La detención de narcotraficantes en México corresponde a nuestro gobierno, no a extranjeros, dijo la mañana de este jueves el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa diaria, luego que el gobierno de Estados Unidos ofreciera recompensas para dar con cuatro de los hijos del Chapo Guzmán.
«Es una lista de presuntos delincuentes de la venta y tráfico de drogas, en este caso lo que tiene que ver con drogas sintéticas, con el fentanilo, hay una preocupación del gobierno de EE.UU. porque han perdido la vida muchos estadounidenses más de 100,000 por el consumo de estas drogas que son muy peligrosas y por esto tomaron esta decisión, no ha habido más que eso», dijo el mandatario mexicano el jueves por la mañana.
«Si están en territorio nacional, a quien corresponde detenerlos es a la autoridad nuestra, no se permite que ninguna fuerza extranjera actúe en esta materia y en ninguna otra en nuestro territorio, nosotros somos los que tenemos que hacer nuestro trabajo», agregó.
La declaración de López Obrador ocurre luego que el miércoles el gobierno de EE.UU. ofreciera recompensa de hasta USD 5 millones para quien diera información para la captura de varios narcotraficantes de importancia en México, incluyendo a los hijos del Chapo Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, que forman parte del cártel—Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López.
Respondiendo a una reportera acerca de si seguirá siendo una prioridad para su gobierno la detención de Ovidio Guzmán, dijo que «Sí todos. No hay impunidad para nadie».
En octubre pasado la Administración de Control de Drogas (DEA) había señalado a cárteles de drogas mexicanos como responsables de la crisis del fentanilo en EE. UU. tras la incautación de 1.8 millones de píldoras falsas y el arresto de 810 narcotraficantes en todo Estados Unidos, indicando la mayor cantidad comparada a los dos últimos años combinados.
En ese momento la DEA indicó que de acuerdo con “los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el año pasado más de 93,000 personas murieron por sobredosis de drogas en Estados Unidos”, registrando la mayor cantidad histórica de muertes relacionadas con las drogas en un año.
Donde la fiscal general adjunta, Lisa O. Monaco dijo: “Ahora trabajaremos en estrecha colaboración con México para buscar ayuda para cerrar estos laboratorios y pedimos a China que trabaje con nosotros para ayudar a detener el uso indebido de precursores químicos con fines delictivos”.
En noviembre, Richard Sanchez, agente especial asistente a cargo de la DEA en MacAllen, Texas, dijo a The Epoch Times, que su lucha diaria no era solo contra los cárteles mexicanos, responsables de la fabricación y el tráfico de drogas. El régimen chino también está involucrado.
«Sin duda, los precursores químicos [para la fabricación de medicamentos] se están enviando a México desde China», agregó.
Derek Maltz, exjefe de la la División de Operaciones Especiales (SOD) de la DEA, dijo que alrededor del 2013 hubo un aumento significativo en el número de muertes por sobredosis de opioides sintéticos, lo cual llevó a que la división investigara. En los primeros indicios se determinaron que el fentanilo estaba ingresando a EE. UU. a través de compras por correo y por Internet desde China.
Sin embargo, el exjefe dijo que poco después la SOD comenzó a identificar conexiones entre criminales transnacionales chinos y cárteles mexicanos en la distribución de fentanilo, ya que se exportaban grandes cantidades de fentanilo de China a México.
Con información de J.M Phelps.
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