El vicepresidente Mike Pence criticó a Nike y a la NBA por las acciones emprendidas después de que el ejecutivo de la NBA, Daryl Morey, publicara un tweet en apoyo de los manifestantes de Hong Kong a principios de este mes.
Durante su discurso en el Centro Internacional de Eruditos Woodrow Wilson el 24 de octubre, Pence dijo: «Nike se promociona como un llamado campeón de justicia social, pero cuando se trata de Hong Kong, prefiere dejar su conciencia social en la puerta».
Pence luego apuntó a la NBA, y agregó: «Algunos de los principales jugadores y propietarios de la NBA, que habitualmente ejercen su libertad para criticar a este país, pierden sus voces cuando se trata de la libertad y los derechos del pueblo de China».
Nike, que sacó algunos productos de las tiendas chinas durante el verano después de que la persona que los diseñó indicara su apoyo a Hong Kong, también retiró la mercancía de los Rockets en China después de que Morey publicara su tuit.
Mientras tanto, varias personas empleadas en la NBA, incluido el propietario de los Rockets, Tilman Fertitta, el entrenador de los Rockets, Mike D’Antoni, y la estrella de los Brooklyn Nets, Kyrie Irving, se han negado a ofrecer su apoyo a Morey.
Otros lo han criticado abiertamente. La estrella de Los Angeles Lakers, LeBron James, afirmó que Morey estaba «mal informado» cuando envió el tweet. La estrella de los cohetes James Harden se disculpó con China después de la publicación de Morey.
La NBA dijo que reconoció que las opiniones de Morey «han ofendido profundamente a muchos de nuestros amigos y fanáticos en China, lo cual es lamentable». El comisionado Adam Silver dijo más tarde a los periodistas que la NBA apoya la libertad de expresión.
En una charla dada en Nueva York, dijo que el régimen chino y las empresas chinas presionaron a la NBA para despedir o disciplinar a Morey, lo que la liga se negó a hacer.
“Beijing está tratando de influir en la opinión pública estadounidense, coaccionando a las empresas estadounidenses. Muchas corporaciones multinacionales estadounidenses se han arrodillado ante el atractivo del dinero y los mercados de China, al silenciar no solo las críticas al Partido Comunista Chino, sino incluso las expresiones afirmativas de los valores estadounidenses», continuó Pence antes de señalar a Nike como ejemplo.
Pence también dijo que Estados Unidos apoya a los manifestantes de Hong Kong, que defienden sus derechos.
«Respetamos la soberanía de las naciones, pero Estados Unidos también espera que Bejing cumpla con sus compromisos», dijo Pence. «Y el presidente Trump ha dejado en claro en repetidas ocasiones que sería mucho más difícil para nosotros llegar a un acuerdo comercial si las autoridades recurren al uso de la violencia contra los manifestantes de Hong Kong».
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