Un grupo bipartidista de legisladores pretende prohibir que el gigante de las redes sociales TikTok opere en Estados Unidos. La iniciativa se produce después de que los servicios de inteligencia estadounidenses declararan que la aplicación supone una amenaza para la seguridad nacional.
El 13 de diciembre, el senador Marco Rubio (R-Fla.) y los representantes Mike Gallagher (R-Wis.) y Raja Krishnamoorthi (D-Ill.) presentaron en ambas cámaras del Congreso un proyecto de ley para prohibir la aplicación.
Los legisladores condenaron los vínculos de TikTok con el Partido Comunista Chino (PCCh) a través de su empresa matriz ByteDance, y dijeron que la empresa estaba recopilando datos de estadounidenses para el régimen comunista.
«El gobierno federal aún no ha tomado ni una sola medida significativa para proteger a los usuarios estadounidenses de la amenaza de TikTok», dijo Rubio. «No se trata de videos creativos, se trata de una app que está recopilando datos de decenas de millones de niños y adultos estadounidenses cada día».
«Sabemos que se utiliza para manipular feeds e influir en las elecciones. Sabemos que responde a la República Popular China. No hay más tiempo que perder en negociaciones sin sentido con una empresa títere del PCCh. Es hora de prohibir definitivamente TikTok, controlada por Bejing».
TikTok, una aplicación «usada como arma»
TikTok ha sido durante mucho tiempo objeto de escrutinio por parte del Congreso debido a sus vínculos con el PCCh y a la práctica de enviar datos de los usuarios a empleados de ByteDance ubicados en China.
Las leyes del PCCh clasifican los datos como un recurso nacional y obligan a las empresas ubicadas en China o que son propiedad mayoritaria de entidades chinas a entregar todos los datos al régimen a petición de éste, incluido el código fuente patentado y otra propiedad intelectual.
Los expertos en seguridad han descrito TikTok como una aplicación «usada como arma» por esta razón, y han dicho que la aplicación desvía una inmensa cantidad de datos de los estadounidenses que podrían ser enviados al PCCh. Dichos datos incluyen no solo el historial de navegación, sino también información de reconocimiento facial, pulsaciones de teclas, contraseñas, información bancaria e incluso cualquier cosa que los usuarios hayan copiado en su portapapeles virtual.
Asimismo, el director del FBI, Christopher Wray, ha afirmado en repetidas ocasiones que se trata de una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos y que, entre otras preocupaciones, el control de ByteDance sobre el algoritmo de la aplicación la hacía vulnerable a la manipulación del PCCh.
El régimen chino «podría utilizarla para controlar la recopilación de datos de millones de usuarios o para controlar el algoritmo de recomendación, que podría utilizarse para operaciones de influencia si así lo desea, o para controlar el software de millones de dispositivos, lo que le daría la oportunidad de comprometer técnicamente los dispositivos personales», dijo Wray durante una audiencia celebrada el 15 de noviembre en el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes.
Estos temores no son infundados.
Ejecutivos de TikTok admitieron anteriormente que censuraban información en la aplicación, suprimiendo videos que critican al PCCh o que hablaban de las atrocidades del régimen en Xinjiang y la plaza de Tiananmen.
Cuando se les preguntaba el motivo, los ejecutivos solían responder que la plataforma no está pensada para contenidos políticos. Sin embargo, esa respuesta es problemática, dado que la empresa no actuó en el 90 por ciento de sus anuncios que contenían desinformación electoral dirigida a las elecciones de mitad de periodo de Estados Unidos de 2022, incluidos contenidos que difundían mentiras descaradas sobre el proceso de votación en Estados Unidos.
La ley ANTI-RED SOCIAL del PCCh
Los tres legisladores enmarcaron su legislación como un intento muy necesario para defenderse de un régimen comunista cada vez más hostil. El PCCh es un adversario, dijo Gallagher, y no se puede permitir que explote los mercados estadounidenses en contra de los ciudadanos estadounidenses.
«TikTok es fentanilo digital que está creando adicción entre los estadounidenses, recopilando montones de sus datos y censurando sus noticias», dijo Gallagher. «También es una empresa de medios cada vez más poderosa que es propiedad de ByteDance, que en última instancia depende del Partido Comunista Chino, el principal adversario de Estados Unidos».
«Permitir que la aplicación siga operando en Estados Unidos sería como permitir que la URSS comprara el New York Times, el Washington Post y las principales cadenas de televisión durante la Guerra Fría. Ningún país con un mínimo interés en su propia seguridad permitiría que esto sucediera, por lo que es hora de prohibir TikTok y cualquier otra aplicación controlada por el PCCh antes de que sea demasiado tarde».
La legislación, titulada Ley para Evitar la Amenaza Nacional de Vigilancia, Censura e Influencia Opresivas en Internet y Aprendizaje Algorítmico por parte del Partido Comunista Chino (Ley ANTI-RED SOCIAL del PCCh), bloquearía y prohibiría todas las transacciones de cualquier empresa de redes sociales en China, Rusia y varios otros países extranjeros de interés, o bajo la influencia de estos países.
TikTok se burló de la decisión, y sugirió que el Congreso debería esperar a que se complete una revisión completa de la seguridad nacional. Esa revisión ha estado en curso desde 2019, cuando la Administración Trump dijo que la compañía debería ser obligada a vender a una entidad matriz con sede en Estados Unidos.
«Es preocupante que en lugar de alentar a la Administración a concluir su revisión de seguridad nacional de TikTok, algunos miembros del Congreso hayan decidido impulsar una prohibición motivada políticamente que no hará nada para avanzar en la seguridad nacional de Estados Unidos», dijo un portavoz de TikTok a The Epoch Times en un correo electrónico.
«TikTok es amado por millones de estadounidenses que utilizan la plataforma para aprender, hacer crecer sus negocios y conectarse con contenido creativo que les trae alegría. Seguiremos informando a los miembros del Congreso sobre los planes que se han desarrollado bajo la supervisión de las principales agencias de seguridad nacional de nuestro país —planes cuya implementación estamos llevando a cabo— para mejorar la seguridad de nuestra plataforma en Estados Unidos».
Los defensores del proyecto de ley, sin embargo, dijeron que era un paso vital para proteger al público de la influencia y la vigilancia extranjeras malignas.
«En un momento en que el Partido Comunista Chino y otros adversarios nuestros en el extranjero buscan cualquier ventaja que puedan encontrar contra Estados Unidos a través del espionaje y la vigilancia masiva, es imperativo que no permitamos que potencias hostiles controlen potencialmente redes de redes sociales que podrían ser fácilmente convertidas en armas contra nosotros», dijo Krishnamoorthi.
«La ley bipartidista ANTI- RED SOCIAL del PCCh es un paso firme para proteger a nuestra nación de la nefasta vigilancia digital y de las operaciones de influencia de los regímenes totalitarios. Las recientes revelaciones en torno a la profundidad de los vínculos de TikTok con el PCCh ponen de relieve la urgencia de proteger a los estadounidenses de estos riesgos antes de que sea demasiado tarde».
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