JERUSALÉN—El ejército israelí dice que ha determinado que un soldado estadounidense-israelí que se creía que fue llevado a Gaza como rehén en realidad murió durante el ataque liderado por Hamás el 7 de octubre.
No estaba claro cómo fue que los militares determinaron que Itay Chen, de 19 años, había sido asesinado. Chen se encontraba en servicio activo el día del ataque.
La familia de Chen ha ocupado un lugar destacado en la lucha emprendida por los familiares de los rehenes para conseguir la liberación de sus seres queridos. El padre de Chen, Ruby, es estadounidense y había hecho repetidas apariciones en los medios de comunicación y se había reunido con altos funcionarios estadounidenses.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el martes que estaba «devastado» al enterarse de la muerte de Chen, tras reunirse con el padre y el hermano de Chen en la Casa Blanca en diciembre.
«Nadie debería tener que soportar ni un solo día lo que ellos han pasado», dijo Biden, agregando que Estados Unidos seguiría trabajando para conseguir la liberación de los rehenes restantes.
En un comunicado, los padres de Chen agradecieron a la administración Biden y al pueblo estadounidense su apoyo. Afirmaron que esperan que Israel y los dirigentes estadounidenses hagan todo lo posible para traer de vuelta a todos los rehenes que siguen en Gaza, incluidos los restos de su hijo.
Chen es el último rehén declarado muerto por las autoridades israelíes. Israel afirma que 34 de los rehenes que permanecen en la Franja de Gaza han muerto, ya sea durante el ataque de Hamás o durante su cautiverio.
Los extremistas de Hamás tomaron cautivas en Gaza a unas 250 personas, entre hombres, mujeres, niños y ancianos. Decenas fueron liberadas durante un cese al fuego temporal a finales de noviembre y aún permanecen cautivas unas 100 personas que se cree que siguen con vida.
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