El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La.) y otros líderes del Congreso expresaron su optimismo de que los legisladores puedan evitar un cierre del Gobierno antes de la fecha límite del viernes, tras una reunión el 27 de febrero con el presidente Joe Biden en la Casa Blanca.
«Fue franco y honesto», dijo Johnson, que participó en una reunión en la que también participaron el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer (D-NY), el líder de la minoría en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries (D-NY), y el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell (R-Ky.). Johnson también habló con el presidente en el Despacho Oval.
Dijo que le transmitió el punto de que las necesidades de Estados Unidos deben ser lo primero, es decir, hacer frente a la crisis en la frontera sur.
Johnson se mostró «muy optimista» sobre la posibilidad de evitar el cierre del gobierno. Afirmó que le dijo al presidente que la Cámara estudiaría los asuntos incluidos en el paquete del Senado, como la ayuda exterior a Ucrania, Israel y el Indo-Pacífico.
Reiteró que el presidente puede tomar medidas unilaterales para asegurar la frontera.
«Es hora de actuar. Es una catástrofe y debe terminar», dijo Johnson. «Y conseguiremos financiar al gobierno, y seguiremos trabajando en ello».
Schumer dijo que la reunión había sido «productiva» e «intensa».
En su opinión, «estamos avanzando a buen ritmo» en el intento de evitar el cierre del Gobierno. Remarcó que los desacuerdos entre las partes no son «insuperables».
Un cierre afectaría a mucha gente «incluso durante un corto periodo de tiempo», y Johnson estuvo de acuerdo, según Schumer.
Schumer recordó que el debate sobre la ayuda a Ucrania «fue uno de los más intensos que he tenido en mis muchas reuniones en el Despacho Oval», y añadió que McConnell, el presidente, la vicepresidenta Kamala Harris y Jeffries insistieron en la urgencia de conseguir ayuda para Kiev.
No conseguir la ayuda para los ucranianos probablemente resultaría en una victoria rusa, la OTAN «se fracturaría en el mejor de los casos», y los aliados de Estados Unidos darían la espalda a Washington, y los adversarios se sentirían «envalentonados», dijo Schumer.
«Así que le dijimos al Presidente de la Cámara que lo hiciera», dijo Schumer. «Le dije que este es uno de los momentos… en los que la historia te está mirando por encima del hombro. Y si no hacen lo correcto, sea cual sea la política inmediata, se arrepentirán».
Cuando se trata de ayudar a Ucrania, el asunto está «en sus manos», dijo Schumer, refiriéndose a Johnson.
Además, Schumer expresó su interés en que se apruebe la legislación fronteriza.
Jeffries dijo que la reunión incluyó una conversación franca sobre la frontera.
Poco después de la reunión en la Casa Blanca, el portavoz del Departametransientnto de Estado, Matthew Miller, dijo que la pelota está en el tejado de la Cámara de Representantes en relación con Ucrania.
«El camino hacia la victoria ahora mismo está en Estados Unidos», dijo a los periodistas.
La financiación que expira en la medianoche del 2 de marzo afecta al Departamento de Asuntos de Veteranos, el Departamento de Transporte, el Departamento de Agricultura y el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano.
El resto de la financiación del Gobierno expira en la medianoche del 9 de marzo y afecta al Departamento de Defensa, el Departamento de Educación, el Departamento de Trabajo, el Departamento de Justicia, el Departamento de Salud y Servicios Humanos, el Departamento de Interior, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el Departamento de Estado y el Departamento de Comercio.
Seguridad fronteriza
A principios de mes, el Senado no aprobó un paquete de USD 118,000 millones que incluía ayudas a Ucrania, Israel y la región Indo-Pacífica. También incluía medidas de seguridad fronteriza que, según la mayoría de los republicanos, se quedaban cortas.
Incluía autoridad de emergencia para que el Departamento de Seguridad Nacional cerrara la frontera si se alcanzaba una media de 4000 encuentros diarios en una semana.
Si la media de encuentros llegaba a 5000 al día durante el mismo periodo, el secretario del DHS habría tenido que cerrar la frontera.
La legislación también habría limitado la autoridad de libertad condicional del presidente. Este poder le da la capacidad de permitir la entrada de más inmigrantes ilegales en el país y eleva el listón legal para el examen inicial de las solicitudes de asilo.
También habría acelerado el tiempo de tramitación del asilo de muchos años a seis meses.
El paquete no incluía la restauración de la política de la administración Trump de Permanecer en México, que muchos republicanos han dicho a The Epoch Times que es imprescindible.
Desde el 1 de octubre de 2023, que es el inicio del año fiscal, ha habido 961.537 encuentros en la frontera, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP). Durante la presidencia de Biden se han producido más de 7.25 millones de encuentros fronterizos, según la CBP.
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