En esta serie, «Ejercicios fáciles para combatir el dolor crónico«, el terapeuta ocupacional Kevin Shelley enfoca los problemas comunes asociados con el dolor crónico con ejercicios simples para fortalecer los músculos débiles y mejorar la movilidad de las articulaciones que le ayuden a no sentir dolor.
Resumen de hechos clave
– Un estudio reciente encontró que la incidencia del dolor crónico en Estados Unidos ha superado a otras afecciones crónicas, como la diabetes, la depresión y la presión arterial alta.
– Más de 50 millones de adultos (20.5 por ciento) en Estados Unidos tienen dolor crónico, incluidos 17 millones (casi el 7 por ciento) con dolor crónico de alto impacto.
– El dolor crónico se ha relacionado con la depresión, un mayor riesgo de suicidio, el abuso de sustancias y la demencia.
– Los costos de atención médica relacionados con el dolor crónico superan el medio billón de dólares por año, más que los costos anuales por enfermedades cardíacas, cáncer o diabetes.
– El ejercicio puede tener un efecto significativo en la reducción del dolor crónico causado por problemas funcionales y debilidad muscular.
Tendencia alarmante del dolor crónico
El dolor es un ruido de fondo constante de la experiencia humana y, lamentablemente, su volumen está aumentando.
Un nuevo estudio publicado en JAMA Network el 16 de mayo utilizando datos de la Encuesta Nacional de Entrevistas de Salud 2019-2020 de aproximadamente 10,000 adultos estadounidenses muestra una tendencia sorprendente: la prevalencia del dolor crónico está creciendo y no muestra signos de desaceleración.
El dolor crónico actualmente afecta a más de 50 millones de adultos (20.5 por ciento) en Estados Unidos, incluidos 17 millones (casi el 7 por ciento) con dolor crónico de alto impacto: dolor que limita la vida o las actividades laborales la mayoría de los días o todos los días.
De hecho, se descubrió que el dolor crónico supera la incidencia de otras dolencias crónicas, como la depresión, la diabetes y la presión arterial alta.
El estudio de JAMA Network encontró que las mujeres se ven más afectadas que los hombres en todos los grupos de edad, pero ambos grupos demográficos están experimentando un aumento constante en los casos informados. El dolor crónico de alto impacto también fue mayor entre las mujeres.
Si bien el dolor crónico se ha asociado tradicionalmente con personas mayores a 65 años, las estadísticas recientes muestran que todos los grupos de edad están experimentando aumentos, y las poblaciones más jóvenes muestran aumentos proporcionales al aumento entre el grupo de mayor edad.
Cómo lidiar con el dolor crónico
El dolor es un compañero constante durante la existencia humana. Todos experimentamos muchos tipos diferentes de dolor en el transcurso de nuestras vidas, así como una variedad de dolores, desde leves hasta intensos, y desde breves hasta más duraderos.
Los analgésicos recetados a menudo se usan para tratar el dolor. De 2015 a 2018, más del 10 por ciento de los adultos estadounidenses informaron haber usado analgésicos recetados en los últimos 30 días, tanto opioides como no opioides; el 5.7 por ciento de los adultos estadounidenses usaron uno o más opioides recetados.
El dolor es un indicador principal de enfermedad interna, y la naturaleza y la intensidad de ese dolor pueden ayudar a los profesionales de la salud a evaluar muchos problemas de salud con mayor precisión.
El dolor también es una de las formas más consistentes de hacer que incluso las personas más obstinadas busquen la atención médica que necesitan.
El costo del dolor crónico
El dolor crónico, definido como dolor que dura tres o más meses, puede tener un efecto debilitante en la capacidad de una persona para trabajar y realizar sus actividades diarias. Se ha relacionado con la depresión, el aumento del riesgo de suicidio, el abuso de sustancias y la demencia.
El dolor es caro. De hecho, los costos médicos y económicos asociados con el dolor superan fácilmente el medio billón de dólares al año, más que los costos anuales por enfermedades cardíacas, cáncer o diabetes.
Alrededor del 10.4 por ciento de los adultos con dolor crónico en 2019 informaron que no tenían dolor en 2020, lo que demuestra que el dolor crónico se puede resolver.
El ejercicio a menudo puede mejorar el dolor crónico
No todo dolor crónico está directamente asociado a un diagnóstico médico específico. La investigación muestra cada vez más una correlación del dolor crónico no solo con diagnósticos médicos bien definidos, sino también con factores posturales y de estilo de vida. Muchos de nosotros no somos tan activos como deberíamos, lo que permite que las articulaciones se endurezcan y los músculos se debiliten.
Un régimen consistente de ejercicios seguros, efectivos y fáciles de realizar puede ayudar a aumentar la flexibilidad de las articulaciones y la fuerza muscular, reduciendo y previniendo el dolor crónico.
A continuación: Ocho de cada 10 personas experimentarán dolor de espalda durante el transcurso de su vida y más de la mitad experimentarán síntomas lo suficientemente graves como para buscar alguna intervención médica. Los ejercicios específicos para fortalecer y equilibrar la columna pueden cambiar esta tendencia.
Las opiniones expresadas en este artículo son las opiniones del autor y no reflejan necesariamente las opiniones de The Epoch Times.
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