El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó este martes que los servicios secretos de Rusia y Venezuela mantienen contactos tras la fallida operación armada que buscaba desbancar del poder a Nicolás Maduro, y no descartó que Moscú asista a Caracas en la investigación.
«En lo que se refiere a la investigación de la invasión de Venezuela por mercenarios que tenían la tarea de perpetrar actos terroristas, sabotajes y derrocar al presidente legítimo (según Rusia), nuestros servicio secretos mantienen contactos», dijo Lavrov en una rueda telemática.
El jefe de la diplomacia rusa recalcó que todos los contactos de su país «con Venezuela, con su Gobierno legítimo, se llevan a cabo un marco jurídico, en base a acuerdos intergubernamentales, ratificado por los parlamentos venezolano y ruso, y tienen fuerza de ley».
Subrayó que eso también se refiere a la cooperación militar entre ambos países y la prestación de servicio a los equipos militares que se suministran al país andino.
Rusia condenó la llamada «Operación Gedeón», que fue repelida por Maduro, que está acusado de narcotráfico en EE.UU. y por cuya captura las autoridades de ese país ofrecen una recompensa de 15 millones de dólares.
En las acciones armadas, que tuvieron lugar los pasados días 3 y 4, participaron medio centenar de exmilitares venezolanos opositores y empleados de Silvercorp, una empresa estadounidense que presta servicios militares
Al menos ocho personas murieron en el enfrentamiento con las fuerzas armadas venezolanas en el pueblo pesquero de Macuto y entre los 45 detenidos hay dos ciudadanos estadounidenses, Luke Denman y Airan Berry, que trabajan para Silvercorp.
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