La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó que ha enviado un equipo de respuesta rápida a Sudán del Sur después de que un centenar de personas hayan muerto a causa de una enfermedad aún no identificada.
Sheila Baya, portavoz de la OMS, declaró el martes a la BBC que la enfermedad ha causado al menos 89 muertes en el estado de Jonglei, en Sudán del Sur.
«Decidimos enviar un equipo de respuesta rápida para ir a hacer la evaluación de riesgos y la investigación; entonces podrán recoger muestras de los enfermos (…) pero provisionalmente la cifra que obtuvimos fue que había 89 muertes», dijo Baya.
Sin embargo, la respuesta de la OMS se ha visto complicada por las recientes inclemencias del tiempo y las inundaciones en Fangak, el epicentro de la nueva y misteriosa enfermedad, señaló Baya. Un funcionario sanitario local de Sudán del Sur dijo a Baya que las primeras muestras recogidas en la región dieron negativo en las pruebas de cólera, una enfermedad bacteriana que suele estar asociada a las inundaciones.
La OMS no ha emitido ninguna declaración sobre la enfermedad, y Baya no proporcionó ningún otro detalle.
La organización benéfica internacional Médicos Sin Fronteras (MSF), que opera en Sudán del Sur, dijo que las inundaciones han aumentado la presión sobre las instalaciones sanitarias.
«Estamos extremadamente preocupados por la desnutrición, con niveles de desnutrición aguda severa que duplican el umbral de la OMS», dijo MSF, «y el número de niños ingresados en nuestro hospital con desnutrición severa se ha duplicado desde el comienzo de las inundaciones».
Las Naciones Unidas también han descrito las recientes inundaciones como las peores en décadas, afectando a más de 780,000 personas en la región.
«Las mujeres, los niños y los ancianos llegaron exhaustos y hambrientos», dijo en octubre de 2021 Arafat Jamal, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Sudán del Sur, sobre las inundaciones.
Jamal añadió: «Algunos no habían comido en días. Otros están abandonados en islas rodeadas de agua, refugiándose bajo los árboles y sin poder cruzar a un lugar seguro. Las mujeres están profundamente preocupadas por la salud de sus hijos, con el aumento del riesgo de infecciones por enfermedades mortales transmitidas por el agua».
El director de Concern en Sudán del Sur, Shumon Sengupta, profundizó en la situación del país, que se separó de Sudán hace aproximadamente una década.
«La magnitud de las inundaciones de este año ha sido inmensa. Más de 200,000 personas, más de una cuarta parte de la población local del Estado de Unidad, se han visto obligadas a abandonar sus hogares como consecuencia de la subida de las aguas», dijo en una declaración.
Sengupta añadió: «Varias familias han sido desplazadas y se están refugiando en terrenos más altos, en edificios públicos o con vecinos o familiares. El acceso a los servicios básicos, incluido el apoyo sanitario y nutricional, se ha visto interrumpido, ya que algunas clínicas han sufrido daños, han quedado sumergidas en las aguas de la inundación o son inaccesibles».
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