La ministra de Sanidad de Canadá, Patty Hajdu, justificó su decisión de enviar documentos sin tachar (tapar parte de la información) sobre el despido de dos científicos chinos del Laboratorio Nacional de Microbiología (NML), con sede en Winnipeg a una comisión no parlamentaria para su revisión, en lugar de a la Comisión de Relaciones Canadá-China de la Cámara de los Comunes. Los diputados de la oposición criticaron la medida diciendo que podría generar responsabilidades por una posible violación a la seguridad nacional.
«[El] Gobierno de Canadá reconoce que la supervisión proporcionada por el Parlamento es esencial para un gobierno que funcione bien, [y respeta] la necesidad de transparencia y la importancia de la rendición de cuentas ante los canadienses», dijo Hajdu el lunes ante la Comisión de Relaciones Canadá-China de la Cámara de los Comunes.
“Pero en este caso particular, la información solicitada tiene implicaciones tanto para la privacidad como para la seguridad nacional”, dijo.
La Cámara de los Comunes de Canadá emitió el 2 de junio una orden exigiendo la liberación de documentos sin tachar relacionados con la transferencia de virus con China desde entidades de investigación de ambas naciones. En lugar de cumplir con la orden de la Cámara, Hadju le dijo al comité, a principios de este mes, que había enviado los documentos solicitados al Comité de Parlamentos de Seguridad Nacional e Inteligencia (NSICOP), un comité independiente de cualquiera de las dos cámaras del Parlamento canadiense, para su revisión.
Los documentos en cuestión pertenecen al despido en enero de los científicos Xiangguo Qiu y su esposo, Kending Cheng, de sus puestos en la NML. La pareja fue escoltada fuera del edificio del laboratorio por la RCMP y despojada de sus autorizaciones de seguridad en julio de 2019. En marzo de 2019, Qiu había estado a cargo de enviar muestras de virus peligrosos de Ébola y Henipah al Instituto de Virología de Wuhan.
El parlamentario conservador, Michael Chong, dijo el lunes que varias disposiciones de la Ley del Comité de Parlamentos de Seguridad Nacional e Inteligencia, que sirven como pauta para el NSICOP plantean preguntas sobre la capacidad del comité para producir un escrutinio imparcial del papel del gobierno federal en la transferencia de los virus.
La subsección 5 (1) de la Ley NSICOP establece que los miembros del comité son contratados y despedidos «por recomendación» del primer ministro, y que ocupan el cargo a su gusto. El primer ministro también tiene el poder de determinar el presidente del comité, de acuerdo con la subsección 6 (1) de la ley.
Mientras tanto, un ministro federal tiene el poder de rechazar la información solicitada por el comité en virtud de la subsección 16 (1). Según la subsección 8 (1) (b), los ministros federales también pueden bloquear la revisión del comité a cualquier asunto que consideren «perjudicial para la seguridad nacional».
“Claramente es el comité equivocado para responsabilizar al gobierno por las violaciones a la seguridad nacional. Es como el zorro cuidando el gallinero”, dijo Chong.
Añadió que al enviar estos documentos al NSICOP, Hajdu violó dos órdenes del comité Canadá-China y una orden de la Cámara.
Varios ministros federales que han testificado ante el comité Canadá-China han negado conexiones entre el envío de virus y el despido de los dos científicos chinos, pero no han brindado explicaciones claras sobre cómo su remoción se ha convertido en una cuestión de seguridad nacional.
Qiu había viajado varias veces al Laboratorio Nacional de Bioseguridad de Wuhan, que forma parte del Instituto de Virología de Wuhan, entre 2017 y 2018, incluido un viaje para capacitar a científicos y técnicos chinos para operar en un laboratorio de nivel 4, que es el estándar de bioseguridad más alto.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.