Los legisladores de Indianápolis incorporaron terminología en un proyecto de ley el cual prohibiría que las unidades gubernamentales estatales y locales exijan «pasaportes de vacunas» o que soliciten a los empleados que demuestren que han sido vacunados contra el virus del PCCh.
El proyecto de ley 1405 de la Cámara de Representantes no está directamente relacionado con los pasaportes de vacunas, originalmente se trataba de seguros y después se agregó la atención médica.
La terminología se introdujo como una medida de última hora—en el último minuto, según Indy Star.
Aunque ninguna autoridad gubernamental está exigiendo pasaportes contra COVID-19, los legisladores a favor de esto afirman que esto puede asegurar que seguirá siendo así en el futuro.
El proyecto de ley no prohíbe a las empresas privadas que exijan pruebas de haber recibido las vacunas contra COVID-19, ni se extiende a las escuelas, tampoco impide que los gobiernos rastreen los estados de vacunación.
“Los empleadores privados deben tomar las mejores decisiones para ellos y sus clientes”, dijo el presidente de la Cámara de Representantes del estado, Todd Huston, un republicano. “Consideramos que era más apropiado lidiar con eso solo en el ámbito gubernamental”.
El representante estatal demócrata, Ed Delaney, dijo que los pasaportes de vacunas emitidos por el gobierno no son algo real. “Es triste que en el último día—voy a usar una palabra elegante—estemos persiguiendo quimeras, creo que es una palabra griega, significa fantasías, cosas que realmente no existen”, dijo. «Pero existe la preocupación por la salud».
Según Fox59, el representante estatal republicano, John Jacob, estuvo esperando un proyecto de ley de este tipo, creyendo que esto era necesario.
“La idea de un estado que exija que las personas se apliquen una vacuna que aún es experimental, según los fabricantes de la vacuna, se consideraría una grave violación a la libertad individual de los habitantes de Hoosiers”, dijo Jacob.
La Cámara de Comercio de Indiana está a favor del proyecto de ley ya que la prohibición no se aplica a las empresas que deseen exigir una prueba de vacunación.
“Al excluir a las empresas de este proyecto de ley y esta disposición, esto le permite a las empresas que puedan necesitar requerir una prueba de vacunación”, dijo el presidente de la Cámara, Kevin Brinegar, y agregó: «Sino que también da la opción si ellos optaran por emitir una tarjeta o documento de vacunación».
El proyecto de ley fue aprobado por 88 votos contra 10 en la Cámara y 48 votos frente a 1 en el Senado. Ahora se dirige a la oficina del gobernador.
Los gobernadores de Arizona, Florida, Georgia y Texas ya tomaron postura en contra de las llamadas medidas de pasaportes de vacunas en diferentes magnitudes.
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