La variante delta de la COVID-19 está generando debates en todo Estados Unidos sobre la revisión de las medidas de mitigación de la pandemia, como los cierres y el uso obligatorio de mascarilla, pero en Pensilvania, algunos legisladores pretenden que los niños de las escuelas no lleven mascarilla, independientemente de las nuevas órdenes que se impongan.
«Si un niño quiere llevar mascarilla, déjelo. Si no, no deben tener que hacerlo», dijo el representante estatal Barry Jozwiak a The Epoch Times. «Debería ser una elección de los padres o de los alumnos». Los niños no corren un alto riesgo de contraer o propagar la COVID-19, dijo.
Jozwiak cuenta con el apoyo de 22 copatrocinadores para su legislación contra la mascarilla, HB 1746, que se encuentra ahora en el Comité de Educación de la Cámara. Prevé que anule cualquier uso obligatorio de mascarilla en el futuro.
«Sin importar que exista una disposición de la ley que diga lo contrario», dice el proyecto de ley, «los estudiantes y el personal de una entidad escolar y de una escuela no pública no estarán sujetos a la orden de usar mascarilla y no se les podrá exigir que lleven una mascarilla o un protector facial universal en la escuela».
El gobernador Tom Wolf dijo la semana pasada que no está considerando la posibilidad de restablecer una orden a nivel estatal para el uso de mascarilla en las escuelas K-12. Wolf está más centrado en que la población se vacune. Sin embargo, la administración está recomendando a los habitantes de Pensilvania y a las escuelas que sigan la orientación federal del Centro de Control de Enfermedades.
La orientación actual de los CDC indica que todas las personas de 2 años o más que no estén totalmente vacunadas deben llevar mascarillas en la escuela. La vacuna está disponible para los niños a partir de los 12 años.
Jozwiak afirma que es innecesario continuar con el uso prolongado de mascarillas en los niños, lo que, según él, provoca dolores de cabeza, fatiga y problemas de salud mental.
Numerosos estudios demuestran que los niños tienen muchas menos probabilidades de infectarse con el virus de la COVID-19 que los adultos. Además, hay pocas pruebas que sugieran que los niños son superpropagadores del virus, según un memorando de la legislación.
En abril de 2020, la entonces secretaria de Salud de Pensilvania, Rachel Levine, comenzó a exigir el uso de mascarilla. Pensilvania puso fin al uso obligatorio de mascarilla el 28 de junio. Levine fue entonces elegida por el presidente Joe Biden para ocupar el puesto de subsecretaria de Salud en el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU.
Jozwiak dice que es hora de volver a la normalidad.
«A medida que la pandemia de la COVID-19 disminuye, y dado que la vacuna de la COVID-19 sigue estando fácilmente disponible, es fundamental que nuestros niños vuelvan a la escuela este otoño sin ninguna carga indebida», dijo Jozwiak en la nota de la ley. «Después de las interrupciones en dos cursos escolares consecutivos, nuestros estudiantes deben centrarse en recuperarse de los impactos adversos de la pandemia, como abordar la pérdida de aprendizaje, volver a participar en las actividades extracurriculares y abordar sus preocupaciones de salud mental. Nuestros estudiantes necesitan avanzar en su educación y desarrollo, y no preocuparse por la mascarilla».
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