La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, defendió el plan de los demócratas de permitir que el Servicio de Impuestos Internos (IRS) obtenga información personal bancaria de los estadounidenses, un plan que los republicanos han denunciado desde que se hizo pública la noticia.
Desde la presentación de su proyecto de ley de reconciliación, los demócratas han insistido en que el proyecto no aumentará la deuda ni el déficit, afirmando que todos los nuevos gastos del proyecto se pagarán.
Además de aumentar significativamente los tipos impositivos marginales para pagarlo, los demócratas incluyeron en el proyecto de ley una sección para permitir al IRS recopilar información privada bancaria de los estadounidenses, incluyendo la relativa a la actividad que supere los 600 dólares.
En la CBS, Yellen defendió el plan, diciendo que «ha sido seriamente mal caracterizado».
Según Yellen, algunos opositores a la medida han pregonado que el plan de ingresos otorga al IRS información sobre transacciones individuales que sumen 600 dólares o más. Este no es el caso, dijo Yellen.
Más bien, indicó que el plan tiene un alcance mucho mayor. Si la medida se convierte en ley, el IRS podría obtener toda la información de las cuentas bancarias con más de 600 dólares de actividad total al año, en lugar de limitarse a la información sobre transacciones individuales.
A pesar de este umbral extremadamente bajo, Yellen dijo que la medida está diseñada para atacar a los estadounidenses ricos que ocultan ingresos al IRS. Gracias a la medida, Yellen dijo que el IRS podrá recaudar más impuestos de los ricos y cerrar la «brecha fiscal».
«Tenemos una brecha fiscal que durante la próxima década se estima en 7 billones de dólares, es decir, un déficit en la cantidad que el IRS está recaudando debido a que los individuos no declaran los ingresos que han obtenido», sostuvo Yellen.
El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), argumentó que la medida está destinada a las personas cuyos salarios provienen de las propinas, que a menudo se dan en efectivo y no se declaran al IRS. Yellen declaró que éste no es el caso.
«Tiende a ser entre individuos de altos ingresos cuyos ingresos son opacos», dijo Yellen. «Todo lo que implica esta propuesta son unos pocos números agregados sobre cuentas bancarias».
El apoyo de Yellen a la medida no es una sorpresa, ya que también la ha defendido anteriormente.
Durante una audiencia de supervisión en la Cámara de Representantes el 30 de septiembre, el representante David Kustoff (R-Tenn.) interrogó a Yellen sobre el plan, argumentando que constituye una invasión de la privacidad.
Yellen lo defendió diciendo: «No creo que sea una invasión de la privacidad y, mire, el IRS obtiene una gran cantidad de información que necesita para asegurarse de que los contribuyentes cumplen con el código tributario».
Los republicanos se enfurecen ante la medida prevista
Los republicanos no tardaron en rebatir los intentos de Yellen de defender la propuesta.
El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), dijo que los demócratas «quieren financiar su juerga de gastos tratando efectivamente a todos los estadounidenses de a pie como si estuvieran bajo auditoría del IRS».
«Debo haber olvidado cuando el presidente hizo campaña sobre dar a todo el mundo su propia auditoría», bromeó McConnell.
El senador Tommy Tuberville (R-Ala.) condenó el plan en un comunicado de prensa diciendo que «[viola] la libertad de cada estadounidense amante de la libertad que valora su privacidad financiera».
La senadora Cynthia Lummis (R-Wyo.) comentó que «ninguna cantidad de explicaciones cambiará el hecho de que este umbral de declaración de 600 dólares es completamente inaceptable, una extralimitación masiva del gobierno, y le da al IRS datos que no pueden manejar adecuadamente».
«La secretaria Yellen está insinuando esencialmente que el pueblo estadounidense comete regularmente fraude fiscal», continuó Lummis, advirtiendo que «esta norma facilitaría el fisgoneo injustificado del IRS».
McCarthy añadió: «Este programa de vigilancia cruza una línea, es antiestadounidense», y prometió que «los republicanos harán todo lo posible para detenerlo antes de que se ponga en marcha».
A pesar de las fuertes críticas, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), dijo en una conferencia de prensa que la propuesta se mantendría en el proyecto de ley.
«Si la gente está infringiendo la ley y no paga sus impuestos, una forma de seguirles la pista es a través de la medida bancaria», argumentó Pelosi.
Los demócratas moderados clave en el Senado, cuyo apoyo será necesario para que cualquier proyecto de reconciliación sea aprobado en la cámara alta, aún no han hecho declaraciones sobre el plan.
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