El teniente general retirado Michael Flynn presentó una reclamación por 50 millones de dólares contra el Departamento de Justicia y el FBI, alegando que participaron en una «persecución maliciosa», mientras su abogado señalaba que podría presentar una demanda.
Una notificación fue presentada el 22 de febrero por Flynn (pdf), el exjefe de la Agencia de Inteligencia de Defensa, nombrando al FBI, al Departamento de Justicia, al exabogado especial Robert Mueller, a la Oficina Ejecutiva del Presidente y a la Fiscalía de Estados Unidos en Washington.
El abogado de Flynn, Jesse Binnall, dijo a Just the News, que informó sobre la notificación el 15 de mayo, que Flynn está preparado para presentar una demanda contra el gobierno federal si el Departamento de Justicia rechaza su reclamación.
«Durante años los burócratas del gobierno y los agitadores de la izquierda creyeron que podían atacar al general Flynn con impunidad. Ya no», dijo, al mismo tiempo que añadió que la reclamación es el preludio de una demanda. «Si atacan injustamente a un héroe estadounidense, entonces deben rendir cuentas».
«Esta Acción Federal de Reclamaciones por Agravios es solo el comienzo de esa rendición de cuentas. El teniente general Michael Flynn ya no será quien reciba la ira de la izquierda radical sin merecerla», añadió Binnall.
El aviso declaró que está buscando daños compensatorios por la pérdida de ganancias o ingresos pasados y futuros, angustia emocional, una oportunidad perdida de ser un asesor de seguridad nacional, honorarios y gastos de abogados, costos judiciales y restricciones contra su libertad personal.
«De todos los nombrados por el presidente [Donald] Trump, al que más odiaba la Casa Blanca de Obama era a Flynn», dice la presentación de Flynn (pdf), que sirvió brevemente bajo la Administración Trump como asesor de seguridad nacional.
En 2016, el FBI y otros funcionarios comenzaron a «expresar su desprecio por el candidato Donald J. Trump y empezaron a considerar formas en las que podría obstaculizar a Donald Trump como candidato o como presidente, si ganaba las elecciones de 2016».
«Como parte de estos esfuerzos, el FBI comenzó a apuntar a Flynn», afirma también. «Flynn no era un desconocido para el FBI y sus directivos, muchos de los cuales consideraban a Flynn como un enemigo personal del FBI y del éxito de sus propias carreras en el FBI».
Inicialmente, Flynn se declaró culpable de los cargos de mentir al FBI y dijo que cooperaría con la investigación de Mueller sobre si la campaña de Trump se confabuló con Rusia. Más tarde, pidió retirar su declaración cuando surgieron pruebas que sugieren que la agencia federal de seguridad mostró que los funcionarios creían que Flynn realmente no mintió a los agentes durante la investigación.
Sin embargo, los funcionarios federales, según la presentación, «iniciaron el procesamiento a pesar de saber que Flynn no había hecho declaraciones falsas, y por lo tanto no tenía una creencia razonable de que Flynn había cometido el delito penal y, por lo tanto, no había causa probable».
Mientras tanto, las pruebas mostraron que a principios de 2017, Flynn fue el aparente objeto de una reunión entre el expresidente Barack Obama, el entonces vicepresidente Joe Biden y funcionarios del FBI en la Oficina Oval.
«Durante esta reunión, los participantes acordaron tratar de dañar al presidente entrante Trump y a su nueva Administración, incluso tratando de procesar a Flynn, el Asesor de Seguridad Nacional entrante del presidente electo Trump, para hacer que renuncie a la NSA, para paralizar la capacidad del presidente Trump de implementar cambios en la seguridad nacional y en la política de asuntos exteriores, y potencialmente para hacer que Flynn se vuelva contra el presidente Trump», señaló la presentación de Flynn. «También acordaron ocultar este acuerdo al ‘equipo de transición'».
Finalmente, en mayo de 2020, el Departamento de Justicia presentó una moción para retirar todos los cargos contra Flynn. Ese mismo año, Trump le concedió un indulto presidencial antes de que el juez federal Emmet Sullivan desestimara el caso en diciembre de 2020.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con Flynn por comentarios.
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