¿Podría un pequeño aditivo a su batido ser la clave para prevenir el cáncer de mama? Una investigación reciente revela el inesperado papel de la linaza en la alteración de la microbiota intestinal, reduciendo potencialmente el riesgo de cáncer de mama y presentando una nueva estrategia dietética contra esta enfermedad tan extendida.
Perspectivas del estudio: Linaza y riesgo de cáncer
El estudio publicado en Microbiology Spectrum examina la relación entre la microbiota intestinal —los billones de microorganismos que viven en nuestros intestinos— y los microARN (miARN) de la glándula mamaria. Estos miARN son cruciales para controlar los genes asociados al desarrollo del cáncer de mama.
Los investigadores examinaron los efectos de los lignanos en el organismo utilizando ratones hembra jóvenes. Los lignanos, son unos compuestos fibrosos naturales presentes en la linaza, que se han asociado a un menor riesgo de cáncer de mama.
Los resultados revelaron que la linaza, a través de sus compuestos únicos, trabaja con las bacterias intestinales para producir sustancias que pueden ayudar a prevenir el cáncer de mama. En particular, afecta a ciertos elementos genéticos de la glándula mamaria que son cruciales en la prevención del cáncer.
«La linaza es una fuente de lignano secoisolariciresinol diglucósido (SDG) y un aceite rico en ácido alfa-linolénico (ALA), ambos con efectos antitumorales», declararon los investigadores a The Epoch Times. La investigación subraya que el consumo de linaza entera es crucial para aprovechar todos sus beneficios para la salud. Este hallazgo se deriva de la observación de que ni el aceite de linaza ni el compuesto SDG por sí solos pueden proporcionar los mismos efectos que la linaza entera.
Investigaciones anteriores han demostrado que la linaza puede ralentizar el crecimiento de las células del cáncer de mama y posiblemente potenciar la eficacia de tratamientos como el tamoxifeno. Estos resultados son especialmente alentadores para las mujeres posmenopáusicas, ya que sugieren el potencial de la linaza para frenar la progresión y el riesgo de cáncer de mama.
«Si se confirman estos hallazgos, la microbiota se convierte en un nuevo objetivo para prevenir el cáncer de mama mediante la intervención dietética», afirma en un comunicado de prensa Elena M. Comelli, de la Universidad de Toronto y autora correspondiente del trabajo.
Linaza: Explicación del superalimento natural
La linaza, a menudo aclamada como «superalimento», ha atraído la atención de los entusiastas de la salud y de la comunidad científica.
El Memorial Sloan Kettering Cancer Center informa de que la linaza se utiliza para diversos beneficios para la salud, incluyendo:
– Prevenir el cáncer de mama, próstata y colon.
– Regulación del azúcar en la sangre en la diabetes de tipo 2.
– Reducción del colesterol alto.
– Aliviar los síntomas de la menopausia.
– Tratamiento del estreñimiento.
La linaza es abundante en ácidos grasos omega-3, principalmente en forma de ácido alfa-linolénico(ALA), conocido por sus efectos antiinflamatorios. Reducir la inflamación es crucial, ya que juega un papel importante en el desarrollo y progresión de diversas enfermedades, incluido el cáncer.
Además del ALA, la linaza es una fuente principal de lignanos. Estos potentes antioxidantes naturales se encuentran en cantidades hasta 800 veces mayores en la linaza que en otras plantas. Los lignanos tienen un doble propósito: combaten los radicales libres, retardando así el envejecimiento y promoviendo la salud, y funcionan como fitoestrógenos, imitando las hormonas estrógenos, particularmente relevantes para la salud de las mujeres.
Los estudios en curso destacan el potencial de los lignanos para controlar los síntomas de la menopausia, como los sofocos y los trastornos del sueño, y para disminuir el riesgo de cánceres sensibles a las hormonas, como el de mama, próstata y endometrio.
La Fundación Susan G. Komen recomienda tomar precaución. «Debido a que la linaza podría actuar de alguna manera como la hormona estrógeno, podría empeorar las condiciones sensibles a las hormonas. Algunas de estas condiciones incluyen cáncer de mama y de ovario. Hasta que se sepa más, evite tomar grandes cantidades de linaza si tienes una de estas condiciones.»
El Grupo de Práctica Dietética de Nutrición Oncológica señala que los estudios actuales han revelado efectos prometedores de la linaza, especialmente en relación con el cáncer de mama con receptores de estrógeno positivos (ER+). Se ha demostrado que la linaza reduce eficazmente el crecimiento y la propagación de células de cáncer de mama ER+.
Ellos advierten que la linaza debe consumirse como parte de la dieta, no como un suplemento, y recomiendan comer cantidades moderadas de dos a tres cucharadas de linaza molida al día.
«Los estudios clínicos han demostrado que el crecimiento del tumor de mama en pacientes con cáncer de mama se ralentiza con la ingesta diaria de 25 g de linaza que contiene 50 mg de SDG. En mujeres premenopáusicas con un alto riesgo de cáncer de mama, la ingesta diaria de 50 mg de SDG durante un año provocó muchos cambios en los biomarcadores de la mama, lo que sugiere una reducción del riesgo de desarrollar cáncer de mama en un 50%. Todo esto sugiere que la ingesta de alimentos ricos en lignanos, como la linaza (aproximadamente una cucharada al día), puede proporcionar algo de protección contra el cáncer de mama», dijo la Sra. Comelli a The Epoch Times.
La linaza es una excelente fuente de fibra dietética, que se asocia con un riesgo reducido de enfermedades crónicas, incluidos algunos cánceres. La fibra es vital para un sistema digestivo saludable, una función inmune sólida y la salud general.
La versatilidad dietética de la linaza la distingue. Se puede agregar fácilmente a una variedad de recetas, desde batidos hasta productos horneados, lo que ofrece un método sencillo para mejorar la ingesta nutricional.
Por sobre las semillas de lino enteras, para una mejor digestibilidad y garantizar la absorción total de sus beneficios, la Clínica Mayo recomienda utilizarla molida. Las semillas enteras pueden pasar por el sistema digestivo sin desarrollar todo su potencial.
Si bien se ha demostrado que las semillas de lino son seguras para la mayoría de las personas, un pequeño número ha informado reacciones alérgicas, aumento de problemas gastrointestinales y obstrucciones intestinales cuando se consumen en exceso.
Implicaciones futuras: dieta y prevención del cáncer
La investigación sobre el potencial de la linaza para mitigar el riesgo de cáncer de mama significa un gran avance en las estrategias dietéticas para la prevención de enfermedades. Se suma a la creciente evidencia de una conexión sustancial entre nuestra dieta y la salud en general, especialmente en lo que respecta a la prevención del cáncer.
Las implicaciones de esta investigación son significativas. «La microbiota gastrointestinal altera significativamente varios componentes de la dieta y afecta la salud humana», afirmó Jennifer Auchtung, profesora asistente de la Universidad de Nebraska-Lincoln, según un comunicado de prensa. A medida que la investigación profundiza en el nexo entre dieta y salud, enfatiza el enfoque de la atención médica preventiva en opciones dietéticas tan esenciales como las intervenciones médicas.
El estudio allana el camino para pautas dietéticas más personalizadas. Su objetivo va más allá del tratamiento de enfermedades para prevenirlas (en particular el cáncer) a través de alimentos naturales ricos en nutrientes. Esto resuena con la creciente inclinación pública hacia la salud holística, lo que podría remodelar nuestra comprensión de la dieta y la salud.
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