Meta finalizó su programa de verificación de hechos, entre otros cambios importantes.
Esto es lo que hay que saber.
«Demasiado sesgados políticamente»
Meta introdujo el programa de verificación de hechos en 2016 después que Donald Trump ganara las elecciones presidenciales de ese año.
Después de las elecciones, el CEO Mark Zuckerberg dijo que trabajaría con «organizaciones respetadas de verificación de hechos» para reducir la desinformación en Facebook. Poco después, se dio a conocer formalmente el programa de verificación de hechos, expresando la creencia que «proporcionar más contexto puede ayudar a las personas a decidir por sí mismas en qué confiar y qué compartir».
Las organizaciones que formaban parte del programa, incluida Snopes, podían analizar las publicaciones. Si decidían que una publicación contenía información falsa, se marcaba, con la nota de verificación de hechos que la acompañaba, o se eliminaba.
«Después de que Trump fuera elegido en 2016, los medios de comunicación tradicionales escribieron sin parar sobre cómo la desinformación era una amenaza para la democracia», dijo Zuckerberg en un video el 7 de enero. «Intentamos, de buena fe, abordar esas preocupaciones sin convertirnos en los árbitros de la verdad, pero los verificadores de hechos simplemente han sido demasiado sesgados políticamente y han destruido más confianza de la que han creado, especialmente en Estados Unidos».
Joel Kaplan, otro ejecutivo, dijo en un comunicado que la intención del programa era que expertos independientes dieran a las personas más información sobre las publicaciones virales para que pudieran juzgar por sí mismas lo que leían.
«Así no es como se desarrollaron las cosas, especialmente en Estados Unidos», escribió. «Los expertos, como todo el mundo, tienen sus propios prejuicios y perspectivas. Esto se reflejó en las decisiones que algunos tomaron sobre qué comprobar y cómo. Con el tiempo, acabamos comprobando demasiados contenidos que la gente entendería como discurso y debate político legítimo. Nuestro sistema tuvo entonces consecuencias reales en forma de etiquetas intrusivas y reducción de la distribución. Un programa destinado a informar se convirtió con demasiada frecuencia en una herramienta para censurar».
Cambio hacia el modelo de X
Meta lleva años copiando algunas funciones de X, antes conocido como Twitter. Threads, de Meta, se introdujo por primera vez como una aplicación de mensajería de video, pero más tarde se rediseñó para que sirviera de plataforma al estilo de X para breves ráfagas de pensamiento. Zuckerberg también lanzó una versión premium tras el lanzamiento de Twitter Blue por parte de Elon Musk.
La última medida de Facebook es sustituir el programa de verificación de hechos por una función de notas de la comunidad al estilo de X, elaboradas a partir de los usuarios.
«Vamos a deshacernos de los verificadores de hechos y a sustituirlos por notas de la comunidad, similares a X», dijo Zuckerberg.
Kaplan dijo que el enfoque de X funciona.
«Dan poder a su comunidad para que decida cuándo las publicaciones son potencialmente engañosas y necesitan más contexto, y personas de diversas perspectivas deciden qué tipo de contexto es útil para que otros usuarios lo vean», dijo. «Creemos que esta podría ser una mejor manera de lograr nuestra intención original de proporcionar a la gente información sobre lo que están viendo, y una que es menos propensa a la parcialidad».
Musk aplaudió el desarrollo. «Esto es impresionante», escribió en X.
Cómo obtener las notas
Community Notes en X utiliza colaboradores, que ofrecen valoraciones de ciertas publicaciones que consideran que ofrecen información engañosa.
Para ser adjuntada a una publicación, una nota propuesta debe ser consensuada por colaboradores «que a veces han discrepado en sus valoraciones anteriores», según X. «Esto ayuda a evitar valoraciones unilaterales».
Incluso algunos de los posts de Musk han recibido Notas de la Comunidad.
X dice explícitamente que las personas normales son contribuyentes valiosos, en lugar de tener una dependencia de los profesionales.
Zuckerberg dijo en 2016, antes de que se introdujera el programa de verificación de hechos, que Facebook históricamente confiaba en los usuarios para ayudar a la compañía a entender qué era falso y qué no, pero que el problema se había vuelto tan complejo que era necesario trabajar con grupos de verificación de hechos.
Los ejecutivos vuelven ahora a los usuarios, diciendo que las notas se basarán en la contribución de los usuarios. Y el programa de Meta tampoco controlará qué notas aparecen, según Kaplan. Las notas en las que haya acuerdo «entre personas con diversas perspectivas» aparecerán en público.
Los elogios llegan con cierta oposición
Algunos criticaron la medida.
«La decisión de Meta de poner fin a la verificación de hechos potenciará la desinformación que corre desenfrenada por nuestras plataformas digitales, distorsionando aún más nuestra realidad y socavando nuestra democracia»,dijo el senador Michael Bennet (D-Colo.).
Angie Drobnic Holan, directora de la International Fact-Checking Network, cuyos miembros trabajaron en el programa de Meta, dijo que el cambio «perjudicará a los usuarios de las redes sociales que buscan información precisa y fiable sobre su vida cotidiana y sus interacciones con amigos y familiares».
Por otra parte, Musk no fue la única persona que elogió los cambios.
«La Primera Enmienda protege las decisiones editoriales de las empresas de redes sociales sobre los contenidos de sus plataformas. Pero es bueno que las plataformas intenten voluntariamente reducir la parcialidad y la arbitrariedad a la hora de decidir qué contenidos albergan, especialmente cuando prometen a los usuarios una cultura de libertad de expresión como hace Meta», declaró a The Epoch Times Ari Cohn, asesor principal de política tecnológica del grupo de defensa de la libertad de expresión FIRE, en una declaración enviada por correo electrónico.
«¡Un gran día para la libertad de expresión!», escribió el representante Randy Weber (R-Texas) en X. «Parece que Meta por fin toma una página del libro de jugadas de Elon Musk y deja que los estadounidenses tomen decisiones por sí mismos».
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