La lucha sobre quién tiene la culpa de la crisis de los inmigrantes ilegales en Nueva York se intensifica a medida que la ciudad se esfuerza por hacer frente a una afluencia de más de 100,000 personas procedentes de la frontera sur.
Mientras el alcalde de Nueva York y el gobernador del estado quieren que el gobierno de Biden se haga cargo de la crisis fronteriza, la Casa Blanca culpa a los republicanos.
Los empresarios se unieron a la lucha enviando una carta abierta, fechada el 28 de agosto, al presidente Joe Biden y a los líderes del Congreso, instándoles a abordar la «crisis humanitaria» que ha desbordado la ciudad de Nueva York, así como la zona fronteriza y otras ciudades de todo el país.
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La carta fue firmada por más de 100 ejecutivos de negocios, incluyendo grandes nombres como el CEO de JPMorgan, Jamie Dimon, y el CEO de BlackRock, Larry Fink.
«La comunidad empresarial de Nueva York está profundamente preocupada por la crisis humanitaria que ha provocado el continuo flujo de solicitantes de asilo en nuestro país», dice la carta.
«Escribimos para apoyar la petición realizada por la gobernadora de Nueva York [Kathy] Hochul de financiación federal para servicios educativos, de vivienda, de seguridad y de atención sanitaria para compensar los costos en los que están incurriendo los gobiernos locales y estatales con la limitada ayuda federal».
La Sra. Hochul calificó el problema de cuestión nacional en un discurso pronunciado la semana pasada y pidió al presidente Biden que asuma la responsabilidad de resolverlo.
«Esta crisis se originó en el gobierno federal y debe resolverse a través del gobierno federal», dijo la gobernadora. «Las fronteras y las decisiones sobre quién puede trabajar las determina exclusivamente el gobierno federal».
Hochul también solicitó al gobierno federal que agilice las autorizaciones de trabajo y proporcione ayuda económica a Nueva York en una carta dirigida al presidente el 24 de agosto (pdf).
Sin embargo, estas declaraciones agravaron las diferencias entre Hochul y el alcalde de Nueva York, Eric Adams, en relación con la crisis migratoria.
Adams culpó a la gobernadora y le pidió que ayudara a la ciudad.
«Yo creo que la gobernadora se equivoca. Ella es la gobernadora del estado de Nueva York. La ciudad de Nueva York está en este estado. Todos los condados de este estado deberían formar parte de esto», dijo Adams el 29 de agosto en un discurso en la Facultad de Derecho de la ciudad.
«Nosotros tenemos el 0.05 de la masa terrestre de este estado, y tenemos casi el 99% de los inmigrantes solicitantes de asilo».
El alcalde también pidió al presidente Biden que declare el «estado de emergencia» para ayudar a la ciudad a hacer frente a la llegada masiva de inmigrantes.
«Nosotros tenemos que hacer frente a esto en la frontera. Necesitamos una estrategia de descompresión. Tenemos casi 108,000 ciudades en todo el país. Todas deben absorber esto. Ellos dejaron caer todo esto sobre la ciudad de Nueva York», declaró el alcalde en su discurso, apuntando contra la Casa Blanca por dejar que Nueva York gestionara la crisis por sí sola.
«Cualquier plan que no incluya detener el flujo en la frontera es un plan fallido», dijo Adams en otro discurso, el 29 de agosto.
La Sra. Hochul fue invitada a la Casa Blanca para reunirse con el jefe de gabinete del presidente, Jeff Zients, el 30 de agosto para discutir soluciones al creciente problema de los inmigrantes en Nueva York.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, defendió la estrategia fronteriza del presidente Biden, afirmando que su plan está frenando el flujo de migración ilegal. La secretaria indicó que los republicanos eran los culpables de la crisis fronteriza.
La Sra. Jean-Pierre afirmó que el presidente ha estado abordando la crisis fronteriza por su cuenta sin obtener ayuda de los republicanos en el Congreso.
Ella acusó a los legisladores del Partido Republicano de negarse a proporcionar la financiación necesaria para abordar el sistema de inmigración «que no funciona».
«Lo que eligen hacer es jugar a la política», dijo la secretaria Jean-Pierre.
También señaló que la autorización de trabajo para los inmigrantes se rige por las leyes de inmigración vigentes que solo pueden ser modificadas por el Congreso.
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