Mientras la Comisión Nacional de Salud de China seguía anunciando más infecciones por el virus del PCCh en el noreste del país, algunos habitantes de la zona describieron una atmósfera tensa mientras se esforzaban por comprender la verdadera magnitud del brote.
Las autoridades chinas han informado sistemáticamente de menos infecciones por virus, lo que ha llevado a los ciudadanos a desconfiar de los datos oficiales.
El virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus, estalló por primera vez en la ciudad de Wuhan, en el centro de China, a finales de 2019. Se extendió rápidamente por todo el país.
Tras un breve período en el que la mayoría de las regiones de China informaron de pocas o ninguna nueva infección, se han producido brotes del virus desde principios de abril en las provincias de Heilongjiang, Jilin y Liaoning, en el noreste de China.
Jilin
Las autoridades de Jilin anunciaron el «paciente cero» de la segunda oleada de brotes el 8 de mayo, una señora de la limpieza de 45 años que trabajaba en la oficina de la policía de la ciudad de Shulan.
En el plazo de diez días, el virus se propagó a los distritos cercanos de la ciudad de Jilin, así como a Shenyang, la capital de la provincia de Liaoning. El 13 de mayo se cerró toda la ciudad de Jilin, se suspendió todo el transporte público y las autoridades restringieron los movimientos de la gente.
El 20 de mayo, el Sr. Li, un residente de Shulan, le dijo a la edición en chino de Epoch Times: «El director de la oficina de policía de Shulan se infectó con el virus y visitó el Hospital Popular de Shulan para recibir tratamiento, lo que causó el cierre de la oficina de policía».
Cuando The Epoch Times contactó con la oficina de la policía por teléfono, un empleado de apellido Wang negó que el director estuviera infectado.
Por otro lado, el dueño de un hotel en el distrito de Gaoxin, en la ciudad de Jilin, dijo que tres personas habían sido infectadas con el virus en su área, pero los residentes no saben cómo lo contrajeron.
«Cerré mi hotel aunque el gobierno no lo pidió», dijo el propietario del hotel. «Nuestra población local sabe lo grave que es el brote. Ninguno de nosotros se atreve a abrir nuestros negocios».
El propietario de una tienda de comestibles en el distrito de Gaoxin dijo que las autoridades han ordenado una cuarentena estricta para un gran número de personas, sin permitirles salir de sus casas en absoluto porque habían visitado el distrito de Shulan o Fengman de Jilin después del 1 de abril.
«Mi vecino visitó Shulan hace más de 50 días. No tiene ningún síntoma. Pero fue puesto en cuarentena en su casa», dijo el dueño de la tienda.
Varios residentes locales dijeron que las autoridades emitieron más restricciones el 21 de mayo. Desde entonces, en cada hogar solo puede haber una persona que salga de la casa para hacer compras cada día.
Yuan Min, que vive en el distrito de Panying, en la ciudad de Jilin, dijo que uno de sus parientes, que estaba siendo tratado en el hospital local de Jihua por una enfermedad pulmonar no relacionada con el virus, fue dado de alta recientemente.
Yuan dijo que creía que su pariente había sido dado de alta porque el hospital necesitaba acomodar a los pacientes de COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh. El Hospital de Jihua no está actualmente en la lista de hospitales designados como instalaciones exclusivas para COVID en la ciudad de Jilin.
Heilongjiang
En abril, la segunda oleada de brotes afectó a Harbin, la capital de la provincia de Heilongjiang, así como a Mudanjiang y su ciudad suburbana Suifenhe, dos ciudades de Heilongjiang que limitan con Rusia.
En las últimas semanas, las autoridades locales han anunciado que no hay nuevas infecciones en Heilongjiang. Pero residentes locales dijeron a la edición en chino de Epoch Times el 23 de mayo que las autoridades han mantenido estrictas medidas de aislamiento.
«La mayoría de los mercados al aire libre han sido cerrados por el gobierno. A algunos otros se les pide que reduzcan sus horas de funcionamiento», dijo la Sra. Li, residente de la ciudad de Jiamusi en Heilongjiang.
Li dijo que los vendedores de los mercados al aire libre le dijeron que los mercados no funcionarían con normalidad antes del 28 de mayo, día en que concluyen las reuniones políticas anuales del Partido Comunista Chino en Beijing.
Al mismo tiempo, la esposa de un agente de policía en Jiamusi dijo que Wang Wentao, gobernador de Heilongjiang, planea visitar Fuyuan —un municipio a nivel de condado dentro de Jiamusi— el 25 de mayo. Y para asegurarse de que las medidas de aislamiento se aplican mientras Wang realiza la visita, todos los mercados al aire libre se cerrarán el 25 de mayo, según dijo la mujer, que se enteró de esta información por su marido.
The Epoch Times no pudo verificar esta información de forma independiente.
Un informante del gobierno de Jiamusi también le dijo a The Epoch Times que las autoridades planean reabrir el puerto de China y Rusia en la ciudad de Fuyuan pronto, lo que permitiría a los ciudadanos chinos que se encuentran en Rusia regresar. Han estado varados desde principios de abril, cuando las ciudades portuarias chinas prohibieron el tránsito a todos los viajeros debido a los temores de las autoridades de que el virus pudiera propagarse desde aquellos que estaban infectados en Rusia.
El informante dijo que los hospitales de Jiamusi están preocupados de que la reapertura del puerto pueda causar otro brote de virus en la ciudad.
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