El Mazda MX-5 Miata es uno de los autos que más se ha mantenido apegado a su fórmula original con el paso de los años. Desde su introducción en 1989 han transcurrido cuatro generaciones, pero Mazda ha preservado los elementos esenciales que permitieron convertir a este pequeño roadster en el automóvil de su tipo más vendido de todos los tiempos.
El Mazda Miata de principios de los noventa era un auto simple, con poco poder, pero también poco peso y tamaño, tracción trasera y distribución de peso 50/50 casi perfecta. El Mazda MX-5 Miata del 2021 mantiene todos estos atributos, los de la receta original.
El actual MX-5 se introdujo en el 2016, y descontando la adición de Apple CarPlay y Android Auto de forma estándar, cambia muy poco para 2021. Sin embargo, sigue siendo quizás la mejor elección por su correlación precio-calidad de conducción, ahora que el Fiat 124 Spider (su hermano con sangre italiana) ha dejado de fabricarse.
He probado por años al MX-5 Miata, y en cada encuentro revivo la satisfacción del primer día. Es como un encuentro con ese viejo amigo que siempre te cuenta los mismos chistes, pero lo hace de tan buena forma que terminas riendo, aunque sepas el final.
Desde afuera y por dentro
El Miata es una clase magistral en diseño automovilístico. Si bien los modelos anteriores traían la nariz elongada, no lograban deshacerse de cierto aspecto aburrido. El rediseño de la última generación trajo un deportivo que, sin cambiar las dimensiones, semeja un auto mucho más alegre y llamativo, de aspecto casi sonriente.
No creo que exista otro auto con un precio moderado como el MX-5 (comienza en menos de $27.000 dólares) que llame tanto la atención, y como descapotable con la cubierta escondida, mucho menos.
Este es uno de los autos más pequeños en el mercado, y es evidente que no fue diseñado pensando en personas de gran tamaño o peso. Los que midan más de seis pies o 1.73 metros tendrán algunas dificultades para acomodar sus rodillas y cabeza mientras no repliegue el techo.
Los “pasaditos” de peso como yo, encontrarán los excelentes asientos deportivos Recaro incluidos en el paquete de rendimiento o “Performance Package” algo incómodos en los laterales. El problema son las libras de más, no puedo culpar a Mazda.
Para las personas más pequeñas, el Miata envuelve a los ocupantes y los enquista en una linda experiencia cerca de la carretera.
El interior es práctico, donde todo lo esencial está a la mano y ergonómicamente colocado casi a la perfección, pero no busque allí demasiado lujo o escondites para almacenamiento. Mazda no quiere distracciones a la hora de conducir, y el MX-5 Miata es la sinopsis de un auto concebido para los que gustan del buen manejo.
Equipamiento y seguridad
Las características estándar de asistencia al conductor incluyen Smart City Brake Support, que detendrá el vehículo a velocidades por debajo de las 30 millas o 48 kilómetros ante una colisión inminente. También están incluidos el monitoreo de punto ciego, alerta de tráfico cruzado trasero y advertencia de cambio de carril. Los modelos Grand Touring cuentan con limpiaparabrisas con sensor de lluvia, reconocimiento de señales de tráfico y luces altas automáticas.
La pantalla es pequeña pero muy adecuada para el Miata. Son 7 pulgadas que no obstruyen para nada en el tablero. Si bien el info-entretenimiento se nota anticuado y es algo lento para los estándares actuales, su operación es fácil e intuitiva.
Las cosas se complican cuando queremos operar la pantalla táctil. Mazda ha decidido limitar casi todas las opciones mientras el auto está en movimiento. Si bien entiendo y hasta aplaudo la decisión, durante mi prueba no pude utilizar algunas funciones de Android Auto, ni siquiera mientras estaba estacionado en un semáforo.
Los modelos Club y Grand Touring cuentan con un sistema de audio Bose de nueve bocinas, subwoofer y parlante en el reposacabezas del asiento, para poder escuchar alguna conversación telefónica mientras el techo está replegado y disfrutamos del aire.
En la carretera
Hay dos configuraciones básicas para el Mazda MX-5 Miata del 2021: la clásica, con capota blanda, y la RF, que significa fastback retráctil. El techo rígido del RF que desaparece agrega protección contra la intemperie y convierte el automóvil en un cupé de aspecto atractivo, aislándolo mejor del ruido exterior, pero también reduciendo el espacio para la cabeza y en el maletero.
Todas las versiones están impulsadas por un motor de 4 cilindros y 2.0 litros que produce 181 caballos de fuerza y 151 libras-pie de torque. La tracción es trasera en todos los modelos, y aunque hay una opción de transmisión automática, me atrevería a recomendar la manual de seis velocidades.
Un auto tan divertido a la hora de conducir acrecienta su encanto cuando puedes ser tú quien establezca las marchas. Puedes reducir ante una curva cerrada o al sentir la potencia desfallecer subiendo un cerro, pero hay que saber “tirar” los cambios. Para los que lean esta columna fuera de Estados Unidos, la aclaración les parecerá una tontería, pero sepan que aquí, la enorme mayoría de los jóvenes no tienen ni idea de cómo conducir un auto manual. Una pena.
El MX-5 nunca ha sido un “auto de números”, especialmente en esta época de autos deportivos o incluso SUV’s que rebasan con facilidad los 700 caballos de fuerza. Sus 181 caballos pueden parecer modestos e inofensivos, pero en la vida real, gracias al poco peso y las notorias cualidades de manejo que Mazda imprime a sus autos, no hay otro deportivo que, por el precio, ofrezca tanto goce.
Como antes dije, casi cada año tengo la oportunidad (fortuna podría decir) de probar un MX-5 Miata. Fui con él a extasiarme viendo un eclipse total de sol. Llevé a mi anciana madre para un corto paseo que quedó grabado en uno de los videos más alegres que he filmado y me ha transportado en excursiones por caminos con paisajes que solo en un descapotable se podrían disfrutar a plenitud.
En cada ocasión he concluido con una sensación más sublime que cuando pruebo otros autos. Hay algo de confidencia y complicidad en un Mazda MX-5 Miata que solo encuentras cuando haces amistad con él, y es muy fácil que te gane el corazón.
Para escoger
El 2021 MX-5 Mazda Miata convertible viene en tres niveles de equipamiento: Sport, Club y Grand Touring. Los tres tienen el mismo motor de cuatro cilindros en línea con tecnología Skyactiv-G de Mazda y 181 caballos de fuerza. También hay una variante de techo rígido llamada Miata RF, que viene en versiones Club y Grand Touring.
El modelo de entrada Sport comienza en los $ 26,830 con transmisión manual. La adición de transmisión automática le costará $ 1,350. El MX-5 Miata Club de gama media se vende al por $ 30,290 y es en nuestra opinión la mejor opción. El Club está dirigido a los conductores más entusiastas, y trae diferencial de deslizamiento limitado y ruedas de 17 pulgadas. También es la única versión que ofrece el paquete Brembo / BBS / Recaro disponible, que viene con buenos frenos Brembo, rines BBS y asientos Recaro. Ese paquete cuesta $ 4,670.
El Grand Touring de gama alta comienza en $ 31,770. El modelo con techo rígido RF se ofrece solo como Club o Grand Touring, y agrega $ 2,755 a la factura.
BMW Z4, Chevrolet Camaro Convertible, Ford Mustang Convertible, Subaru BRZ o Toyota 86 pueden considerarse entre sus competidores.
Concluyendo
El legendario MX-5 Miata no es el más rápido, cómodo o práctico de su clase. Muchos competidores le aventajan, pero ninguno llega a superar su correlación entre precio y rendimiento.
Quizá no tenga tantos encantos como sus contrincantes, pero sus atributos son suficientes como para mantenerlo en la cima como el roadster más vendido de la historia. Por algo será.
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