Una encuesta ha encontrado que la mayoría de los votantes estadounidenses se oponen al Nuevo Acuerdo Verde.
Y si los estadounidenses tuvieran la opción, elegirían construir un muro a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos en lugar del Nuevo Acuerdo Verde, dijo el Grupo de Investigación de Remington.
Cuando se les preguntó sobre el Nuevo Acuerdo Verde, que ha sido impulsado fuertemente por la representante socialista Alexandria Ocasio-Cortez (D-NY) en las últimas semanas, cerca del 51 por ciento de los estadounidenses dijeron que se oponían a él, el 29 por ciento dijo que lo apoyaban, y el 19 por ciento no estaba seguro, encontró la encuesta.
Por su parte, «más de la mitad (51%) de los estadounidenses dicen que preferirían que el gobierno de Estados Unidos financie un muro fronterizo, en lugar de al Nuevo Acuerdo Verde (31%)», dice la encuesta.
Mientras tanto, según el encuestador, los independientes también prefieren construir el muro sobre el Nuevo Acuerdo Verde por un margen de dos a uno.
Los republicanos «prefieren un muro fronterizo por un margen de 68 puntos», dijo Remington Research.
«Si tuvieras que elegir, ¿preferirías que el gobierno de Estados Unidos gaste 5000 millones de dólares para financiar un muro fronterizo o 7000 millones de dólares para financiar el Nuevo Acuerdo Verde?» fue la pregunta que el encuestador les hizo a probables votantes para obtener una respuesta final sobre la preferencia por el muro o por el Nuevo Acuerdo Verde.
Titus Bond, presidente del Grupo de Investigación de Remington, dijo que el Nuevo Acuerdo Verde ha creado una «situación interesante» para los demócratas.
«Los votantes demócratas apoyan esta legislación, mientras que el resto del país se opone abrumadoramente a ella. Será intrigante ver a los líderes demócratas y a los aspirantes a la presidencia navegar por este tema con su propia base, al mismo tiempo que siguen atrayendo a los votantes en general», declaró Bond.
Bloomberg News informó el 25 de febrero que el Nuevo Acuerdo Verde de Ocasio-Cortez, cuyo objetivo es luchar contra el cambio climático, no será una solución barata.
El Foro de Acción Americana (AAF), que está encabezado por Douglas Holtz-Eakin -quien estuvo a cargo de la Oficina de Presupuesto del Congreso no partidista entre 2003 y 2005- encontró que el plan costaría entre 51 y 93 billones de dólares a lo largo de 10 años.
Eso incluye entre 8,3 y 12,3 billones de dólares para cumplir con el plan del Nuevo Acuerdo de eliminar las emisiones de carbono de los sectores del transporte y la energía en todo Estados Unidos. Mientras tanto, la AAF, descrita por Bloomberg como «alineada con los republicanos», dijo que el acuerdo costará entre 42,8 y 80,6 billones de dólares para su agenda económica.
«El Nuevo Acuerdo Verde es claramente muy caro», dijo el grupo. «Su expansión del papel del gobierno federal en algunas de las decisiones más básicas de la vida diaria, sin embargo, probablemente tendría un impacto más duradero y perjudicial que su enorme precio».
El Remington Research Group dijo que encuestó a 1212 votantes registrados en todo el país.
Derriban prototipos de muros fronterizos
Los prototipos de la competencia del presidente Donald Trump por un muro fronterizo cerca de San Diego, California, fueron derribados el miércoles, para dar paso a una nueva sección de vallado fronterizo real, informó Reuters.
«Dado que la prueba y evaluación de estos modelos prototipo está completa, han cumplido con su propósito y ahora están siendo retirados», dijo en una declaración Ralph DeSio, portavoz del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos.
Usando martillos neumáticos, escaleras y sopletes, las fuerzas especiales militares y las unidades especiales de la CBP emplearon semanas tratando de pasar por debajo, por encima y a través de las paredes de los prototipos para probar sus fortalezas y debilidades.
Las pruebas de los ocho prototipos, cuya construcción, según Michael Scappechio, agente de la Patrulla Fronteriza Supervisora del sector de San Diego, costó entre 300.000 y 500.000 dólares cada uno, y mostraron la efectividad del tipo de poste de acero, o «bolardos» que ya existe a lo largo de grandes secciones de la frontera.
Ahora, se está construyendo una nueva valla de 9 metros de alto como barrera secundaria a lo largo de una sección de 23 kilómetros, detrás de una valla existente de 5,5 metros de alto, dijo Scappechio.
La capacidad de los agentes para ver a través de una barrera es crucial para su seguridad, y una cerca hecha de postes de acero o «bolardos» es más fácil de reparar cuando se rompe y es relativamente rentable, dijo, mientras que la altura de 9 metros es un elemento disuasivo para los escaladores.
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