Estos son días para soñar. Mientras la mayoría de nosotros estamos pasando la mayor parte del tiempo en casa, con la familia, conociendo de cerca espacios muy pequeños, hay un icono define a Estados Unidos —el camino abierto y los horizontes ilimitados que se avecinan. Aunque algunas de estas rutas son buenas para dar una vuelta rápida si están cerca de su casa, esta lista es principalmente para aquellos que imaginan días más soleados, cuando podamos volver a estar frente al volante, encender el motor y dirigirnos hacia un futuro brillante e interminable. Por el momento, mientras pensamos, planeamos y soñamos, aquí están las cinco mejores rutas de Estados Unidos.
Autopista de la Costa del Pacífico, California
Desde Los Ángeles hasta las tierras salvajes al norte de San Francisco, la Ruta Estatal 1 es conocida por sus curvas. Aferrada a algunas de las costas más escénicas del mundo, el viaje por sí mismo vale la pena —descendiendo de la red urbana del área de la bahía, el mundo se abre, mientras navega a lo largo de grandes curvas en la vía, montañas y acantilados caen vertiginosa y espectacularmente, al mar debajo suyo. La ruta completa se puede hacer en un día, pero sería una vergüenza, es un paseo para disfrutar, haciendo muchas paradas en el camino.
Tiene algunas opciones. En dirección al sur, deténgase para jugar un partido en el famoso campo de golf de Pebble Beach, luego haga una caminata por Cannery Row en Monterey —una cadena de plantas empacadoras de sardinas (y que se hizo famosa en la novela de John Steinbeck, «Cannery Row»), estos edificios industriales ahora albergan tiendas, restaurantes y un acuario de clase mundial. Luego, continuando el camino y maravíllese ante los altísimos bosques de secoyas que rodean Big Sur (tome una foto en la cascada del Parque Estatal Pfeiffer Big Sur), y tome una foto del Puente Bixby, antes de pasar sobre él —un solo tramo en espiral para autos de más de 250 pies a través de un enorme abismo, es el punto de referencia más reconocido del camino. Y, finalmente, reduzca la velocidad en San Luis Obispo —conocido invariable y localmente como SLO—, una encantadora ciudad que alberga el histórico (y fascinante) Castillo Hearst, un palacio estadounidense, que una vez fue el hogar de un magnate de medios de comunicación y su familia.
Ruta 66, Arizona
Una vez, los estadounidenses fueron tentados a «divertirse en la Ruta 66», y tal vez ningún tramo de carretera ha capturado más completamente nuestra imaginación histórica. Con una extensión de casi 2500 millas desde los campos del Medio Oeste, a través de paisajes desérticos en el Suroeste, hasta la costa de California, la Ruta 66 se estableció en 1926 y sirvió como el principal canal para aquellos que se dirigían al oeste, para una vida mejor, especialmente durante los años de la Depresión y los Tazones de Polvo de la década de 1930 (de nuevo retratada por John Steinbeck, en su obra ganadora del premio Pulitzer, «Las Uvas de la Ira»). La ruta alcanzó su punto máximo de tráfico en los decenios de 1940 y 1950.
La mala noticia primero—la carretera original ha desaparecido, fue pavimentada durante el empuje de América hacia la modernización y el boom automovilístico de mediados de siglo, que la vio superada por las autopistas interestatales (especialmente la I-40). Pero ahora, las buenas noticias —los tramos ininterrumpidos de la vieja carretera todavía ofrecen un viaje al pasado, con atracciones originales al lado de la vía, señales, hoteles y restaurantes. Uno de los mejores y más completos ejemplos se extiende a través de la mitad norte de Arizona, una carretera (aún señalizada como la Ruta 66) que alterna paisajes desérticos altos con placeres históricos. Párese en esa esquina, la que se hizo famosa en «the Eagles song», en Winslow, Arizona. Camine por Peach Springs, que fue la inspiración de Radiator Springs en las películas de Disney «Cars». Pase delante de los dinosaurios gigantes y caiga en lo profundo de las cavernas del Gran Cañón donde, en una época, bajaban a los invitados a la cueva por una cuerda (ahora tienen instalado un ascensor).
Skyline Drive, Virginia
Elevándose bruscamente hacia el azul desde la encantadora ciudad de Front Royal, este tramo de 105 millas de carretera reúne lo mejor de los Apalaches, en un tranquilo viaje de 35 millas por hora, durante todo el día. A lo largo del Parque Nacional Shenandoah, este Monumento Histórico Nacional serpentea a lo largo de la columna vertebral de las Montañas Blue Ridge, ofreciendo vistas espectaculares en cada curva; incluyendo una caída precipitada hacia las vastas llanuras que se extienden hasta Washington, D.C.
Las estaciones a lo largo del camino están construidas de piedra, y conservan una sensación de período clásico; fueron construidas en la década de 1930 por el Cuerpo Civil de Conservación (CCC), una consecuencia del New Deal de FDR. Se puede ver vida silvestre, incluyendo el gato montés y el oso negro. Camine más de 500 millas de senderos, incluyendo un largo tramo del famoso Sendero de los Apalaches. Incluso puede pasar la noche en el Skyland Resort, construido en 1895, y ahora situado en el aire enrarecido en el punto más alto del Drive, a casi 3700 pies.
Autopista Hana, Hawai
Aunque muchos visitantes de la paradisíaca isla de Maui rara vez van más allá de la playa —un luau vespertino, tal vez—, este estrecho camino lo llevará a un mundo completamente distinto, el Hawaii que muchos nunca llegan a conocer. Dejando atrás las luces de Kahului y su aeropuerto, pasará por la ciudad de Pa’ia, un pequeño y concurrido lugar con una excelente playa de surf y algunos de los mejores mariscos de Maui, incluyendo Mama’s Fish House, que tiene su propio muelle, para que los pescadores puedan subir y atrapar su pesca.
Pero rápidamente, el paisaje cambia dramáticamente, y la autopista Hana o lleva a otro mundo. Serpenteando a través de un exuberante paisaje, entra en un mundo de cascadas ocultas, bosques de bambú y eucalipto, la via traza los pliegues ondulantes de la isla, con más de 600 curvas. No es para los débiles de corazón, la ruta incluye 46 puentes de un solo carril. Pero al final de la autopista de 60 millas se encuentra Hana, un pequeño pueblo con playas volcánicas y un excelente hotel balneario, donde puede descansar y prepararse para el viaje de regreso.
Autopista Natchez Trace, Tennessee, Alabama y Mississippi
A veces se pasa por alto y es fácil perderla, incluso si se conduce cerca, esta carretera de 444 millas conecta Nashville, Tennessee, con Natchez, Mississippi, el pueblo más antiguo de ese famoso río. La carretera sigue la ruta del antiguo Natchez Trace, un sendero forestal que data de 10,000 años, utilizado primero por los nativos americanos y más tarde por los colonos que se dirigían al suroeste, abriendo la región. Construido en los años 30, de nuevo por el Cuerpo Civil de Conservación de la época de la depresión, el acceso a la Parkway está limitado a unas 50 entradas, ya que serpentea a través de tres estados.
El resultado: un recorrido en auto que se siente como un viaje a una era pasada, la via va curvándose perezosamente a través de colinas y pinos, sin bullicio, sin vallas publicitarias, sin gasolineras, sin hoteles, solo puro placer de conducir. Supervisado por el Servicio de Parques Nacionales, es un verdadero «camino de parque», con oportunidades para caminar, andar en bicicleta y montar a caballo a lo largo del camino. Al llegar a Natchez, que ahora es solo un pequeño pueblo, sentirá su estatus histórico como uno de los principales puertos fluviales, incluyendo un número de grandes mansiones antiguas, que abren sus puertas a tours, una oportunidad bienvenida para caminar a través de la historia, después de todo ese tiempo en el auto.
El escritor de Toronto Tim Johnson siempre está viajando, en busca de la próxima gran historia. Ha visitado 140 países en los siete continentes, ha rastreado leones a pie en Botswana, ha excavado huesos de dinosaurios en Mongolia y ha caminado entre medio millón de pingüinos en la isla de Georgia del Sur. Es colaborador de algunas de las publicaciones más importantes de América del Norte, como CNN Travel, Bloomberg y The Globe and Mail.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo
Descubra
Vivió 15 años con dolor y ahora viaja compartiendo el hallazgo que le cambió la vida
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
