El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo el domingo que un número importante de inmigrantes ilegales haitianos que se habían congregado a lo largo de la frontera entre EE. UU. y México la semana pasada están siendo liberados en Estados Unidos.
Unos 12,400 de los 17,000 haitianos están siendo atendidos por los tribunales de inmigración, dijo Mayorkas, y añadió que unos 5000 están siendo procesados por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Solo unos 3000 están detenidos, dijo.
«Aproximadamente, creo que son unos diez mil o así, doce mil», dijo Mayorkas a «Fox News Sunday» cuando le preguntaron por el número de inmigrantes ilegales haitianos que han sido liberados en el interior de Estados Unidos. La cifra podría aumentar cuando se procesen 5000 casos más, comentó.
Mayorkas añadió que la cifra de inmigrantes liberados «podría ser aún mayor» y añadió que el «número de los que son devueltos podría ser aún mayor». En un tono defensivo, Mayorkas dijo: «Lo que hacemos es seguir la ley tal y como la ha aprobado el Congreso».
«Se necesita una reforma legislativa», dijo, y añadió que el «sistema de inmigración de EE. UU. está roto».
El Departamento de Justicia estimó previamente en 2017 que alrededor del 43 por ciento de los inmigrantes ilegales liberados en EE. UU. no acuden a sus audiencias en los tribunales de inmigración. Cuando le preguntaron qué pasará con los 12,000 que fueron liberados la semana pasada, Mayorkas dijo que «es nuestra intención expulsar» a esos extranjeros.
«Tenemos directrices de aplicación de la ley que establecen que los individuos que han cruzado la frontera recientemente y que no se presentan a sus audiencias son prioridades de aplicación de la ley, y serán expulsados», dijo Mayorkas.
La semana pasada, más de 15,000 haitianos se congregaron debajo de un puente en Del Río (Texas), y esencialmente construyeron un poblado de chabolas antes de que numerosos funcionarios locales dieran la alarma de que se estaba gestando una crisis humanitaria.
Funcionarios del DHS, incluido Mayorkas, dijeron el 24 de septiembre que el campamento bajo el puente había sido desalojado. Un día después, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de EE. UU. dijo que el paso fronterizo de Texas se reabriría parcialmente.
La agencia también dijo que tiene previsto continuar con los vuelos a Haití durante todo el fin de semana, ignorando las críticas de varios legisladores demócratas y de algunos grupos progresistas.
El número de personas en el campamento de Del Río alcanzó su punto máximo el pasado fin de semana, ya que los migrantes, impulsados por la confusión sobre las políticas de la Administración Biden y la desinformación en las redes sociales, convergieron en el cruce fronterizo. Si bien Mayorkas y otros funcionarios de la Casa Blanca han afirmado que la frontera está cerrada, algunos republicanos han dicho que las decisiones de la administración de rescindir una serie de órdenes de inmigración de la era Trump han desencadenado un aumento de la inmigración ilegal.
Al mismo tiempo, Mayorkas y otros altos funcionarios han dedicado una cantidad significativa de tiempo en conferencias de prensa a condenar a algunos agentes de la Patrulla Fronteriza que fueron vistos a caballo cerca de haitianos que cruzaron ilegalmente la frontera. El fotógrafo que tomó esas imágenes la semana pasada dijo que los agentes no estaban azotando a los migrantes, como habían afirmado algunos funcionarios y legisladores demócratas.
«Algunos de los hombres haitianos empezaron a correr, tratando de rodear a los caballos», dijo el fotógrafo Paul Ratje a la emisora local KTSM, explicando la situación sobre el terreno.
«Nunca he visto que azoten a nadie», dijo, refiriéndose a los agentes. «Él lo estaba moviendo, pero se puede malinterpretar cuando se mira la foto».
Con información de Associated Press.
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