La Oficina del Censo afirma que más de dos tercios de los votantes emitieron sus boletas por correo o antes del día de las elecciones presidenciales de 2020.
La oficina, en un nuevo informe, descubrió que el 69 por ciento de los votantes de todo el país aprovecharon la ampliación de las opciones de voto por correo y anticipado en numerosos estados, un salto significativo respecto a las elecciones anteriores. En 2016, alrededor del 40 por ciento de los votantes emitieron sus boletas a través de estos métodos no tradicionales, según las cifras publicadas esta semana.
La encuesta, un suplemento de la Encuesta de Población Actual, descubrió que el aumento del voto no tradicional fue impulsado por el voto por correo, que se duplicó hasta alcanzar el 43 por ciento. Algunos estados, como Nueva Jersey, enviaron boletas por correo a todos los votantes elegibles durante las elecciones de 2020. Estos cambios en la normativa electoral se reflejaron en los resultados de la encuesta, donde el porcentaje de votantes que optan por las opciones de voto anticipado o por correo aumentó exponencialmente hasta el 92.3 por ciento en 2020 desde el 7.9 por ciento en 2016. Estados como California y Vermont, que también enviaron boletas por correo a todos los votantes, registraron un incremento del 35 por ciento o más en el voto por correo y anticipado.
Los datos también revelaron que la tasa de voto no tradicional en Arizona, Texas, Montana, Nevada, Utah, Colorado, Oregón, Washington, Hawái, Maryland y el Distrito de Columbia fue del 82.9 por ciento o superior. Pero en Colorado, Oregón y Washington no se produjo un cambio significativo en la tasa, ya que dichos estados ya habían permitido en el pasado las elecciones exclusivamente por correo.
El cambio en el comportamiento de voto se debió en parte a las políticas adoptadas para evitar la aglomeración en las cabinas de votación durante la pandemia del virus del PCCh. Estas políticas, algunas de las cuales se aplicaron en el último momento o sin la aprobación de las legislaturas estatales, se convirtieron en objeto de múltiples demandas presentadas por el presidente Donald Trump, su campaña y varios republicanos, que alegaron que los cambios se hicieron violando la Constitución de Estados Unidos, dando lugar a numerosas irregularidades.
Desde entonces, varios estados republicanos han promulgado o están estudiando medidas legislativas para intentar proteger la integridad de las urnas en respuesta a las preocupaciones suscitadas durante las elecciones de 2020. Georgia introdujo una serie de cambios en la forma de votar de sus residentes, incluyendo la exigencia de una identificación con foto o aprobada por el estado para votar por correo en ausencia. La ley también ordena que se coloquen buzones seguros dentro de los lugares de votación anticipada con vigilancia constante y amplía el voto anticipado en todo el estado.
Del mismo modo, la legislatura de Florida aprobó la semana pasada una ley similar que establece directrices para los métodos de votación, los buzones y evita que los funcionarios electorales lleguen a acuerdos de consentimiento.
La encuesta también descubrió que los estados que registraron un aumento de los métodos de voto no tradicionales en 2020 también experimentaron un mayor cambio en la participación entre las elecciones de 2016 y 2020, en comparación con el resto de los estados.
«Las elecciones de 2020 serán recordadas durante mucho tiempo por haber tenido lugar durante una pandemia», dijo la Oficina del Censo en su comunicado. «Como indican los hallazgos anteriores, los métodos de votación utilizados por los que emiten una boleta fueron significativamente diferentes de las elecciones anteriores, aunque la magnitud y la naturaleza de los cambios variaron de un estado a otro».
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