El líder de la minoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell, dijo que seguirá siendo miembro del Senado hasta que termine su mandato, a pesar de abandonar el puesto de líder, y que planea centrarse en lidiar con los desacuerdos dentro del partido.
«He servido más tiempo como líder que nadie en la historia de Estados Unidos, 18 años. Así que miren, finalmente pensé que era el momento de ir en una dirección diferente. Pero no voy a dejar el Senado», dijo McConnell en una entrevista el 2 de abril con el locutor de radio Terry Meiners. En febrero, McConnell anunció su intención de abandonar el puesto de líder del Partido Republicano en el Senado en noviembre, cargo que ocupó durante 17 años.
El mandato del senador termina en enero de 2027, dos años después de abandonar el puesto de líder del Senado. Cuando se le preguntó si se quedaría durante toda la legislatura, McConnell confirmó su decisión. «Oh, sí. Sí, ya saben, no sé cuántas veces puedo decir eso. Pero eso es exactamente lo que voy a hacer».
McConnell pretende ahora concentrarse en la «cuestión de aislamiento» del Partido Republicano e intentará «ayudarnos a alcanzar la mayoría en el Senado».
«Estoy particularmente involucrado en luchar realmente contra el movimiento de aislamiento en mi propio partido», dijo el senador. «El símbolo de eso últimamente es, ¿vamos a ayudar a Ucrania o no?, y creo que es extremadamente importante que lo hagamos. No soy especialmente fan de la administración Biden, en particular de la decisión de salir corriendo de Afganistán, que es como dar luz verde a Putin. Pero estamos donde estamos, y los europeos han dado un paso adelante».
McConnell indicó que era «preocupante» ver a muchos republicanos ir en la misma dirección que el senador Rand Paul (R-Ky.) con respecto a Ucrania. Paul se ha opuesto firmemente a enviar más ayuda exterior a Ucrania. Alrededor de la mitad de los republicanos en el Senado optaron en contra de enviar a Ucrania 60.000 millones de dólares en financiación.
El líder del Partido Republicano en el Senado señaló que «no estamos perdiendo ninguna de nuestras tropas» en la cuestión de Ucrania. «Los ucranianos son los que están luchando. Si los rusos toman Ucrania, algún país de la OTAN será el siguiente, y entonces estaremos justo en medio. Por tanto, creo que, basándonos en los hechos, esto es absolutamente lo que deberíamos hacer, pero simplemente no estamos de acuerdo en esto».
McConnell advirtió que este era el «momento más peligroso» para Estados Unidos desde la caída del Muro de Berlín, debido a la creciente amenaza terrorista, señalando que Estados Unidos lo experimentó durante el 11-S y que Israel «ciertamente lo está experimentando ahora». Además, Estados Unidos se enfrenta a la «competencia de las grandes potencias» de Rusia y China.
Mientras que Rusia se está pareciendo a la «ex Unión Soviética», China no solo presenta una dura competencia comercial, sino que también plantea «problemas de seguridad nacional», afirmó el senador, añadiendo que ante tales circunstancias, es hora de que «el mundo democrático se unifique».
«El primer ministro de Japón dijo que si quieren enviar un mensaje al presidente Xi, venzan a Putin. Esa es la opinión de los surcoreanos, los taiwaneses y los australianos. Este es un problema mundial para las democracias. Ellos necesitan nuestro liderazgo y nosotros necesitamos su colaboración y ahí es donde voy a poner la mayor parte de mi atención en los próximos años».
El Partido Republicano en el año electoral
Hablando de las próximas elecciones presidenciales de este año, McConnell dijo que tanto el candidato demócrata como el republicano —el presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump— «no puntúan muy bien entre el público». Sin embargo, «uno de ellos va a ganar».
«Tenemos una buena oportunidad, creo, de voltear el Senado sin importar cómo salga la carrera presidencial. Tengo 13 titulares, ninguno de ellos está en una carrera difícil. Tenemos Virginia Occidental, que creo que hemos ganado (…) y buenas oportunidades de ganar en Montana, Ohio, Pensilvania y, aunque parezca mentira, Maryland», dijo.
«Tenemos un gran candidato en Maryland. Uno no pensaría que pudiéramos competir allí, pero lo estamos haciendo. Así que lo que quiero decir es que lo que está dentro de mi nivel de impacto es intentar darle la vuelta al Senado. Me gustaría que la persona que me suceda sea el líder de la mayoría».
Cuando se le preguntó si tenía «en realidad algún contacto» con el presidente Trump, el Sr. McConnell no dio una respuesta directa. «Tengo las manos ocupadas lidiando con el Senado», dijo en su lugar.
El senador respaldó públicamente al presidente Trump como candidato presidencial del Partido Republicano recién el mes pasado, después de que el expresidente arrasara en todas las contiendas, menos en una durante el Supermartes.
«Está más que claro que el expresidente Trump se ha ganado el apoyo necesario de los votantes republicanos para ser nuestro candidato a la presidencia de Estados Unidos (…) No debería ser una sorpresa que, como candidato, tendrá mi apoyo», dijo el Sr. Connell durante su respaldo.
La salida del Sr. McConnell de la posición de liderazgo del Partido Republicano se produjo después de múltiples incidentes de salud el año pasado. En marzo de 2023, fue hospitalizado tras caerse de un hotel en Washington. También se congeló delante de los periodistas en dos incidentes separados.
Otros legisladores se jubilarán o buscarán otros puestos, por lo que no se presentarán a la reelección en las elecciones de 2024.
A finales de noviembre, 26 legisladores habían anunciado sus planes, de los cuales 19 eran representantes de la Cámara de Representantes y los siete restantes, senadores.
Entre los legisladores que planean retirarse se encuentran los representantes Bill Johnson (R-Ohio), Tony Cárdenas (D-Calif.), Brad Wenstrup (R-Ohio) y John Sarbanes (D-Md.), así como los senadores Joe Manchin (D- W.Va.), Mike Braun (R-Ind.), y Mitt Romney (R-Utah).
Un análisis de FiscalNote, una empresa de inteligencia política, muestra que la edad media de los miembros del actual 118º Congreso es de 58 años, tres años menos que en el Congreso anterior. La media de edad de los miembros del Senado es de 64 años, mientras que la de los de la Cámara de Representantes es de 57 años.
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