Las acciones de Boeing Co. subieron alrededor de un 3 por ciento en las operaciones anticipadas de comercialización en el mercado, el miércoles, a pesar de que el gigante industrial registró su primera pérdida anual en más de 20 años paralelamente con la crisis del 737 MAX, que se prolonga y hace caer el balance final.
El fabricante de aviones se vio obligado a dejar en tierra su avión más vendido en marzo del año pasado después de dos accidentes mortales que mataron a 346 personas. Boeing espera que el costo financiero del cese de ventas del avión insignia alcance casi los USD 19 mil millones.
El informe de ganancias del cuarto trimestre de la compañía, publicado el 29 de enero, muestra que Boeing sufrió una pérdida neta interanual del cuarto trimestre por USD 1.01 mil millones (según los estándares contables GAAP) o USD 2.53 mil millones (según los estándares no GAAP).
La pérdida de USD 1.79 por acción (GAAP) o USD 2.33 (no GAAP) se basó en ingresos de USD 17.9 mil millones, que cayeron un 37 por ciento entre el cuarto trimestre de 2018 y el cuarto trimestre de 2019. Los analistas citados por MarketWatch esperaban ingresos por USD 21.7 mil millones.
Boeing dijo que las débiles cifras «reflejaban principalmente los impactos de la salida del mercado del 737 MAX».
«Reconocemos que tenemos mucho trabajo por hacer», dijo el presidente y CEO de Boeing, David Calhoun. “Estamos enfocados en devolver el 737 MAX al servicio de manera segura y en restaurar la confianza de larga data que la marca Boeing le representa al público que gusta del vuelo. Estamos comprometidos con la transparencia y la excelencia en todo lo que hacemos. La seguridad respaldará cada decisión, cada acción y cada paso que demos a medida que avancemos”.
Las acciones de Boeing cayeron más de un 9 por ciento en los últimos tres meses, mientras que su participación en el Dow Jones Industrial Average aumentó más de un 6 por ciento, en el mismo período de tiempo.
Algunos dicen que la recuperación del precio de las acciones del miércoles, a pesar de las decepcionantes cifras de ganancias, puede explicarse por la naturaleza prospectiva de los mercados y la confianza en el recién nombrado CEO de Boeing.
«Creo que el rebote es posiblemente un reflejo del nuevo CEO, de cómo está abordando el problema y, quizás, de cómo está presentando una imagen más favorable de la manera en la que Boeing abordará los problemas en el futuro», dijo Morris Armstrong, fundador de Morris Armstrong EA LLC, una consultoría fiscal, en una declaración a The Epoch Times. «Los mercados son prospectivos y la pérdida debe haber sido valorada, posiblemente menos de lo esperado», dijo Armstrong.
Mark Pacitti, fundador de Woozle Research, una firma de investigación de inversiones, dijo que las comunicaciones transparentes de Boeing les quitó la sorpresa al anuncio de las ganancias.
«La razón por la cual las acciones están aumentando es, en gran medida, porque Boeing ha dado a los inversores mucha más claridad sobre la factura total y esto ha eliminado una gran nube de incertidumbre, la cual estaba afectando el precio de las acciones», dijo Pacitti a The Epoch Times en un comunicado. «La administración ha destinado alrededor de USD 19 mil millones para cubrir el costo de la crisis y, esencialmente, han presentado todas las malas noticias de una sola vez y el mercado las está tomando bien, ya que los inversores temían algo mucho peor».
Además del dolor por el caso del 737 MAX, la demanda de su jet más grande y rentable, el 787 Dreamliner, ha disminuido frente a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, lo que provocó que la compañía redujera su producción, perjudicando el flujo de efectivo en un momento en que su deuda está aumentando.
Boeing, que produce catorce 787 Dreamliner por mes, dijo en octubre que espera reducir la producción a fines de 2020 a 12 unidades mensuales, en medio de una sequía de pedidos de China.
Sin embargo, desde octubre hasta enero, la compañía cambió sus perspectivas y ahora espera reducir aún más la producción de 787 Dreamliner, a 10 unidades por mes cuando comience el 2021.
Pérdida neta de pedidos
Otros vientos en contra para Boeing incluyen un reciente anuncio de que sus operaciones de aviones comerciales perdieron pedidos en 2019, marcando la primera vez, en décadas, que el fabricante de aviones sufre este tipo de golpe en sus negocios.
Boeing publicó cifras, el 14 de enero, que mostraban una pérdida neta de 87 pedidos de aviones, lo que significa que se cancelaron más pedidos de los que se hicieron. La compañía también registró los números más bajos de entregas de aviones en 11 años, perdiendo el primer puesto frente a su rival europeo Airbus, por primera vez en ocho años.
Aun así, Boeing terminó 2019 con una cartera de 5,406 aviones comerciales, lo que representa años de producción futura.
Los analistas estiman que Boeing ha estado perdiendo alrededor de USD 1 mil millones al mes debido a la salida del mercado del 737 MAX.
La agencia de calificación crediticia Moody’s dijo que había candidatizado para una posible baja de categoría la calificación crediticia senior, no garantizada A3, de Boeing.
Reuters contribuyó a este informe.
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