La presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), y el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), han dicho que es “justa” y “merecida” la indignación que algunos defensores del aborto han dirigido contra los jueces en funciones de la Corte Suprema (SCOTUS).
Según un borrador de opinión, filtrado por Politico el 2 de mayo, la Corte Suprema podría estar a punto de anular el caso Roe vs Wade.
“Sostenemos que Roe y Casey deben ser anulados”, escribió el juez Samuel Alito en la opinión mayoritaria de la corte. “Es hora de hacer caso a la Constitución y devolver el tema del aborto a los representantes electos del pueblo”.
La posible derogación del caso seminal sobre el aborto de 1973, que ha definido la ley federal sobre el aborto durante el último medio siglo, hizo que los defensores del aborto se movilizaran en Internet y en el Capitolio.
Minutos después de que se filtrara la decisión, Pelosi y Schumer emitieron un comunicado condenando rotundamente el documento.
«Los votos de los jueces designados por los republicanos para anular el caso Roe vs Wade serán una abominación, una de las peores y más perjudiciales decisiones de la historia moderna», escribieron ambos en una declaración conjunta el 2 de mayo. Dijeron que la decisión sería la «mayor restricción de derechos de los últimos cincuenta años».
La representante Pramila Jayapal (D-Wash.), líder del Caucus Progresista del Congreso de 96 miembros, dijo en un tuit del 2 de mayo: “Como una de las 1 de cada 4 mujeres en este país que ha elegido abortar, estoy indignada y disgustada por el borrador de opinión de SCOTUS”.
Desde entonces, los defensores del aborto han filtrado las direcciones de las casas de los jueces de la Corte Suprema al público y han organizado protestas frente a sus casas, lo que genera preocupaciones por la seguridad de los jueces.
Las protestas, han argumentado algunos, contravienen directamente la ley estadounidense.
Según el Código de EE.UU. 18 § 1507, protestar fuera de los hogares de las personas involucradas en un proceso judicial “con la intención de interferir, obstruir o impedir la administración de justicia, o con la intención de influir en cualquier juez, miembro del jurado, testigo o corte oficial, en el desempeño de su deber”, es causal de multas o penas de prisión.
El Departamento de Justicia (DOJ) no ha respondido a una solicitud de The Epoch Times para recibir comentarios sobre el tema legal.
Cuando se le preguntó al respecto durante una conferencia de prensa el 9 de mayo, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, respondió indirectamente: “Ciertamente no estamos sugiriendo que nadie infrinja ninguna ley”.
A pesar de que dichas protestas son una aparente contravención a la ley estadounidense, los líderes demócratas de la Cámara y el Senado han elogiado las manifestaciones.
“Si bien hemos visto y escuchado una angustia extraordinaria en nuestras comunidades, nos ha conmovido cómo tantos han canalizado su justa ira en acciones significativas: Planean marchar y movilizarse para que se escuchen sus voces”, dijo Pelosi sobre las protestas. “Gracias por su poderoso compromiso de continuar la lucha por los derechos de todos los estadounidenses”.
El comentario de Pelosi fue criticado después de que la oficina del grupo activista provida, Wisconsin Family Action, fuera atacada con fuego por activistas proaborto. Julaine Appling, presidenta del grupo, atribuyó el ataque a la retórica de Pelosi.
“Me parece que Nancy Pelosi es, en parte, responsable de incitar el tipo de violencia de la que fuimos víctimas temprano en la mañana del Día de la Madre”, dijo Appling. “Ese tipo de retórica calienta las cosas. No las enfría. Y nuestros líderes deben ser responsables y rendir cuentas por el tipo de mensaje que envían”.
Al otro lado del Capitolio, Schumer también elogió las protestas.
“La indignación entre las mujeres es palpable y real”, dijo Schumer, “y la indignación dirigida contra este tribunal es merecida”.
Algunos republicanos, preocupados por el riesgo para la seguridad personal de los jueces, han pedido al presidente del Tribunal Supremo, Roberts, que publique la decisión lo antes posible para evitar el riesgo de una mayor escalada.
El lunes, los senadores de ambos lados del pasillo se unieron para aprobar una legislación que aumentaría la seguridad de los jueces y sus familias mientras las protestas continúan sin cesar, sin que la Casa Blanca o el Departamento de Justicia indiquen que intervendrán para hacer cumplir la ley en torno a las protestas judiciales.
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