Más de 1000 manifestantes pacíficos se reunieron en Hamburgo, Alemania, durante el fin de semana, y el líder del grupo exigió el establecimiento de un califato islámico en el país europeo.
Un califato es una forma de gobierno político-religioso bajo el liderazgo de un administrador islámico con el título de califa o «sucesor del profeta de Dios», considerado un líder de alto rango en el mundo musulmán.
Según informan los medios de comunicación locales alemanes y las autoridades alemanas, la protesta fue organizada por un joven que lidera un grupo populista extremista, Muslim Interaktiv. En varios videos de la protesta posteados en línea, se puede escuchar a un orador dirigiéndose a una multitud describiendo el califato como un «sistema que brinda seguridad» que ha sido «demonizado» por políticos y por medios de comunicación en Alemania. La multitud respondió con vítores y algunos con cánticos de «Allahu Akbar (Dios es el más grande)».
Una cuenta de redes sociales vinculada al grupo compartió varias fotografías y posteos de la protesta, que según dice tenía como objetivo oponerse a la «demonización de toda la vida islámica en Alemania».
Los organizadores afirman que la manifestación fue para protestar contra las supuestas políticas islamófobas del gobierno alemán y las supuestas campañas de desinformación de los medios contra los musulmanes en Alemania mientras reportaban sobre la guerra entre Israel y Hamás.
«Alzaremos nuestras voces juntos, inshallah (si Dios quiere)», decía un posteo en X. «Juntos contra la información islamófoba, tanto en las últimas semanas como en los últimos meses».
Muslim Interaktiv está vinculado a un grupo terrorista designado
El Servicio Federal de Inteligencia Criminal de Alemania, o BKA, y los servicios de seguridad de Hamburgo afirman que Muslim Interaktiv es parte de Hizb ut-Tahrir («Partido de la Liberación»), un movimiento islamista salafista global con el objetivo de unir al mundo bajo un califato islámico e implementar la sharia.
Hizb ut-Tahrir, fundada en Jerusalén en 1953, tiene prohibido operar en Alemania desde 2003. También está prohibido en muchos países de mayoría musulmana y se enfrenta a la resistencia de la Autoridad Palestina en Cisjordania, donde aboga por el restablecimiento de un califato por medios no militares, según el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.
El Reino Unido prohibió al grupo en enero bajo sus leyes antiterroristas, a pesar de que el grupo insiste en que es un partido político no violento. El analista de extremismo Ghaffar Hussain se mostró en desacuerdo con la designación. Sin embargo, advirtió en un foro celebrado en enero que, aunque no cree que Hizb ut-Tahrir sea un grupo terrorista, ya que su ideología no incita directamente a sus miembros a cometer actos violentos, sí difunde una retórica violenta y antisemita, y justifica y alienta la violencia y el terrorismo de otros grupos islamistas.
En su designación, el ministro británico del Interior, James Cleverly, citó los riesgos de incitación a la violencia y al antisemitismo durante las protestas por el alto al fuego en Gaza. La orden por la que se les designa organización terrorista tipifica como delito pertenecer a Hizb ut-Tahrir o invitar a apoyar al grupo. Los infractores pueden ser condenados a penas de prisión o multas.
Por el momento, no se ha planteado que la manifestación de Muslim Interaktiv en Alemania infringiera la ley, a pesar de que el grupo Muslim Interaktiv está clasificado por los servicios de inteligencia como extremista. En octubre de 2023, poco después de que los terroristas de Hamás atacaran Israel y mataran a 1200 personas, Muslim Interaktiv celebró una protesta similar que terminó en enfrentamientos con la policía.
La ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, del izquierdista Partido Socialdemócrata, dijo durante una entrevista con medios locales alemanes que la policía debe actuar si se cometen delitos durante manifestaciones políticas.
«Ver una manifestación islamista de este tipo en nuestras calles es difícil de soportar. Es bueno que la policía de Hamburgo haya contrarrestado la delincuencia con una gran presencia», dijo.
«La línea roja en la que terminaba la protección alemana del derecho de reunión y la libertad de expresión tenía que estar clara. Nada de propaganda terrorista a favor de Hamás, nada de discursos de odio dirigidos a los judíos. Si se producen delitos como éste, tiene que haber una intervención inmediata y contundente en las manifestaciones».
Los seguidores musulmanes de Interaktiv se clasifican como «pop-islamistas», y el creciente alcance e influencia entre los jóvenes ha sido calificado como preocupante por las autoridades alemanas. Según Faeser, el grupo está siendo vigilado.
«Otros grupos que suscitan emociones, radicalizan y reclutan a nuevos islamistas también están siendo vigilados por nuestras autoridades de seguridad. Esto incluye al grupo de la manifestación de Hamburgo», dijo.
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