Los sistemas de salud, alimentación y educación en los Estados Unidos están fallando a los jóvenes. Según un nuevo estudio de JAMA Pediatrics, se estima que el 18 por ciento de los adolescentes de 12 a 18 años son prediabéticos, mientras que el 24 por ciento de los jóvenes adultos de 19 a 34 años se consideran en la misma condición. Los jóvenes con obesidad son más propensos a ser prediabéticos. No es una gran noticia para los estadounidenses, ya que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico predice que el 47 por ciento de la población estadounidense será obesa para 2030.
Un gran paquete
La diabetes es una condición de salud seria pero manejable que le costó al sistema de salud de los Estados Unidos un estimado de 327 mil millones de dólares en 2017. Según la Dra. Linda J. Andes, matemática estadista de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) y una de las principales autoras del estudio:
«Los gastos médicos promedio de las personas diagnosticadas con diabetes, fueron de unos 16,752 dólares al año. Después de ajustar por grupo de edad y sexo, los gastos médicos promedio entre las personas con diabetes diagnosticada fueron cerca de 2.3 veces más altos que los gastos de las personas sin diabetes…».
Este estudio debe ser recibido como un llamado a una mayor educación y concientización. Andes continúa:
«Esperamos que esta investigación amplíe el conjunto de investigaciones disponibles sobre la prediabetes en adolescentes y adultos jóvenes. Monitorear el número de adultos jóvenes y adolescentes con prediabetes y niveles variables de tolerancia a la glucosa puede ayudar a determinar el riesgo futuro de la diabetes tipo 2 en la juventud. También esperamos que esta noticia sirva de alarma para los jóvenes, los padres y los médicos, y que se anime a quienes puedan estar en riesgo o vivir con prediabetes a tomar las medidas necesarias para prevenir o retrasar la progresión a la diabetes tipo 2».
Empujando hacia atrás
En lugar de eso, esta noticia probablemente será recibida con un coro de «saca tu trasero del sofá y come mejor». Lamentablemente, los consejos anticuados y condescendientes ignoran las dificultades que enfrentan los jóvenes hoy en día. La mayoría de los alimentos se rocían con grandes cantidades de productos químicos agrícolas, o se eligen por su vida útil en lugar de por su sabor, y luego gran parte de ellos se procesan de una manera que mata la poca nutrición que se obtiene de ellos. Las frutas y verduras orgánicas, saludables y deliciosas, son costosas. Si usted quiere comida de buena calidad y sabor, va a tener que pagar por ella y cocinarla.
También está el tema de la educación nutricional. A medida que la ciencia de la nutrición evoluciona, somos más capaces de medir más variables en los alimentos y cómo estas interactúan con nuestro cuerpo. Pero eso no significa que los consumidores estén recibiendo esa información.
Coca-Cola financia institutos de investigación internos como el «Instituto de Bebidas para la Salud y el Bienestar», diseñado para promover los beneficios de la hidratación de sus productos mientras ignora convenientemente el daño a la salud causado por las bebidas azucaradas.
Las conferencias sobre nutrición y dietética son frecuentemente patrocinadas por corporaciones con un interés personal en la opción menos saludable, como McDonald’s, Hershey’s y Kraft Foods. Los patrocinadores de la Expo de la Conferencia de Nutrición y Alimentos de este año incluyeron a PepsiCo, Big G Cereals (el fabricante de Lucky Charms, Cinnamon Toast Crunch y Cocoa Puffs) y Splenda Sweeteners. Esto no quiere decir que todos los estudios hayan sido comprados, pero puede ser difícil, a veces confuso e increíblemente largo examinar todo el ruido y encontrar información de salud verdaderamente útil.
Esto ni siquiera toca el tema de las fluctuaciones de peso que pueden ocurrir con los medicamentos recetados, especialmente los antidepresivos y los estabilizadores del estado de ánimo. Incluso si tiene la educación necesaria para elegir bien y puede permitirse una comida de calidad, sigue estando en una gran desventaja.
Los estudios han descubierto que los descendientes de generaciones de ratones alimentados con una dieta pobre y baja en fibra pierden un alto porcentaje de la diversidad de bacterias intestinales y no pueden recuperarla. Aunque no se han realizado estudios en humanos, no es exagerado pensar que el mismo fenómeno está ocurriendo en las personas. Al final de todo esto, el acto más básico de cuidado que podemos realizar (comer) puede sentirse como otro trabajo de medio tiempo. No es de extrañar que más estadounidenses estén muriendo antes.
Bola de nieve
Es muy probable que algunos de esos prediabéticos de 12 años que han sido diagnosticados, estén siendo criados por algunos de esos de 34 años con la misma condición, o su próxima etapa de evolución, la diabetes. Los porcentajes de jóvenes diagnosticados con prediabetes son más bajos que el casi 34 por ciento de los estadounidenses adultos con prediabetes. Los niños y los adultos jóvenes pueden ponerse al día antes de lo esperado, especialmente si el estilo de vida, la alimentación y la atención a la salud de los estadounidenses continúan por el mismo camino.
Kristina Martin trabaja en Green Lifestyle Market y es una reportera de bienestar de salud natural para Organic Lifestyle Magazine, que publicó por primera vez este artículo.
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