Una activista estadounidense asesinada por disparos en una manifestación en Cisjordania el 6 de septiembre fue alcanzada «sin intención», según una investigación del ejército israelí.
Aysenur Ezgi Eygi, de 26 años, que también tenía nacionalidad turca, murió en una manifestación cerca del cruce de Beita, donde decenas de manifestantes quemaron neumáticos y arrojaron piedras contra las fuerzas de seguridad israelíes, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un comunicado emitido el 10 de septiembre.
«La investigación determinó que es muy probable que fuera alcanzada de forma indirecta y accidental por disparos de las FDI que no iban dirigidos contra ella, sino contra el principal instigador de los disturbios», señalaron las FDI.
Las IDF expresaron «su más profundo pesar» por la muerte de Eygi.
La División de Investigación Criminal de la Policía Militar de las FDI llevó a cabo la investigación, que será revisada por el Cuerpo de Abogados Generales Militares.
Eygi recibió un disparo durante una manifestación semanal en Beita contra un asentamiento israelí cercano, Evyatar, recientemente legalizado por el gobierno israelí.
La coalición de gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu incluye partidos que representan a los residentes de Cisjordania, que Israel denomina Judea y Samaria.
El gobierno apoya y amplía agresivamente el derecho de los judíos a vivir en la zona.
Eygi, natural de Seattle y recién graduada de la Universidad de Washington, era activista del Movimiento de Solidaridad Internacional, un movimiento dirigido por palestinos que resiste a Israel en Cisjordania y Gaza.
Se anuncia a sí misma como dedicada a tácticas no violentas. Sin embargo, tiene un largo historial de manifestaciones que desembocaron en actos violentos, en su mayoría llevados a cabo por las fuerzas de seguridad israelíes, pero también por grupos terroristas palestinos.
Su declaración de objetivos aboga por la «acción directa», incluida la «interrupción creativa de la actividad de las fuerzas de ocupación israelíes».
NGO Monitor, un grupo de vigilancia, señala que el grupo «anima a los activistas a emprender ‘acciones directas’ que a menudo los ponen en peligro y en confrontación directa con las Fuerzas de Defensa israelíes durante las operaciones militares».
En un incidente muy publicitado, Rachel Corrie murió en 2003 cuando ella y otros manifestantes intentaban bloquear una excavadora israelí cerca del paso fronterizo de Rafah con la Franja de Gaza.
La excavadora operaba para impedir el contrabando de armas a Gaza.
El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, criticó la matanza el 10 de septiembre en Londres, calificándola de «no provocada e injustificada».
Pidió a las IDF que hicieran «cambios fundamentales en la forma en que operan en Cisjordania, incluyendo cambios en sus reglas de enfrentamiento».
«Nadie debería recibir un disparo mientras asiste a una protesta», afirmó.
La familia de Eygi en Estados Unidos rechazó la conclusión de las FDI.
Hicieron pública una declaración en la que decían: «Estamos profundamente ofendidos por la insinuación de que su muerte a manos de un francotirador entrenado no fue intencionada en modo alguno. El desprecio mostrado por la vida humana en la investigación es espantoso».
El ISM también rechazó la conclusión.
Jonathan Pollak, manifestante israelí que presenció el tiroteo, declaró que se produjeron enfrentamientos entre palestinos que arrojaban piedras y tropas israelíes que disparaban primero gases lacrimógenos y luego munición.
Dijo que la violencia se había calmado una media hora antes de que Eygi recibiera los disparos, después de que manifestantes y activistas se hubieran retirado varios cientos de metros del lugar de la manifestación.
Otro activista dijo que hubo calma, pero solo durante unos minutos.
Pollak declaró que vio a dos soldados israelíes subirse al tejado de una casa cercana, apuntar con un arma en dirección al grupo y disparar, alcanzando una bala a Eygi.
Dijo que estaba a unos 15 metros de ella y que los soldados estaban al menos a 240 metros.
Pollak dijo que Eygi estaba a cubiert junto a un olivo. Una activista que estaba con ella dijo que antes ella y Eygi se habían escondido detrás de un contenedor de basura.
Con informacion de Associated Press y Reuters
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