Más de 130 legisladores británicos firmaron una carta al embajador chino condenando lo que describieron como un supuesto «programa sistemático y calculado de limpieza étnica contra el pueblo uigur» en el extremo occidental de la región china de Xinjiang.
«Cuando se presenta al mundo una evidencia tan abrumadora de graves abusos de derechos humanos, nadie puede hacer la vista gorda», decía la carta multipartidaria, firmada el martes por 135 legisladores británicos.
La carta se refería al enorme número de personas uigures que se cree que están detenidas y son objeto de persecución y tortura en los campos de detención de Xinjiang.
135 Cross-party MPs and Peers have signed a letter to express condemnation at the treatment of #Uyghurs ? https://t.co/FiQ438z0QQ
— APPG on Uyghurs (@AppgUyghurs) September 9, 2020
«Testimonio horrible”
«Entendemos que aproximadamente un millón de personas han sido detenidas y retenidas en campos de detención. Los que escaparon dan un testimonio horrible de persecución religiosa, abuso físico y tortura», escribieron los legisladores en la carta.
«Nosotros, como parlamentarios de Reino Unido, escribimos para expresar nuestra absoluta condena a esta opresión y pedimos que termine inmediatamente».
La carta se refería a los informes sobre el control forzado de la población y la detención masiva de uigures en Xinjiang, así como a «imágenes repugnantes» que al parecer mostraban un gran número de hombres con los ojos vendados y afeitados que esperaban ser cargados en trenes.
Los legisladores dijeron que las imágenes de vídeo— que se mostraron recientemente al embajador chino Liu Xiaoming durante una entrevista de la BBC— tenían similitudes «escalofriantes» con las imágenes históricas de los campos de concentración nazis.
Los legisladores citaron un descenso del 60 por ciento en las tasas de natalidad de los uigures en algunas zonas y que las mujeres uigures presuntamente están siendo sometidas a «esterilización forzada, aborto y extracción forzada de sus úteros», como parte de las «escandalosas acusaciones» que el régimen chino está tratando de reducir proactivamente la población uigur.
«Limpieza étnica»
«Las acciones del gobierno [chino] deben ser declaradas como lo que son: un programa sistemático y calculado de limpieza étnica contra el pueblo uigur», decía la carta.
La legisladora laborista Siobhain McDonagh, quien escribió la carta y la publicó en Twitter el miércoles, planteó el tema en la Cámara de los Comunes durante el turno de preguntas al Primer Ministro.
«Los llevan en manada a los trenes, les afeitan la cabeza, abortan a sus bebés», dijo.
McDonagh dijo a la Cámara que «un genocidio del pueblo uigur por parte del gobierno chino está teniendo lugar ante nuestros ojos».
Al decir que era «fácil criticar a la próxima superpotencia mundial» pero «más difícil tomar medidas», preguntó al primer ministro Boris Johnson qué medidas tomaría para «detener la limpieza étnica del pueblo uigur en Xinjiang», y le pidió que dirigiera una corte internacional sobre el asunto.
«Porque esta vez», dijo McDonagh, «ningún país puede decir que no lo sabía».
Johnson respondió que tenía «toda la razón en pedir la atención sobre la difícil situación de los uigures» y que Gran Bretaña plantea esas preocupaciones «directamente a las autoridades chinas, y seguiremos haciéndolo en el G-20, en las Naciones Unidas y en cualquier otro contexto».
Los funcionarios chinos se han burlado repetidamente de las acusaciones de genocidio, esterilización forzada y detención masiva de casi un millón de uigures en Xinjiang, diciendo que las acusaciones son mentiras fabricadas por las fuerzas anti-China.
Los funcionarios chinos sostienen que los uigures no son maltratados y que el estado chino siempre protege los derechos legítimos de las minorías étnicas.
Con información de The Associated Press.
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