A medida que Australia levanta las restricciones establecidas en medio de la pandemia del virus del Partido Comunista Chino, cientos de personas han tomado las calles para ejercer su derecho a protestar.
Las multitudes se reunieron en la mayoría de las capitales al mediodía del sábado para manifestarse y marchar contra temas controvertidos como la vacunación obligatoria, la pérdida de derechos humanos, la corrupción en los medios de comunicación, la tecnología 5G y otras preocupaciones declaradas.
El organizador Myk Simms, con sede en Sydney, dijo a The Epoch Times que no todos los que asistieron estaban preocupados por cada uno de los temas que se plantearon.
«No a todos los presentes les importa demasiado el 5G», dijo Simms. «A algunos no les importan las vacunas. Pero todos tenían un problema con que se les quitaran sus derechos y libertades».
Simms también señaló que organizó a unos 20 mariscales voluntarios para asegurar que se aplicaran estrictas medidas de distanciamiento social durante toda la marcha en Sydney.
«Teníamos gente con megáfonos. Tuvimos a algunos de los nuestros, durante la mitad de la marcha, haciendo que la gente se detuviera cuando se acercaban demasiado», dijo Simms.
Aunque hubo informes de que los manifestantes abuchearon a la policía que había advertido a la multitud que estaban violando las normas de distanciamiento social, Simms dijo que la mayoría de la multitud de Sydney estaba feliz de cumplirlas.
Simms señaló que solo el «uno por ciento» de la multitud podría haber pensado que esos requisitos también deberían ser objeto de protesta.
«Yo mismo hice un discurso que decía que la policía estaba apoyando esto y nosotros apoyaríamos a la policía, y mantengamos ese espacio, y la multitud aplaudió eso», dijo Simms.
Se informó que hasta 500 manifestantes participaron en Sydney.
Cuando se le preguntó sobre la razón de las marchas, Simms dijo: «Solo la gente quiere que se respeten sus libertades, sus derechos humanos».
El grupo de Sydney se reunió en Hyde Park en el CBD antes de hacer un canto y luego caminar a la Casa del Parlamento de Nueva Gales del Sur sin incidentes o intervención policial.
Cantaron «libertad de elección» y «mi cuerpo, mi elección» en la marcha, refiriéndose a las vacunas.
El famoso australiano Pete Evans escribió en Instagram para desear suerte a la protesta, diciendo: «Ojalá pudiera unirme a todos ustedes hoy. Esto está sucediendo por toda Australia».
Cuando se le preguntó sobre la protesta, el jefe de salud de Victoria, Brett Sutton, dijo que «no hay ningún mensaje que pueda llegar a la gente que no cree en la ciencia».
«Probablemente no haya manera de llegar a ellos», dijo a los periodistas.
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