En la madrugada del 28 de marzo de 2022, Niu Lanyun, una practicante de Falun Gong, descendió en rapel desde la vivienda que rentaba, pero pronto la policía la detuvo y se la llevó.
Cerca de las 6 de la mañana, un testigo vio a Niu bajando por una cuerda desde el tercer piso, pero la cuerda se rompió antes de que llegara al suelo. Se cayó, pero se levantó rápidamente. Un testigo llamó a una ambulancia, pero ella se negó a recibir atención médica. Pronto llegó un coche de policía y un oficial la metió en el coche y se la llevó.
En su habitación había un trozo de masa recién amasada en un cuenco, lo que indica que estaba preparando su desayuno antes de apresurarse a escapar por una cuerda. La policía también se llevó a su casero.
Pasadas las 8 de la noche, su familia fue informada de su muerte y se le pidió que fuera a la funeraria de Datong para confirmar su identidad. Su familia no recibió ninguna explicación sobre la causa de su muerte. Murió tras solo 14 horas bajo custodia policial.
Conmocionados y afligidos por su muerte, los familiares de Niu exigieron una explicación a la policía sobre las circunstancias de su muerte y que se hiciera justicia. Pidieron a la comunidad internacional que se ponga fin de inmediato a la persecución de Falun Gong, que lleva más de 20 años.
Niu fue enviada a campos de trabajo en dos ocasiones anteriores, y sufrió graves torturas por negarse a renunciar a sus creencias.
Niu nació en 1963 y era una vendedora jubilada de un comercio local en la ciudad de Datong, provincia de Shanxi. Comenzó a practicar Falun Gong en abril de 1998 y, poco después, su reumatismo desapareció, según Minghui.org.
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina de meditación tradicional china con cinco ejercicios de movimientos suaves y enseñanzas morales basadas en los principios básicos de verdad, benevolencia y tolerancia. Fue prohibida en China en julio de 1999 por orden del entonces líder del PCCh, Jiang Zemin, por temor a su popularidad.
Millones de practicantes de Falun Gong han sido detenidos en prisiones, campos de trabajo, centros de detención e instalaciones de lavado de cerebro en todo el país, donde son torturados rutinariamente y sometidos a otros abusos. Los practicantes de Falun Gong son también la principal fuente de órganos para la industria china de trasplantes con fines de lucro, autorizada por el Estado, según concluyó un tribunal popular independiente.
Niu apenas se salvó de la muerte durante las dos veces que fue retenida ilegalmente en campos de trabajo.
De enero de 2001 a enero de 2002, Niu estuvo detenida en el Campo de Trabajo de Mujeres de Shanxi por sus creencias. La policía la privó del sueño y le aplicó descargas eléctricas. Un día se negó a hacer el trabajo y una policía la tiró al suelo con tanta fuerza que inmediatamente le provocó incontinencia.
Se puso en huelga de hambre para protestar por las torturas recibidas. La policía y las reclusas la golpearon y la alimentaron a la fuerza. Añadieron drogas tóxicas al líquido utilizado en la alimentación forzada, lo que hizo que Niu se sintiera inmediatamente muy mal y con la sensación de que su mente iba a explotar.
Sufrió otros abusos, como el encierro en solitario y que le vertieran agua helada sobre su cabeza en invierno. Las autoridades del campo de trabajo tuvieron que pedir a su familia que la llevara de vuelta a casa en 2002 porque la salud de Niu se deterioró por todas las torturas.
En la primavera de 2005, volvió a ser secuestrada por la policía cuando hablaba con la gente sobre lo bueno que era Falun Gong y la persecución que sufría por parte del PCCh. La policía la encerró en el Campo de Trabajo de Xindian, en Taiyuan, la capital de la provincia de Shanxi. La alimentaron a la fuerza con una solución concentrada de agua salada mezclada con drogas tóxicas. También le administraron inyecciones intravenosas de una sustancia desconocida todos los días.
Niu Lanyun fue torturada en el campo de trabajo de Xiandian durante 70 días y su peso corporal descendió a 77 libras. La enviaron al médico para que la examinara y éste dijo que se estaba muriendo. El campo de trabajo avisó a su familia para que viniera a llevarla a casa. Treinta días después, la policía del campo de trabajo se unió a la comisaría de la calle Xinhua para secuestrar de nuevo a Niu. La torturaron durante otros 40 días antes de decirle a su familia que se la llevara a casa.
La familia de Niu también fue objeto de constantes acosos y amenazas por parte de la policía local. Seis días después del Año Nuevo chino de 2021, Niu tuvo que abandonar su casa para evitar que siguieran afectando a su familia. Encontró un lugar para rentar en la misma ciudad, y allí vivió sola antes de su muerte.
Niu no es la única practicante de Falun Gong que murió el mismo día en que fue detenida.
El 18 de junio de 2020, alrededor de las 5 de la mañana, la Oficina de Seguridad Pública del Distrito de Fengrun y la comisaría de policía de la ciudad de Tangshan, provincia de Hebei, secuestraron a unos 30 practicantes de Falun Gong de la zona, entre ellos Han Yuqin, de 68 años. Han fue declarado muerto alrededor de las 4 de la tarde del mismo día, según informó Minghui.org el 25 de junio de 2020.
Guo Zhenxiang, una mujer de 82 años de la ciudad de Zhaoyuan, en la provincia de Shandong, murió horas después de ser detenida el 11 de enero de 2019, según Minghui.org.
Minghui.org es un sitio web dedicado a informar sobre la comunidad de Falun Gong en todo el mundo, con informes de primera mano sobre la situación de los practicantes de Falun Gong en China.
La persecución de Falun Gong por parte del PCCh es constante desde 1999. Hasta ahora, hay más de 4700 casos documentados de practicantes de Falun Gong que han muerto como resultado de la tortura y el abuso en custodia policial desde julio de 1999, según Falun Dafa Infocenter.
Se cree que el número real de muertes y de practicantes de Falun Gong encarcelados es mucho mayor de lo que se ha registrado actualmente debido a la estricta censura de la información por parte del PCCh.
Con información de Li Jiesi.
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