terreno en la planta nuclear diciendo que el incendio «localizado» no afectó a los equipos esenciales y que no hubo cambios en los niveles de radiación.
“Todos los sistemas de seguridad de los seis reactores de la planta no se vieron afectados en absoluto y no ha habido liberación de material radiactivo”, dijo el director general de la OIEA, Rafael Mariano Grossi, en una conferencia de prensa el 4 de marzo.
Zaporizhzhia es la mayor de las cuatro centrales nucleares de Ucrania, que en conjunto proporcionan alrededor de la mitad de la electricidad del país.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, dijo sobre el ataque contra la planta que era un «terror a un nivel sin precedentes» y que podría «ser como seis Chernobyls» mientras pedía que se impusiera una zona de exclusión aérea en Ucrania.
Los aliados occidentales se han resistido a imponer una zona de exclusión aérea, ya que eso llevaría a la OTAN a un conflicto militar directo con Rusia.
Zelensky dijo el viernes que, hasta la fecha, 9200 soldados rusos han muerto en la guerra. Las autoridades rusas han afirmado que 498 de sus miembros del servicio han sido asesinados.
Las fuerzas rusas capturaron la ciudad sureña de Kherson, un puerto clave del Mar Negro, marcando la primera gran ciudad ucraniana en caer desde que el presidente ruso Vladimir Putin ordenó la invasión. Dicha invasión es etiquetada por Putin como una «operación militar especial» para derrocar al gobierno de Ucrania y «desmilitarizar» el país.
Los intensos combates continuaron en las afueras de Mariupol, otro puerto estratégico en el sur de Ucrania, y cortaron la electricidad de la ciudad, así como los sistemas de calefacción y agua, según las autoridades de la ciudad.
“Teníamos 15 líneas eléctricas principales y ahora todas están caídas. Estamos completamente aislados, destruidos por la artillería. Solo queda el suministro de gas natural”, dijo el jueves a la BBC el vicealcalde de Mariupol, Serhiy Orlov.
“Mariupol sigue siendo ucraniana en este momento, todavía tenemos control dentro del perímetro, pero hay combates en las calles de las afueras y estamos en la antesala de una crisis humanitaria”, agregó.
Naciones Unidas ha dicho que alrededor de 1 millón de personas han huido de Ucrania desde el 24 de febrero, el día en que las fuerzas rusas lanzaron su asalto.
El coronel Doug MacGregor, exasesor principal del secretario de Defensa de EE.UU., le dijo a Fox News que la ofensiva rusa parece estar entrando en sus etapas finales, a pesar de la firme resistencia de las fuerzas ucranianas.
Trazó una posible resolución que podría hacer que la parte occidental de Ucrania declarara la neutralidad y existiera como un estado neutral, mientras que su mitad oriental básicamente caería bajo el control ruso.
“Vladimir Putin está llevando a cabo algo sobre lo que nos ha estado advirtiendo al menos durante los últimos 15 años, que es que no tolerará las fuerzas estadounidenses ni sus misiles en sus fronteras, al igual que nosotros no toleraríamos las tropas y los misiles rusos en Cuba”, dijo MacGregor.
“Lo ignoramos y finalmente actuó”, continuó. “No iba a permitir que Ucrania se uniera a la OTAN bajo ninguna circunstancia”.
La batalla en el este de Ucrania “casi ha terminado”, dijo. Agregó que todas las tropas ucranianas allí han sido, en su mayor parte, rodeadas y aisladas de los suministros.
Hay una concentración de entre 30,000 y 40,000 soldados ucranianos en el sureste de Ucrania que las fuerzas rusas probablemente “aniquilarán” si no se rinden, predijo.
«El juego se ha acabado y va a tener que negociar el mejor acuerdo que pueda conseguir», dijo MacGregor sobre Zelensky, cuyos representantes han entablado conversaciones con sus homólogos rusos sobre un acuerdo de paz, hasta ahora con pocos avances, salvo el acuerdo sobre los corredores humanitarios.
«Si opta por la neutralidad para Ucrania, le apoyaremos», dijo MacGregor sobre Zelensky, añadiendo que cree que «Vladimir Putin hará eso para Ucrania occidental», refiriéndose a la parte de Ucrania al oeste del río Dniepr.
MacGregor dijo que no está seguro de cuáles son los planes de Putin para el territorio ucraniano al este del Dniepr, señalando la posibilidad de su anexión a Rusia.
Los delegados de Ucrania y Rusia se reunieron en Bielorrusia y acordaron corredores humanitarios que permitirían a los civiles huir de manera segura y permitir la entrega de suministros humanitarios.
Una tercera ronda de conversaciones está prevista para la próxima semana.
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