Una multitud de neoyorquinos de diferentes ámbitos se reunió el lunes frente al ayuntamiento para protestar contra el mandato de pasaportes de vacunas anunciado recientemente por el alcalde Bill de Blasio.
Está previsto que el mandato entre en vigor el 13 de septiembre.
The Epoch Times habló con los organizadores de la protesta, que expresaron sus razones para asistir.
Josephine Rose, una de las organizadoras de la protesta, sostuvo un megáfono y encabezó una marcha después de la manifestación. Dijo que, como trabajadora de la ciudad, siente que el mandato de la vacuna es una «extralimitación del gobierno».
«Me acaban de decir que para el día 13, o me vacuno, o tengo que hacerme pruebas semanales, pero es mi cuerpo y mi elección», dijo Rose a The Epoch Times. «Siento que es una extralimitación del gobierno, todos deberíamos poder elegir. No soy una antivacunas. Pero creo en que la gente pueda elegir».
Además, expresó su preocupación por la seguridad de la vacuna.
«Creo que en el VAERS se han registrado 12,000 muertes», dijo Rose. «Me vacunaron de niña, pero como adulta, yo decido sobre mi cuerpo, mis padres ya no tienen ningún derecho sobre mí y debería ser lo mismo con el gobierno».
VAERS son las siglas del Sistema para Reportar Eventos Adversos a las Vacunas, una base de datos de acceso público.
The Epoch Times no pudo confirmar de forma independiente las cifras mencionadas, pero el Centro Nacional de Información sobre Vacunas, una organización sin ánimo de lucro dedicada a «prevenir las lesiones y muertes por vacunas a través de la educación pública y la defensa de las protecciones del consentimiento informado en las políticas médicas y las leyes de salud pública», recopiló una serie de datos del 30 de julio en los que se afirma que, hasta el momento, se notificaron al VAERS 12,366 casos de muerte tras la vacunación contra el COVID-19, así como más de 545,000 casos de reacciones adversas.
Sin embargo, según un descargo de responsabilidad en el sitio web de VAERS, «la inclusión de eventos en los datos de VAERS no implica causalidad».
“The Holocaust didn’t happen overnight, it happened in stages. Stages of humiliation, discrimination, demonization, and the final stage, extermination.” A Holocaust survivor speaks at today’s protest outside NYC City Hall pic.twitter.com/Gv8T4tfkwd
— Brendan Gutenschwager (@BGOnTheScene) August 9, 2021
Otro de los principales organizadores, Kevin, que prefirió no dar su apellido, dijo a The Epoch Times que su preocupación con el «pase de las vacunas» es que todo el sistema tiene una parte tecnócrata que vigilaría al público y fomentaría la digitalización de la vida de las personas.
«Mi preocupación es que el pase [de vacunas] está abriendo la puerta a un nuevo sistema de vigilancia y control completamente tiránico. Creo que cada vez más gente está entendiendo esto. No se trata de las llamadas vacunas», dijo Kevin.
«Se trata de vigilar y digitalizar nuestra economía digitalizando nuestra vida cotidiana. Ya ha sucedido en los últimos 10 o 20 años con nuestros teléfonos, pero ahora lo están llevando al siguiente nivel en el que todo se rastrea de forma remota a través de tu teléfono, y ahora están ampliando la tecnología», señaló.
“No Nazi pass!” chants in New York at today’s protest against the vaccine pass at City Hall #NYC #NewYork pic.twitter.com/hSNuHLYjLQ
— Brendan Gutenschwager (@BGOnTheScene) August 9, 2021
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