Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han publicado sus documentos de orientación sobre la reapertura para ayudar a que las escuelas, los lugares de trabajo y para que otros espacios vuelvan a abrir de forma segura después de los cierres generalizados en todo el país para frenar la propagación del virus del PCCh.
Los documentos de orientación de los CDC incluyen herramientas de decisión diseñadas para escuelas, lugares de trabajo, campamentos, guarderías, sistemas de transporte masivo, bares y restaurantes. Seis «árboles de decisión» presentan situaciones de sí o no para ayudar a las empresas y organizaciones a determinar si están listas para reabrir.
«Estos seis árboles de decisión son para ayudar a los líderes de estas organizaciones a pensar en consideraciones de salud y tomar decisiones operativas durante la pandemia COVID-19», dijo un portavoz de los CDC en una declaración, informó Reuters. La emisora también informó que los CDC señalaron que podría emitir más pautas según sea necesario.
Los documentos de orientación de los CDC alientan a las empresas y a las organizaciones a pedir a los empleados que usen mascarillas para trabajar en la mayoría de los casos.
Anteriormente, la agencia de salud había recomendado que las personas usaran mascarillas mientras estuvieran en espacios públicos cerrados como precaución para reducir la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), también conocido como el nuevo coronavirus.
Los últimos documentos de orientación de los CDC también alientan a las empresas y a las organizaciones a coordinarse con los funcionarios de salud estatales y locales para tomar decisiones sobre cómo reabrir de forma segura.
Por ejemplo, al decidir si un restaurante o un bar debe abrir, los árboles de decisión de los CDC preguntan si la reapertura será coherente con los pedidos estatales y locales, y si la empresa está lista para proteger a los empleados con mayor riesgo de enfermedades graves. Si la respuesta es no, se aconseja a los restaurantes y bares que no abran.
La guía para la reapertura fue filtrada a los medios de comunicación cuando todavía estaba en «forma de borrador», comentó la semana pasada el director del CDC, el Dr. Robert Redfield.
En ese momento, la guía no había sido revisada a través de un proceso de evaluación entre agencias, afirmó Redfield, añadiendo que el proceso es «un esfuerzo reiterativo para asegurar que se presente una guía clara y efectiva al pueblo americano».
«No había visto una versión de la orientación que incorporara la aportación de los organismos y los grupos de tareas y, por lo tanto, todavía no me sentía cómodo publicando un producto de trabajo final», mencionó también en ese momento.
La última guía de la CDC se relaciona con otro conjunto anterior de pautas que la administración Trump publicó el 17 de abril. Las pautas de tres fases describen a grandes rasgos cómo los estadounidenses pueden empezar a tomar decisiones para aliviar las restricciones de distanciamiento social.
Trump aseguró en ese momento que la decisión final sobre cómo se implementaría la reapertura depende de los gobernadores, porque cada estado de EE. UU. es diferente.
«Los gobernadores estarán facultados para adaptar el enfoque que necesita las diversas circunstancias de sus propios estados», indicó.
«Si necesitan permanecer cerrados, les permitiremos hacerlo y si creen que es el momento de reabrir, les proporcionaremos la libertad y la orientación para llevar a cabo esa tarea y muy rápidamente, dependiendo de lo que quieran hacer».
«También estamos alentando a los estados a que trabajen juntos para armonizar sus esfuerzos regionales», añadió el presidente.
Reuters y The Associated Press contribuyeron a este informe.
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