El estreñimiento afecta gravemente la calidad de vida y provoca agotamiento físico y mental. Muchas personas han adoptado diferentes formas de aliviar el estreñimiento, como comer alimentos ricos en probióticos o más verduras y frutas, e incluso tomar laxantes, pero estos métodos no siempre son eficaces.
Empezaré explicando varios mitos sobre el alivio del estreñimiento, seguidos de algunas formas en que la medicina tradicional china (MTC) trata el estreñimiento. Por último, le enseñaré algunos ejercicios sencillos para mejorar el estreñimiento mejorando el peristaltismo intestinal.
La definición más sencilla de estreñimiento en el mundo médico se refiere a una frecuencia de defecación inferior a tres veces por semana, con un volumen de excreción bajo y cierta dificultad para hacerlo. O, incluso si defeca todos los días, tarda demasiado en terminar. Puede que no sea suave cada vez, o que tenga la sensación de no haber vaciado completamente los desechos.
El estreñimiento hace que las heces se acumulen en los intestinos, lo que provoca una acumulación de toxinas en el organismo que puede causar acné. Además de provocar síntomas como distensión abdominal, dolor abdominal y hemorroides a largo plazo, un mal tránsito intestinal también puede afectar al cerebro, haciendo que las personas se sientan irritables y deprimidas.
El tracto intestinal se considera nuestro «segundo cerebro«. El tracto gastrointestinal (GI), desde el esófago hasta el recto, contiene más de 100 millones de células nerviosas, con una gran variedad y cantidad de flora intestinal, lo que permite al tracto intestinal comunicarse con el cerebro. Este fenómeno también se ha registrado en antiguos clásicos de la MTC: Por ejemplo, después de que un paciente con manía es capaz de defecar, su mente se agudiza y su estado de ánimo se calma.
Las 5 causas más comunes del estreñimiento
Hay muchas causas de estreñimiento. He aquí algunas de las más comunes:
— La dieta carece de fibra y aceite, y la ingesta insuficiente de agua provoca heces secas y duras.
— La falta de ejercicio reduce la motilidad intestinal.
— La tensión y el estrés hacen que los nervios simpáticos se vuelvan hiperactivos, lo que hace que los intestinos estén tensos y no sean fáciles de mover, con la consiguiente dificultad para defecar.
—Los efectos secundarios de los analgésicos, antidepresivos y comprimidos de calcio, entre otros, pueden provocar estreñimiento.
— Si las personas no tienen un horario fijo para defecar, pueden retener las heces.
Esto suele ocurrir cuando alguien se despierta demasiado tarde y tiene que ir corriendo al trabajo. En ese momento, aunque deseen defecar, tienen que contenerse. El resultado probable es que, cuando finalmente encuentren el momento, hayan perdido la mejor oportunidad. Si esto se convierte en un hábito, con el tiempo puede provocar estreñimiento.
Hay 12 meridianos principales en el cuerpo humano, que corresponden a las vísceras. La MTC cree que los meridianos son canales por los que fluye la energía. Cada meridiano tiene su propio periodo activo durante las 24 horas del día.
El periodo activo del meridiano del intestino grueso es entre las 5 y las 7 de la mañana, por lo que es mejor dejar que el intestino se mueva después de levantarse. Una vez vaciados los intestinos, se sienten más ganas de comer. Disfrutar de un desayuno más abundante ayuda sin duda a proporcionar la energía necesaria durante el día. Por eso es muy importante intentar inducir el movimiento intestinal a primera hora de la mañana.
¿Por qué sigo estreñido incluso después de comer muchas verduras?
Muchas personas que sufren estreñimiento frecuente optan por comer más verduras de hoja verde ricas en fibra, pero aun así pueden tener problemas para evacuar.
¿A qué se debe? Una de las razones puede ser la falta de agua. Al absorber humedad, la celulosa se expande y las heces más voluminosas favorecen el peristaltismo intestinal, lo que produce un efecto laxante.
Sin embargo, tenga cuidado al hidratarse. Debe beber agua lentamente en pequeños sorbos para facilitar la absorción intestinal y reponer la humedad corporal. Beber mucha agua de una sola vez aumentará la frecuencia y la velocidad de la micción, lo que no ayuda a hidratar el cuerpo.
Además, algunas personas creen que beber agua con el estómago vacío por la mañana puede ayudar a evacuar el intestino. Esto funciona para algunas personas, pero no es adecuado para personas con poco apetito y propensas al edema. Estas personas deben beber unos 50 mililitros de agua por la mañana para calmar la sed. Lo mejor es beber agua una hora después de comer.
La mejor manera de comer lechuga para ayudar a evacuar el intestino
Algunas personas comen mucha lechuga para favorecer los movimientos intestinales, pero el efecto no es especialmente bueno. ¿Cuál es la razón?
En primer lugar, la lechuga es relativamente cruda y fría por naturaleza, lo que no es muy bueno para las personas con físicos débiles y fríos. La MTC considera que la mayoría de los alimentos son «fríos» o «calientes» por naturaleza, y comer alimentos fríos enfría el cuerpo.
Además, la lechuga que comemos habitualmente es relativamente tierna y tiene un bajo contenido en celulosa. La lechuga también es voluminosa, lo que hace que uno se sienta lleno después de consumir un tazón grande de ella, lo que resulta en una menor ingesta de celulosa. Si se cocina la lechuga, su volumen se reduce, por lo que se puede consumir más cantidad, aumentando así la ingesta de fibra. Por eso es mejor no comer verduras crudas en general, sino cocinarlas siempre que sea posible.
Además, siempre puedes añadir algunos alimentos ricos en coloides para facilitar la defecación, como los hongos y las algas.
Comer más frutas, como arándanos, ciruelas, dátiles, naranjas y mandarinas, también es muy útil.
Cómo consumir alimentos probióticos
Algunas personas comen queso para complementar los probióticos y favorecer el tránsito intestinal. Sin embargo, algunos quesos tienen un alto contenido en azúcar y calorías y suelen guardarse en el frigorífico, que es frío y no es adecuado para personas con estómagos débiles.
El kiwi es rico en prebióticos, que pueden favorecer la producción de probióticos y ayudar a defecar. Sin embargo, el kiwi es de naturaleza fría, por lo que no es apto para personas con estómagos e intestinos débiles.
Un estudio de 2012 publicado en Microbial Ecology in Health and Disease demostró que el kiwi tiene efectos prebióticos, promoviendo el crecimiento de bacterias lácticas intestinales beneficiosas (Lactobacillus y Bifidobacteria). Sin embargo, su meta-disponibilidad prebiótica viene determinada principalmente por la constitución del individuo, y el efecto solo dura mientras se come el kiwi.
Otros alimentos ricos en probióticos son el kimchi, el natto y el miso, que favorecen el tránsito intestinal.
Sin embargo, algunas personas sufren estreñimiento cuando toman suplementos probióticos. ¿Por qué? Normalmente, porque no se bebe suficiente agua o no se comen suficientes verduras. La mayoría de los productos probióticos ahora añaden celulosa soluble en agua, y beber más agua puede ayudar a conseguir mejores resultados.
Por qué tomar enzimas no ayuda con el estreñimiento
Algunas personas toman enzimas para ayudar con los movimientos intestinales, pero a veces con escasos resultados. Las enzimas pueden ajustar el físico de las personas, por lo que el efecto del consumo de enzimas para la defecación variará según el físico de cada persona.
Ya sea consumiendo enzimas, probióticos o verduras y frutas, lo más importante es hidratarse lo suficiente. El agua favorece el metabolismo e hincha los alimentos en el intestino, lo que ayuda a excretarlos mejor.
Debe evitarse el uso prolongado de laxantes
Algunas personas toman laxantes para lubricar los intestinos y ayudar a defecar, pero si se hace con demasiada frecuencia, los intestinos se fatigarán y el efecto disminuirá. Además, los laxantes suelen ser amargos y fríos para limpiar el fuego y el calor del cuerpo y no son adecuados para un uso prolongado.
En mis observaciones clínicas, descubrí que la mayoría de las personas con estreñimiento crónico que abusan de los laxantes tienen un peristaltismo intestinal débil.
Cuando trato el estreñimiento en mi clínica, no prescribo laxantes sino otros medicamentos que calientan los intestinos y promueven el peristaltismo intestinal. Después de tomarlos, las heces de los pacientes se vuelven más suaves y mejora el peristaltismo del estómago y los intestinos. También mejoran el apetito, la energía y la fuerza física.
Por lo tanto, la mejor manera de curar el estreñimiento causado por un peristaltismo intestinal débil es estimular el movimiento de los intestinos.
5 consejos para aliviar el estreñimiento
He aquí cinco métodos para favorecer el movimiento intestinal y mejorar así el estreñimiento.
— Reserva un periodo para ir al baño por la mañana, de modo que tengas tiempo suficiente para sentir la necesidad de defecar.
— Practica la «gimnasia zombi». Empieza poniéndote de puntillas con los dos pies, trota en tu sitio, deja que las manos cuelguen de forma natural, relaja el cuerpo y balancéate de un lado a otro. La gimnasia zombi también puede fortalecer la función cardíaca y pulmonar. Cuando el cuerpo se agita de esta manera, los intestinos pueden retorcerse, permitiendo que las heces se hundan hacia el ano, y habrá una sensación de caída de las heces.
— Haz movimientos de danza del vientre. Mantén los pies ligeramente flexionados y las caderas retraídas, y retuerce el vientre hacia delante y hacia atrás, entrenando los músculos abdominales y tensando la parte inferior del abdomen. A través de los músculos abdominales, el peristaltismo también puede mover los intestinos y empujar las heces hacia el ano. Este método es muy eficaz.
— Utiliza un pequeño banco para apoyar los pies al defecar y, al mismo tiempo, inclina el cuerpo ligeramente hacia delante. Este ángulo le ayudará a hacer el trabajo con más suavidad.
— Balancea la parte superior del cuerpo de un lado a otro. Primero, levanta el hombro izquierdo e inclínate hacia la izquierda, luego levanta el hombro derecho e inclínate hacia la derecha. Alterne de modo que los intestinos se muevan junto con el balanceo izquierdo y derecho, y su deseo de defecar será particularmente fuerte en este momento.
Mientras esté sentado en el retrete, no utilice el ano para ejercer la fuerza, sino deje que el vientre se retuerza de forma natural para realizar el empuje, de modo que la cantidad de heces que salga aumente con cada empujón.
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de The Epoch Times. Epoch Health acoge con agrado la discusión profesional y el debate amistoso. Para enviar un artículo de opinión, siga estas directrices y envíelo a través de nuestro formulario aquí.
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